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El principito con Audio - The little prince with audio, El Principito, CAPÍTULO 8 - The Little Prince with Audio

El Principito, CAPÍTULO 8 - The Little Prince with Audio

El Principito, CAPÍTULO 8 - The Little Prince with Audio

by Antoine de Saint-Exupéry

from https://albalearning.com/audiolibros/exupery/elprincipito01.html

Aprendí bien pronto a conocer mejor esta flor. Siempre había habido en el planeta del principito flores muy simples adornadas con una sola fila de pétalos que apenas ocupaban sitio y a nadie molestaban. Aparecían entre la hierba una mañana y por la tarde se extinguían. Pero aquella había germinado un día de una semilla llegada de quién sabe dónde, y el principito había vigilado cuidadosamente desde el primer día aquella ramita tan diferente de las que él conocía. Podía ser una nueva especie de Baobab. Pero el arbusto cesó pronto de crecer y comenzó a echar su flor. El principito observó el crecimiento de un enorme capullo y tenía el convencimiento de que habría de salir de allí una aparición milagrosa; pero la flor no acababa de preparar su belleza al abrigo de su envoltura verde. Elegía con cuidado sus colores, se vestía lentamente y se ajustaba uno a uno sus pétalos. No quería salir ya ajada como las amapolas; quería aparecer en todo el esplendor de su belleza. ¡Ah, era muy coqueta aquella flor! Su misteriosa preparación duraba días y días. Hasta que una mañana, precisamente al salir el sol se mostró espléndida.

La flor, que había trabajado con tanta precisión, dijo bostezando:

—¡Ah, perdóname… apenas acabo de despertarme… estoy toda despeinada…!

El principito no pudo contener su admiración:

—¡Qué hermosa eres!

—¿Verdad? —respondió dulcemente la flor—. He nacido al mismo tiempo que el sol.

El principito adivinó exactamente que ella no era muy modesta ciertamente, pero ¡era tan conmovedora!

—Me parece que ya es hora de desayunar — añadió la flor —; si tuvieras la bondad de pensar un poco en mí...

Y el principito, muy confuso, habiendo ido a buscar una regadera la roció abundantemente con agua fresca.

Y así, ella lo había atormentado con su vanidad un poco sombría. Un día, por ejemplo, hablando de sus cuatro espinas, dijo al principito:

—¡Ya pueden venir los tigres, con sus garras!

—No hay tigres en mi planeta —observó el principito— y, además, los tigres no comen hierba.

—Yo no soy una hierba —respondió dulcemente la flor.

—Perdóname...

—No temo a los tigres, pero tengo miedo a las corrientes de aire. ¿No tendrás un biombo?

"Miedo a las corrientes de aire no es una suerte para una planta —pensó el principito—. Esta flor es demasiado complicada…" —Por la noche me cubrirás con un fanal… hace mucho frío en tu tierra. No se está muy a gusto; allá de donde yo vengo…

La flor se interrumpió; había llegado allí en forma de semilla y no era posible que conociera otros mundos. Humillada por haberse dejado sorprender inventando una mentira tan ingenua, tosió dos o tres veces para atraerse la simpatía del principito.

—¿Y el biombo?

—Iba a buscarlo, pero como no dejabas de hablarme…

Insistió en su tos para darle al menos remordimientos.

De esta manera el principito, a pesar de la buena voluntad de su amor, había llegado a dudar de ella. Había tomado en serio palabras sin importancia y se sentía desgraciado.

"Yo no debía hacerle caso —me confesó un día el principito— nunca hay que hacer caso a las flores, basta con mirarlas y olerlas. Mi flor embalsamaba el planeta, pero yo no sabía gozar con eso… Aquella historia de garra y tigres que tanto me molestó, hubiera debido enternecerme". Y me contó todavía:

“¡No supe comprender nada entonces! Debí juzgarla por sus actos y no por sus palabras. ¡La flor perfumaba e iluminaba mi vida y jamás debí huir de allí! ¡No supe adivinar la ternura que ocultaban sus pobres astucias! ¡Son tan contradictorias las flores! Pero yo era demasiado joven para saber amarla".


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El Principito, CAPÍTULO 8  - The Little Prince with Audio

by Antoine de Saint-Exupéry

from https://albalearning.com/audiolibros/exupery/elprincipito01.html

Aprendí bien pronto a conocer mejor esta flor. I learned very soon to know this flower better. Siempre había habido en el planeta del principito flores muy simples adornadas con una sola fila de pétalos que apenas ocupaban sitio y a nadie molestaban. There had always been very simple flowers on the little prince's planet adorned with a single row of petals that barely occupied a place and nobody bothered. Aparecían entre la hierba una mañana y por la tarde se extinguían. Sie tauchten eines Morgens im Gras auf und starben am Nachmittag aus. They appeared in the grass one morning and in the evening they were extinguished. Pero aquella había germinado un día de una semilla llegada de quién sabe dónde, y el principito había vigilado cuidadosamente desde el primer día aquella ramita tan diferente de las que él conocía. But that one had germinated one day from a seed arrived from who knows where, and the little prince had watched carefully from the first day that twig so different from those he knew. Podía ser una nueva especie de Baobab. It could be a new species of Baobab. Pero el arbusto cesó pronto de crecer y comenzó a echar su flor. But the bush soon ceased to grow and began to bloom. El principito observó el crecimiento de un enorme capullo y tenía el convencimiento de que habría de salir de allí una aparición milagrosa; pero la flor no acababa de preparar su belleza al abrigo de su envoltura verde. The little prince watched the growth of a huge cocoon and was convinced that a miraculous apparition would have to come out of it; but the flower did not finish preparing its beauty under the cover of its green envelope. Elegía con cuidado sus colores, se vestía lentamente y se ajustaba uno a uno sus pétalos. She carefully chose her colors, dressed slowly, and adjusted her petals one by one. No quería salir ya ajada como las amapolas; quería aparecer en todo el esplendor de su belleza. I didn't want to go out already worn out like poppies; she wanted to appear in all the splendor of her beauty. ¡Ah, era muy coqueta aquella flor! Ah, that flower was very flirtatious! Su misteriosa preparación duraba días y días. His mysterious preparation lasted days and days. Hasta que una mañana, precisamente al salir el sol se mostró espléndida. Until one morning, just as the sun rose, it was splendid.

La flor, que había trabajado con tanta precisión, dijo bostezando: The flower, which had worked with such precision, said with a yawn:

—¡Ah, perdóname… apenas acabo de despertarme… estoy toda despeinada…! —Ah, forgive me… I just woke up… I'm all disheveled…!

El principito no pudo contener su admiración: The little prince could not contain his admiration:

—¡Qué hermosa eres! -You're beautiful!

—¿Verdad? —respondió dulcemente la flor—. The flower replied sweetly. He nacido al mismo tiempo que el sol. I was born at the same time as the sun.

El principito adivinó exactamente que ella no era muy modesta ciertamente, pero ¡era tan conmovedora! The little prince guessed exactly that she was not very modest indeed, but it was so touching!

—Me parece que ya es hora de desayunar — añadió la flor —; si tuvieras la bondad de pensar un poco en mí... "It seems to me that it is time for breakfast," added the flower; if you would kindly think about me a bit ...

Y el principito, muy confuso, habiendo ido a buscar una regadera la roció abundantemente con agua fresca. And the little prince, very confused, having gone to find a watering can, sprinkled it abundantly with fresh water.

Y así, ella lo había atormentado con su vanidad un poco sombría. Und so hatte sie ihn mit ihrer leicht düsteren Eitelkeit gequält. And so, she had tormented him with his slightly somber vanity. Et ainsi, elle l'avait tourmenté avec sa vanité un peu sombre. Un día, por ejemplo, hablando de sus cuatro espinas, dijo al principito: One day, for example, speaking of his four thorns, he said to the little prince:

—¡Ya pueden venir los tigres, con sus garras! "The tigers can come, with their claws!"

—No hay tigres en mi planeta —observó el principito— y, además, los tigres no comen hierba. "There are no tigers on my planet," observed the little prince, "and besides, tigers don't eat grass."

—Yo no soy una hierba —respondió dulcemente la flor. "I am not a grass," answered the flower sweetly.

—Perdóname...

—No temo a los tigres, pero tengo miedo a las corrientes de aire. "I'm not afraid of tigers, but I'm afraid of drafts." ¿No tendrás un biombo? Will not you have a screen?

"Miedo a las corrientes de aire no es una suerte para una planta —pensó el principito—. "Fear of air currents is not a luck for a plant, thought the little prince. Esta flor es demasiado complicada…" This flower is too complicated ... " —Por la noche me cubrirás con un fanal… hace mucho frío en tu tierra. – Nachts wirst du mich mit einer Laterne bedecken … es ist sehr kalt in deinem Land. —At night you will cover me with a lantern… it is very cold in your land. No se está muy a gusto; allá de donde yo vengo… Sie fühlen sich nicht sehr wohl; wo immer ich herkomme... It is not very comfortable; Where I come from ...

La flor se interrumpió; había llegado allí en forma de semilla y no era posible que conociera otros mundos. Die Blume blieb stehen; es war in Form eines Samenkorns dort angekommen und es war ihm nicht möglich, andere Welten zu kennen. The flower was interrupted; he had gotten there in the form of a seed and he could not possibly have known other worlds. Humillada por haberse dejado sorprender inventando una mentira tan ingenua, tosió dos o tres veces para atraerse la simpatía del principito. Humiliated for having been caught inventing such a naive lie, she coughed two or three times to attract the sympathy of the little prince.

—¿Y el biombo? "And the screen?"

—Iba a buscarlo, pero como no dejabas de hablarme… "I was going to look for him, but since you kept talking to me ..."

Insistió en su tos para darle al menos remordimientos. He insisted his cough to give the least remorse.

De esta manera el principito, a pesar de la buena voluntad de su amor, había llegado a dudar de ella. In this way the little prince, despite the good will of his love, had come to doubt her. Había tomado en serio palabras sin importancia y se sentía desgraciado. He had taken unimportant words seriously and was miserable.

"Yo no debía hacerle caso —me confesó un día el principito— nunca hay que hacer caso a las flores, basta con mirarlas y olerlas. "I shouldn't pay any attention to him," the little prince confessed to me one day, "you never have to pay attention to the flowers, just look at them and smell them. Mi flor embalsamaba el planeta, pero yo no sabía gozar con eso… Aquella historia de garra y tigres que tanto me molestó, hubiera debido enternecerme". My flower embalmed the planet, but I did not know how to enjoy it ... That story of claw and tigers that bothered me so much, should have touched me. " Y me contó todavía: And he told me yet:

“¡No supe comprender nada entonces! "I did not understand anything then! Debí juzgarla por sus actos y no por sus palabras. I should have judged her by her actions and not by her words. ¡La flor perfumaba e iluminaba mi vida y jamás debí huir de allí! The flower perfumed and illuminated my life and I should never have fled from there! ¡No supe adivinar la ternura que ocultaban sus pobres astucias! I did not know how to guess the tenderness hidden by his poor tricks! ¡Son tan contradictorias las flores! The flowers are so contradictory! Pero yo era demasiado joven para saber amarla". But I was too young to know how to love her. "