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Esp - VisualPolitik, ¿Por qué PUTIN quiere invadir UCRANIA? (si realmente quiere hacerlo) - VisualPolitik (1)

¿Por qué PUTIN quiere invadir UCRANIA? (si realmente quiere hacerlo) - VisualPolitik (1)

Esta es la pregunta del millón de dólares: ¿Por qué Putin quiere una guerra abierta en Ucrania? O,

al menos ¿Por qué Putin quiere que la OTAN piense que quiere una guerra en Ucrania?

Puede parecer una obviedad pero seguro que pocos sabríais darme una respuesta. Pensadlo así,

Rusia está en un momento realmente malo. Las cosas como son. Podemos decir que llevan en una

crisis económica desde la invasión de Crimea... ¡Y eso ocurrió en 2014! Cuando hablamos de crisis

económica, tenemos que pensar en una auténtica debacle con episodios cercanos a la hiperinflación

A todo esto hay que sumarle las sanciones económicas, que todavía siguen presentes. Y el

hecho de que entrar en guerra abierta con Ucrania supondría perder a casi todos los clientes de gas.

En VisualPolitik hemos hablado mil veces de la dependencia que tiene Europa del

gas ruso. Pero esa dependencia tiene otra cara: Europa también es el mejor cliente

de Rusia. De poco sirve tener enormes reservas de gas si no lo puedes vender.

Y, finalmente, la guinda del pastel: el coronavirus. Por mucho que Rusia sacara

la vacuna Sputnik V, su economía también ha sufrido la pandemia.

Dicho de otra forma: la economía rusa no está para muchos riesgos. Pero además... ¿Por qué

Ucrania? ¿Qué puede ganar Putin controlando Ucrania? ¿Recursos naturales? Meeeh... poca

cosa hay en este país ¿Riqueza? ¿Empresas? ¡Para nada! Ucrania es el país más pobre de Europa.

Dicho de otra forma ¿No haría mejor Putin en centrarse en su propio país?

Durante estos días, seguro que habréis oído toda clase de explicaciones de lo

más rocambolescas. Algunos llegan a comparar a Putin con el protagonista de alguna telenovela

venezolana. Uno de esos hombres celosos que le dice a su exmujer “¡Si no eres mía, no serás

de nadie!”. Pero, seamos claros: la política internacional es más compleja que todo esto.

No os vamos a engañar, aquí, en VisualPolitik no somos precísamente fans de Putin. Sí, es

cierto que en algún momento le hemos tenido como mascota del canal o incluso hemos hecho chistes

sobre él. Pero cualquiera que nos conozca sabe que somos bastante anti Putin. Ahora bien, eso no

significa que nos sirva un argumento de hombre de paja. Así que en este vídeo vamos a explicar cual

es la narrativa y las razones reales de Rusia para justificar una posible guerra. Y lo vamos

a hacer porque, línea editorial aparte, somos independientes. Este canal no está financiado

por nadie más que nuestros patreons y nuestros anunciantes. No todos pueden decir lo mismo.

Por cierto, que si queréis formar parte activa de la comunidad VisualPolitik y queréis apoyar este

proyecto, os recuerdo que tenemos nuestro Patreon. No sólo podéis colaborar con este proyecto para

que siga siendo independiente sino que además recibiréis regalos exclusivos como merchandising

o nuestra newsletter de análisis político. SI os interesa, tenéis los enlaces en la descripción.

Pero sigamos con nuestra historia. Porque la pregunta que hoy nos hacemos es ¿Qué interés

tiene Rusia en Ucrania? ¿De verdad son legítimas sus razones para arriesgar entrar en una guerra?

¿Qué le preocupa realmente a Vladimir Putin? Hoy vamos a responder a estas preguntas pero antes,

vamos a ver un poco de historia. LA GRAN NACIÓN RUSA

¿Alguna vez os habéis preguntando de dónde viene la palabra “Rusia”? Pues viene del “ANTIGUO RUS”,

que fue una federación de tribus, principalmente eslavas ¿Dónde creéis que tenía la capital?

¿Moscú? ¿San Petesburgo? Pues no: la capital estaba en KIEV, en la actual ucrania.

Dicho de otra forma: podemos decir que los primeros rusos de la historia vienen

de la actual Ucrania. El antiguo Rus llegó a ser el estado más grande de toda Europa.

Sin embargo, en el siglo 13, los mongoles, al mando de BATU KHAN, destruyeron esta federación.

Y diréis ¿Pero por qué nos remontamos tan atrás en el tiempo?

Pues por dos razones: la primera, porque es importante que entendamos el papel que juega

Ucrania en la identidad rusa. De hecho, todo lo que os estoy contando ahora está sacado,

literalmente, de discursos de Vladimir Putin (Si algún ucraniano se siente

ofendido o piensa que estoy diciendo alguna inexactitud histórica... ¡Ey! ¡Esto es sólo

la narrativa rusa!) La segunda razón por la que nos remontamos tan atrás en el tiempo es porque

tenemos que entender que Ucrania, como entidad nacional, es un país muy joven. Quiero decir,

el territorio que ahora ocupa Ucrania ha estado poblado por toda clase de

etnias y ha formado parte de toda clase de imperios. De hecho, el propio nombre

de “UCRANIA” viene de “OKRAINA”, que en ruso antiguo significa “periferia”.

Para que os hagáis una idea, en 1569, buena parte de este territorio pertenecía a la Mancomunidad de

Lituania. Habéis oído bien. Hoy en día Lituania es un país relativamente pequeño. Pero, por aquellos

años, Lituania abarcaba casi toda Polonia y parte de Ucrania. Eso explica que la nobleza y las

élites fueran católicas. Pero la zona de Crimea, sin embargo, era mayoritariamente musulmana.

Estaba ocupada por los famosos TÁRTAROS (que, por cierto, no tienen nada que ver con la salsa

tártara, por si alguno lo iba a buscar en Google). Sin embargo, al menos según la narrativa rusa,

la gente común en estas tierras hablaba ruso y profesaba la religión ortodoxa. Principalmente

los cosacos. Los cosacos eran otra etnia más de las muchas que vivían por aquí. Y estaban

cada vez más hartos de la nobleza lituano polaca. Así es como estalló una guerra contra Lituania. Y

así es como, en el año 1686, Kiev pasó a control cosaco. Toda la zona controlada por los cosacos

se llamaba “MALOROSSIA”, es decir, “la pequeña rusia”. Los cosacos se integraron en la nobleza

rusa. Y durante siglos, miles de ucranianos emigraron a Rusia como si fuera parte de su

misma patria. Para que os hagáis una idea, uno de los novelistas más importantes de la cultura

rusa es NIKOLÁS GOGOL. Escribió en ruso toda su vida. Sin embargo, nació en la actual Ucrania.

¡Pero esperad un momento! Porque estamos ya en el siglo 20 y todavía no existe

ninguna entidad nacional que podamos llamar Ucrania. De hecho, tras la

revolución bolchevique, el mapa estaba así. Como véis, hay una parte que sí pertenecía a

la Unión Soviética. Pero todavía había regiones dentro de Polonia y otras dentro de la antigua

Checoslovaqua. De hecho, cuando se creó la Unión Soviética, la República de Donestk quería formar

parte de la República Rusa. Fue Lenin quien decidió que pasara a formar parte de la nueva

República Democrática de Ucrania, que a su vez estaba dentro de la Unión Sovietica.

Dicho de otra forma: la Ucrania que hoy conocemos surge después de la Segunda Guerra Mundial. Ahí es

cuando Rusia decide que parte de los territorios conquistados entren a engrosar el territorio

ucraniano y no el ruso. Y diréis ¿Por qué? ¿No querían que Rusia fuera más grande? Pues lo

cierto es que, por aquel entonces, la frontera entre Rusia y Ucrania importaba más bien poco.

Pensadlo bien, ambos países formaban parte de la Unión Soviética. Ambos estaban controlados

desde Moscú. Ambos tenían cultura y tradiciones rusas. Ambos formaban parte de un mismo pueblo

eslavo. Todo lo demás era accesorio. Sin embargo, en el año 1991,

Ucrania se independizó. Y eso a Rusia no le hizo la más mínima gracia.

Según la narrativa soviética, fue Rusia quien reagrupó distintas etnias y regiones y las

unificó en torno a un concepto nacional único. De repente, después de que todo esto ocurriera,

llegan los ucranianos y deciden independizarse ¿No os parece injusto?

Pues... ¡Puede ser! ¿El problema? El problema es que este mismo argumento se podría aplicar

para infinidad de países que fueron colonizados ¿Qué creéis? ¿Que la India existía antes de que

llegaran los británicos? ¡Evidentemente no! Antes de la colonización británica,

el territorio de la India y Pakistán era una amalgaba de reinos y tribus. De repente llegan

los britáticos y lo unifican todo dentro de una misma colonia. Años más tarde,

los habitantes de esa colonia se independizan pero mantienen las mismas fronteras coloniales.

Lo mismo se puede decir de casi cualquier país de América Latina. Sin embargo,

creo que pocos justificarían que España reclame Colombia a estas alturas alegando

nosequé razones históricas. Pero la pregunta, la auténtica pregunta es... ¿De

verdad Putin está tan preocupado por las razones históricas? Pues no. Ahora mismo lo vamos a ver.

LO QUE REALMENTE IMPORTA Rusia tiene miedo que la OTAN coloque misiles

balísticos apuntando a su frontera. Peor aún, Rusia tiene miedo de que la OTAN coloque cabezas

nucleares apuntando a Moscú. Y diréis ¿En serio? ¡Pero si la OTAN ya tiene cabezas nucleares! Pues

sí, tenéis razón: tanto la OTAN como Rusia tienen arsenal nuclear y misiles balísticos apuntándose

el uno al otro. Ahora bien: no es lo mismo tener un misil balístico en el Oeste de Alemania,

a 2000 kilómetros de distancia de Moscú, que tenerlo en la frontera con Ucrania, que está a

700 kilómetros. En otras palabras: Rusia no quiere que la OTAN tenga países miembros en su frontera.

(Pero ¡Ojo! No penséis que los rusos son unas pobrecitas víctimas de la OTAN. Ellos tienen

una base militar gigantesca en Kaliningrado, que hace frontera con Polonia y Lituania. Y ya

os podéis imaginar lo que puede haber por ahí). Tenemos que recordar una cosa muy importante:

la OTAN es una alianza militar creada con el propósito de defenderse contra la Unión

Soviética. Es decir, que es el antagonista número uno de Rusia. Por supuesto, en los años

90 firmaron una especie de declaración de paz y prometieron que nunca harían ejercicios militares

cerca de Rusia. Sin embargo, desde entonces, la OTAN no ha dejado de expandirse hacia el Este.

En el año 1999 entraron Polonia, Hungría y República Checa. En 2004 entraron los Bálticos,

Rumanía, Bulgaria, Eslovaquia y Eslovenia. Vamos, que cada vez están más cerca de Rusia.

Desde la óptica del Kremlin, esto es toda una traición y una maniobra agresiva. Por supuesto,

desde la óptica de la OTAN, la historia es muy distinta: son todos esos países quienes

voluntariamente deciden unirse a la unión. Y tiene bastante lógica que quieran formar parte

de la OTAN. Todos ellos son países que fueron invadidos por la Unión Soviética y que quieren

escapar de la influencia rusa. Es lógico que quieran la protección de Estados Unidos y el

resto de países europeos. Eso explica que, por ejemplo, todos los edificios oficiales

de Lituania tengan banderas de la OTAN junto a su bandera nacional y la europea.

Y diréis ¿No exageran un poco? ¿Por qué tienen tanto miedo de Rusia? Si el miedo a una posible

invasión rusa podía parecer exagerado, en el año 2014, Putin demostró que era muy real. Sí,

amigos de VIsualPolitik, 2014 fue el año en el Putin invadió la península de Crimea y apoyó a

los separatistas del Este de Ucrania. Y lo hizo porque, simplemente, Ucrania quería hacer un pacto

de libre comercio con la Unión Europea. ¿Y

cuál ha sido la reacción de Ucrania? Pues, en cierto modo, podemos decir que Rusia ha perdido

mucho con esta invasión. No sólo hablamos de las sanciones a la economía rusa. El apoyo a

la OTAN se ha disparado en casi toda Ucrania. Los Ucranianos no quieren oír hablar de Rusia... salvo

los que viven en las regiones del Este: es decir, en el llamado DOMBÁS. Y ahora,

la pregunta que muchos os estaréis haciendo es... ¿Por que ahora, en 2022, Putin quiere

volver a tocar los tambores de guerra? ¿Por qué ahora? Pues ahora mismo lo vamos a ver.

PILLADO CON LOS PANTALONES BAJADOS Rusia ha colocado a más de 100.000

soldados en la frontera con Ucrania armados hasta los dientes. Hay incluso

tanques. Llevan en la zona desde otoño de 2021. Para que os hagáis una idea, esto es la cuarta

parte de todo el ejército de Ucrania al completo. Como ya hemos visto en anteriores vídeos de

VisualPolitik, Ucrania no es capaz de resistir un ataque ruso a gran escala. Sí, es verdad:


¿Por qué PUTIN quiere invadir UCRANIA? (si realmente quiere hacerlo) - VisualPolitik (1) Why PUTIN wants to invade UKRAINE (if he really wants to) - VisualPolitik (1)

Esta es la pregunta del millón de dólares: ¿Por  qué Putin quiere una guerra abierta en Ucrania? O,

al menos ¿Por qué Putin quiere que la OTAN  piense que quiere una guerra en Ucrania?

Puede parecer una obviedad pero seguro que pocos  sabríais darme una respuesta. Pensadlo así,

Rusia está en un momento realmente malo. Las  cosas como son. Podemos decir que llevan en una

crisis económica desde la invasión de Crimea...  ¡Y eso ocurrió en 2014! Cuando hablamos de crisis

económica, tenemos que pensar en una auténtica  debacle con episodios cercanos a la hiperinflación

A todo esto hay que sumarle las sanciones  económicas, que todavía siguen presentes. Y el

hecho de que entrar en guerra abierta con Ucrania  supondría perder a casi todos los clientes de gas.

En VisualPolitik hemos hablado mil veces  de la dependencia que tiene Europa del

gas ruso. Pero esa dependencia tiene otra  cara: Europa también es el mejor cliente

de Rusia. De poco sirve tener enormes  reservas de gas si no lo puedes vender.

Y, finalmente, la guinda del pastel: el  coronavirus. Por mucho que Rusia sacara

la vacuna Sputnik V, su economía  también ha sufrido la pandemia.

Dicho de otra forma: la economía rusa no está  para muchos riesgos. Pero además... ¿Por qué

Ucrania? ¿Qué puede ganar Putin controlando  Ucrania? ¿Recursos naturales? Meeeh... poca

cosa hay en este país ¿Riqueza? ¿Empresas? ¡Para  nada! Ucrania es el país más pobre de Europa.

Dicho de otra forma ¿No haría mejor  Putin en centrarse en su propio país?

Durante estos días, seguro que habréis  oído toda clase de explicaciones de lo

más rocambolescas. Algunos llegan a comparar a  Putin con el protagonista de alguna telenovela

venezolana. Uno de esos hombres celosos que le  dice a su exmujer “¡Si no eres mía, no serás

de nadie!”. Pero, seamos claros: la política  internacional es más compleja que todo esto.

No os vamos a engañar, aquí, en VisualPolitik  no somos precísamente fans de Putin. Sí, es

cierto que en algún momento le hemos tenido como  mascota del canal o incluso hemos hecho chistes

sobre él. Pero cualquiera que nos conozca sabe  que somos bastante anti Putin. Ahora bien, eso no

significa que nos sirva un argumento de hombre de  paja. Así que en este vídeo vamos a explicar cual

es la narrativa y las razones reales de Rusia  para justificar una posible guerra. Y lo vamos

a hacer porque, línea editorial aparte, somos  independientes. Este canal no está financiado

por nadie más que nuestros patreons y nuestros  anunciantes. No todos pueden decir lo mismo.

Por cierto, que si queréis formar parte activa de  la comunidad VisualPolitik y queréis apoyar este

proyecto, os recuerdo que tenemos nuestro Patreon.  No sólo podéis colaborar con este proyecto para

que siga siendo independiente sino que además  recibiréis regalos exclusivos como merchandising

o nuestra newsletter de análisis político. SI os  interesa, tenéis los enlaces en la descripción.

Pero sigamos con nuestra historia. Porque la  pregunta que hoy nos hacemos es ¿Qué interés

tiene Rusia en Ucrania? ¿De verdad son legítimas  sus razones para arriesgar entrar en una guerra?

¿Qué le preocupa realmente a Vladimir Putin? Hoy  vamos a responder a estas preguntas pero antes,

vamos a ver un poco de historia. LA GRAN NACIÓN RUSA

¿Alguna vez os habéis preguntando de dónde viene  la palabra “Rusia”? Pues viene del “ANTIGUO RUS”,

que fue una federación de tribus, principalmente  eslavas ¿Dónde creéis que tenía la capital?

¿Moscú? ¿San Petesburgo? Pues no: la capital  estaba en KIEV, en la actual ucrania.

Dicho de otra forma: podemos decir que  los primeros rusos de la historia vienen

de la actual Ucrania. El antiguo Rus llegó  a ser el estado más grande de toda Europa.

Sin embargo, en el siglo 13, los mongoles, al  mando de BATU KHAN, destruyeron esta federación.

Y diréis ¿Pero por qué nos  remontamos tan atrás en el tiempo?

Pues por dos razones: la primera, porque es  importante que entendamos el papel que juega

Ucrania en la identidad rusa. De hecho, todo  lo que os estoy contando ahora está sacado,

literalmente, de discursos de Vladimir  Putin (Si algún ucraniano se siente

ofendido o piensa que estoy diciendo alguna  inexactitud histórica... ¡Ey! ¡Esto es sólo

la narrativa rusa!) La segunda razón por la que  nos remontamos tan atrás en el tiempo es porque

tenemos que entender que Ucrania, como entidad  nacional, es un país muy joven. Quiero decir,

el territorio que ahora ocupa Ucrania  ha estado poblado por toda clase de

etnias y ha formado parte de toda clase  de imperios. De hecho, el propio nombre

de “UCRANIA” viene de “OKRAINA”, que  en ruso antiguo significa “periferia”.

Para que os hagáis una idea, en 1569, buena parte  de este territorio pertenecía a la Mancomunidad de

Lituania. Habéis oído bien. Hoy en día Lituania es  un país relativamente pequeño. Pero, por aquellos

años, Lituania abarcaba casi toda Polonia y parte  de Ucrania. Eso explica que la nobleza y las

élites fueran católicas. Pero la zona de Crimea,  sin embargo, era mayoritariamente musulmana.

Estaba ocupada por los famosos TÁRTAROS (que,  por cierto, no tienen nada que ver con la salsa

tártara, por si alguno lo iba a buscar en Google).  Sin embargo, al menos según la narrativa rusa,

la gente común en estas tierras hablaba ruso y  profesaba la religión ortodoxa. Principalmente

los cosacos. Los cosacos eran otra etnia más  de las muchas que vivían por aquí. Y estaban

cada vez más hartos de la nobleza lituano polaca.  Así es como estalló una guerra contra Lituania. Y

así es como, en el año 1686, Kiev pasó a control  cosaco. Toda la zona controlada por los cosacos

se llamaba “MALOROSSIA”, es decir, “la pequeña  rusia”. Los cosacos se integraron en la nobleza

rusa. Y durante siglos, miles de ucranianos  emigraron a Rusia como si fuera parte de su

misma patria. Para que os hagáis una idea, uno  de los novelistas más importantes de la cultura

rusa es NIKOLÁS GOGOL. Escribió en ruso toda su  vida. Sin embargo, nació en la actual Ucrania.

¡Pero esperad un momento! Porque estamos  ya en el siglo 20 y todavía no existe

ninguna entidad nacional que podamos  llamar Ucrania. De hecho, tras la

revolución bolchevique, el mapa estaba así. Como véis, hay una parte que sí pertenecía a

la Unión Soviética. Pero todavía había regiones  dentro de Polonia y otras dentro de la antigua

Checoslovaqua. De hecho, cuando se creó la Unión  Soviética, la República de Donestk quería formar

parte de la República Rusa. Fue Lenin quien  decidió que pasara a formar parte de la nueva

República Democrática de Ucrania, que a su  vez estaba dentro de la Unión Sovietica.

Dicho de otra forma: la Ucrania que hoy conocemos  surge después de la Segunda Guerra Mundial. Ahí es

cuando Rusia decide que parte de los territorios  conquistados entren a engrosar el territorio

ucraniano y no el ruso. Y diréis ¿Por qué? ¿No  querían que Rusia fuera más grande? Pues lo

cierto es que, por aquel entonces, la frontera  entre Rusia y Ucrania importaba más bien poco.

Pensadlo bien, ambos países formaban parte de  la Unión Soviética. Ambos estaban controlados

desde Moscú. Ambos tenían cultura y tradiciones  rusas. Ambos formaban parte de un mismo pueblo

eslavo. Todo lo demás era accesorio. Sin embargo, en el año 1991,

Ucrania se independizó. Y eso a Rusia  no le hizo la más mínima gracia.

Según la narrativa soviética, fue Rusia quien  reagrupó distintas etnias y regiones y las

unificó en torno a un concepto nacional único.  De repente, después de que todo esto ocurriera,

llegan los ucranianos y deciden  independizarse ¿No os parece injusto?

Pues... ¡Puede ser! ¿El problema? El problema  es que este mismo argumento se podría aplicar

para infinidad de países que fueron colonizados  ¿Qué creéis? ¿Que la India existía antes de que

llegaran los británicos? ¡Evidentemente  no! Antes de la colonización británica,

el territorio de la India y Pakistán era una  amalgaba de reinos y tribus. De repente llegan

los britáticos y lo unifican todo dentro  de una misma colonia. Años más tarde,

los habitantes de esa colonia se independizan  pero mantienen las mismas fronteras coloniales.

Lo mismo se puede decir de casi cualquier  país de América Latina. Sin embargo,

creo que pocos justificarían que España  reclame Colombia a estas alturas alegando

nosequé razones históricas. Pero la  pregunta, la auténtica pregunta es... ¿De

verdad Putin está tan preocupado por las razones  históricas? Pues no. Ahora mismo lo vamos a ver.

LO QUE REALMENTE IMPORTA Rusia tiene miedo que la OTAN coloque misiles

balísticos apuntando a su frontera. Peor aún,  Rusia tiene miedo de que la OTAN coloque cabezas

nucleares apuntando a Moscú. Y diréis ¿En serio?  ¡Pero si la OTAN ya tiene cabezas nucleares! Pues

sí, tenéis razón: tanto la OTAN como Rusia tienen  arsenal nuclear y misiles balísticos apuntándose

el uno al otro. Ahora bien: no es lo mismo tener  un misil balístico en el Oeste de Alemania,

a 2000 kilómetros de distancia de Moscú, que  tenerlo en la frontera con Ucrania, que está a

700 kilómetros. En otras palabras: Rusia no quiere  que la OTAN tenga países miembros en su frontera.

(Pero ¡Ojo! No penséis que los rusos son unas  pobrecitas víctimas de la OTAN. Ellos tienen

una base militar gigantesca en Kaliningrado,  que hace frontera con Polonia y Lituania. Y ya

os podéis imaginar lo que puede haber por ahí). Tenemos que recordar una cosa muy importante:

la OTAN es una alianza militar creada con  el propósito de defenderse contra la Unión

Soviética. Es decir, que es el antagonista  número uno de Rusia. Por supuesto, en los años

90 firmaron una especie de declaración de paz y  prometieron que nunca harían ejercicios militares

cerca de Rusia. Sin embargo, desde entonces, la  OTAN no ha dejado de expandirse hacia el Este.

En el año 1999 entraron Polonia, Hungría y  República Checa. En 2004 entraron los Bálticos,

Rumanía, Bulgaria, Eslovaquia y Eslovenia.  Vamos, que cada vez están más cerca de Rusia.

Desde la óptica del Kremlin, esto es toda una  traición y una maniobra agresiva. Por supuesto,

desde la óptica de la OTAN, la historia es  muy distinta: son todos esos países quienes

voluntariamente deciden unirse a la unión. Y  tiene bastante lógica que quieran formar parte

de la OTAN. Todos ellos son países que fueron  invadidos por la Unión Soviética y que quieren

escapar de la influencia rusa. Es lógico que  quieran la protección de Estados Unidos y el

resto de países europeos. Eso explica que,  por ejemplo, todos los edificios oficiales

de Lituania tengan banderas de la OTAN  junto a su bandera nacional y la europea.

Y diréis ¿No exageran un poco? ¿Por qué tienen  tanto miedo de Rusia? Si el miedo a una posible

invasión rusa podía parecer exagerado, en el  año 2014, Putin demostró que era muy real. Sí,

amigos de VIsualPolitik, 2014 fue el año en el  Putin invadió la península de Crimea y apoyó a

los separatistas del Este de Ucrania. Y lo hizo  porque, simplemente, Ucrania quería hacer un pacto

de libre comercio con la Unión Europea. ¿Y

cuál ha sido la reacción de Ucrania? Pues, en  cierto modo, podemos decir que Rusia ha perdido

mucho con esta invasión. No sólo hablamos de  las sanciones a la economía rusa. El apoyo a

la OTAN se ha disparado en casi toda Ucrania. Los  Ucranianos no quieren oír hablar de Rusia... salvo

los que viven en las regiones del Este:  es decir, en el llamado DOMBÁS. Y ahora,

la pregunta que muchos os estaréis haciendo  es... ¿Por que ahora, en 2022, Putin quiere

volver a tocar los tambores de guerra? ¿Por  qué ahora? Pues ahora mismo lo vamos a ver.

PILLADO CON LOS PANTALONES BAJADOS Rusia ha colocado a más de 100.000

soldados en la frontera con Ucrania  armados hasta los dientes. Hay incluso

tanques. Llevan en la zona desde otoño de 2021. Para que os hagáis una idea, esto es la cuarta

parte de todo el ejército de Ucrania al completo. Como ya hemos visto en anteriores vídeos de

VisualPolitik, Ucrania no es capaz de resistir  un ataque ruso a gran escala. Sí, es verdad: