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Libro Completo: El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha, El ingenioso hidalgo Don Quijote Capítulo IV

El ingenioso hidalgo Don Quijote Capítulo IV

Capítulo IV - De lo que le sucedió a nuestro caballero [*] cuando salió de la venta

La del alba sería [1] cuando don Quijote salió de la venta tan contento, tan gallardo, tan alborozado por verse ya armado caballero, que el gozo le reventaba por las cinchas del caballo [2].

Mas viniéndole a la memoria los consejos de su huésped cerca de las prevenciones tan necesarias que había de llevar consigo [3], especial la de los dineros y camisas [4], determinó volver a su casa y acomodarse de todo [5], y de un escudero, haciendo cuenta de recebir a un labrador vecino suyo [6] que era pobre y con hijos, pero muy a propósito para el oficio escuderil de la caballería [7]. Con este pensamiento guió a Rocinante hacia su aldea, el cual, casi conociendo la querencia [8], con tanta gana comenzó a caminar, que parecía que no ponía los pies en el suelo. No había andado mucho cuando le pareció que a su diestra mano, de la espesura de un bosque que allí estaba [9], salían unas voces delicadas, como de persona que se quejaba; y apenas las hubo oído, cuando dijo:

—Gracias doy al cielo por la merced que me hace, pues tan presto me pone ocasiones delante donde yo pueda cumplir con lo que debo a mi profesión y donde pueda coger el fruto de mis buenos deseos.

Estas voces, sin duda, son de algún menesteroso o menesterosa que ha menester mi favor y ayuda. Y, volviendo las riendas, encaminó a Rocinante hacia donde le pareció que las voces salían [10], y, a pocos pasos que entró por el bosque, vio atada una yegua a una encina, y atado en otra a un muchacho, desnudo de medio cuerpo arriba, hasta de edad de quince años [11], que era el que las voces daba, y no sin causa, porque le estaba dando con una pretina [12] muchos azotes un labrador de buen talle [13], y cada azote le acompañaba con una reprehensión y consejo.

Porque decía: —La lengua queda y los ojos listos [14].

Y el muchacho respondía:

—No lo haré otra vez, señor mío; por la pasión de Dios, que no lo haré otra vez, y yo prometo de tener de aquí adelante más cuidado con el hato [15].

Y viendo don Quijote lo que pasaba, con voz airada dijo:

—Descortés caballero, mal parece tomaros con quien defender no se puede [16]; subid sobre vuestro caballo y tomad vuestra lanza [17] —que también tenía una lanza arrimada a la encina adonde estaba arrendada [*] la yegua— [18], que yo os haré conocer ser de cobardes lo que estáis haciendo.

El labrador, que vio sobre sí aquella figura llena de armas blandiendo la lanza sobre su rostro [19], túvose por muerto, y con buenas palabras respondió:

—Señor caballero, este muchacho que estoy castigando es un mi criado, que me sirve de guardar una manada de ovejas que tengo en estos contornos, el cual es tan descuidado, que cada día me falta una; y porque castigo su descuido, o bellaquería, dice que lo hago de miserable [20], por no pagalle la soldada que le debo, y en Dios y en mi ánima que miente [21].

—¿«Miente» delante [*] de mí, ruin villano [22]?

—dijo don Quijote—. Por el sol que nos alumbra, que estoy por pasaros de parte a parte con esta lanza. Pagadle [*] luego sin más réplica; si no, por el Dios que nos rige, que os concluya y aniquile en este punto. Desatadlo luego. El labrador bajó la cabeza [23] y, sin responder palabra, desató a su criado, al cual preguntó don Quijote que cuánto le debía su amo.

Él dijo que nueve meses, a siete reales cada mes. Hizo la cuenta don Quijote y halló que montaban setenta y tres [*] reales [24], y díjole al labrador que al momento los desembolsase, si no quería morir por ello. Respondió el medroso villano que para el paso en que estaba y juramento que había hecho [25] —y aún no había jurado nada—, que no eran tantos, porque se le habían de descontar y recebir en cuenta [26] tres pares de zapatos que le había dado, y un real de dos sangrías que le habían hecho estando enfermo [27]. —Bien está todo eso —replicó don Quijote—, pero quédense los zapatos y las sangrías por los azotes que sin culpa le habéis dado, que, si él rompió el cuero de los zapatos que vos pagastes, vos le habéis rompido el de su cuerpo [28], y si le sacó el barbero sangre estando enfermo, vos en sanidad se la habéis sacado [29]; ansí que por esta parte no os debe nada.

—El daño está [30], señor caballero, en que no tengo aquí dineros: véngase Andrés conmigo a mi casa, que yo se los pagaré un real sobre otro.

—¿Irme yo con él?

—dijo el muchacho—. Mas ¡mal año [31]! No, señor [*], ni por pienso, porque en viéndose solo me desuelle [*] como a un San Bartolomé [32]. —No hará tal —replicó don Quijote—: basta que yo se lo mande para que me tenga respeto [33]; y con que él me lo jure por la ley de caballería que ha recebido [34], le dejaré ir libre y aseguraré la paga.

—Mire vuestra merced, señor, lo que dice —dijo el muchacho—, que este mi amo no es caballero, ni ha recebido orden de caballería alguna, que es Juan Haldudo el rico [35], el vecino del Quintanar [36].

—Importa poco eso —respondió don Quijote—, que Haldudos puede haber caballeros; cuanto más, que cada uno es hijo de sus obras [37].

—Así es verdad —dijo Andrés—, pero este mi amo ¿de qué obras es hijo, pues me niega mi soldada y mi sudor y trabajo?

—No niego, hermano Andrés [38] —respondió el labrador—, y hacedme placer de veniros conmigo, que yo juro por todas las órdenes que de caballerías hay en el mundo de pagaros, como tengo dicho, un real sobre otro, y aun sahumados [39].

—Del sahumerio os hago gracia [40] —dijo don Quijote—: dádselos en reales [41], que con eso me contento; y mirad que lo cumpláis como lo habéis jurado: si no, por el mismo juramento os juro de volver a buscaros y a castigaros [*], y que os tengo de hallar, aunque os escondáis más que una lagartija.

Y si queréis saber quién os manda esto, para quedar con más veras obligado a cumplirlo, sabed que yo soy el valeroso don Quijote de la Mancha, el desfacedor de agravios y sinrazones, y a Dios quedad, y no se os parta [*] de las mientes lo prometido y jurado [42], so pena de la pena pronunciada. Y, en diciendo esto, picó a su Rocinante y en breve espacio [43] se apartó dellos.

Siguióle el labrador con los ojos y, cuando vio que había traspuesto del bosque y que ya no parecía [44], volvióse a su criado Andrés y díjole: —Venid acá, hijo mío, que os quiero pagar lo que os debo, como aquel desfacedor [*] de agravios me dejó mandado.

—Eso juro yo —dijo Andrés—, y ¡cómo que andará vuestra merced acertado en cumplir el mandamiento de aquel buen caballero, que mil años viva, que, según es de valeroso y de buen juez, vive Roque [45] que si no me paga, que vuelva y ejecute lo que dijo!

—También lo juro yo —dijo el labrador—, pero, por lo mucho que os quiero, quiero acrecentar la deuda, por acrecentar [*] la paga.

Y, asiéndole del brazo, le tornó a atar a la encina, donde le dio tantos azotes, que le dejó por muerto.

—Llamad, señor Andrés, ahora —decía el labrador— al desfacedor de agravios: veréis cómo no desface aqueste; aunque creo que no está acabado de hacer, porque me viene gana de desollaros vivo, como vos temíades.

Pero al fin le desató y le dio licencia que fuese a buscar su juez [*], para que ejecutase la pronunciada sentencia.

Andrés se partió algo mohíno, jurando de ir a buscar al valeroso don Quijote de la Mancha y contalle punto por punto lo que había pasado, y que se lo había de pagar con las setenas [46]. Pero, con todo esto, él se partió llorando y su amo se quedó riendo. Y desta manera deshizo el agravio el valeroso don Quijote [47]; el cual, contentísimo de lo sucedido, pareciéndole que había dado felicísimo y alto principio a sus caballerías, con gran satisfación de sí mismo iba caminando hacia su aldea, diciendo a media voz:

—Bien te puedes llamar dichosa sobre cuantas hoy viven en la tierra, ¡oh sobre las bellas bella [48] Dulcinea del Toboso!, pues te cupo en suerte tener sujeto y rendido a toda tu voluntad e talante a un tan valiente y tan nombrado caballero como lo es y será don Quijote de la Mancha; el cual, como todo el mundo sabe, ayer rescibió la orden de caballería y hoy ha desfecho [*] el mayor tuerto y agravio que formó la sinrazón y cometió la crueldad [49]: hoy quitó el látigo de la mano a aquel despiadado [*] enemigo que tan sin ocasión vapulaba [50] a aquel delicado infante [51].

En esto, llegó a un camino que en cuatro se dividía [52], y luego se le vino [*] a la imaginación las encrucijadas [*] donde los caballeros andantes se ponían a pensar cuál camino de aquellos tomarían; y, por imitarlos, estuvo un rato quedo, y al cabo de haberlo muy bien pensado soltó la rienda a Rocinante, dejando a la voluntad del rocín la suya [53], el cual siguió su primer intento, que fue el irse camino de su caballeriza.

Y, habiendo andado como dos millas [54], descubrió don Quijote un grande tropel de gente, que, como después se supo, eran unos mercaderes toledanos que iban a comprar seda a Murcia [55]. Eran seis, y venían con sus quitasoles [56], con otros cuatro criados a caballo y tres mozos de mulas a pie. Apenas los divisó don Quijote, cuando se imaginó ser cosa de nueva aventura; y, por imitar en todo cuanto a él le parecía posible los pasos que había leído en sus libros [57], le pareció venir allí de molde [58] uno que pensaba hacer. Y, así, con gentil continente y denuedo, se afirmó bien en los estribos, apretó la lanza, llegó la adarga al pecho y, puesto en la mitad del camino, estuvo esperando que aquellos caballeros andantes llegasen, que ya él por tales los tenía y juzgaba; y, cuando llegaron a trecho que se pudieron ver y oír [59], levantó don Quijote la voz y con ademán arrogante dijo: —Todo el mundo se tenga [60], si todo el mundo no confiesa que no hay en el mundo todo doncella más hermosa que la Emperatriz de la Mancha, la sin par Dulcinea del Toboso [61].

Paráronse los mercaderes al son destas razones, y a ver la estraña figura del que las decía; y por la figura y por las razones [*] luego echaron de ver la locura de su dueño, mas quisieron ver despacio en qué paraba aquella confesión que se les pedía, y uno dellos, que era un poco burlón y muy mucho discreto [62], le dijo:

—Señor caballero, nosotros no conocemos quién sea esa buena señora que decís; mostrádnosla, que, si ella fuere de tanta hermosura como significáis, de buena gana y sin apremio alguno confesaremos la verdad que por parte vuestra nos es pedida.

—Si os la mostrara —replicó don Quijote—, ¿qué hiciérades vosotros en confesar una verdad tan notoria [63]?

La importancia está en que sin verla lo habéis de creer, confesar, afirmar, jurar y defender [64]; donde no [65], conmigo sois en batalla, gente descomunal y soberbia [66]. Que ahora vengáis uno a uno, como pide la orden de caballería, ora todos juntos, como es costumbre y mala usanza de los de vuestra ralea, aquí os aguardo y espero, confiado en la razón que de mi parte tengo. —Señor caballero —replicó el mercader—, suplico a vuestra merced en nombre de todos estos príncipes que aquí estamos que, porque no encarguemos nuestras conciencias [67] confesando una cosa por nosotros jamás vista ni oída [68], y más siendo tan en perjuicio de las emperatrices y reinas del Alcarria y Estremadura, que vuestra merced sea servido de mostrarnos algún retrato de esa señora, aunque sea tamaño como un grano de trigo [69]; que por el hilo se sacará el ovillo [70] y quedaremos con esto satisfechos y seguros, y vuestra merced quedará contento y pagado [71]; y aun creo que estamos ya tan de su parte, que, aunque su retrato nos muestre que es tuerta de un ojo y que del otro le mana bermellón y piedra azufre [72], con todo eso, por complacer a vuestra merced, diremos en su favor todo lo que quisiere.

—No le mana, canalla infame —respondió don Quijote encendido en cólera—, no le mana, digo, eso que decís, sino ámbar y algalia entre algodones [73]; y no es tuerta ni corcovada [74], sino más derecha que un huso de Guadarrama [75].

Pero vosotros pagaréis la grande blasfemia que habéis dicho contra tamaña beldad como es la de mi señora. Y, en diciendo esto, arremetió con la lanza baja contra el que lo había dicho, con tanta furia y enojo, que si la buena suerte no hiciera que en la mitad del camino tropezara y cayera Rocinante, lo pasara mal el atrevido mercader.

Cayó Rocinante, y fue rodando su amo una buena pieza por el campo [76]; y, queriéndose levantar, jamás pudo [77]: tal embarazo le causaban la lanza, adarga, espuelas y celada, con el peso de las antiguas armas. Y, entre tanto que pugnaba por levantarse y no podía, estaba diciendo: —Non fuyáis, gente cobarde; gente cautiva, atended [78] que no por culpa mía, sino de mi caballo, estoy aquí tendido [79].

Un mozo de mulas de los que allí venían, que no debía de ser muy bienintencionado, oyendo decir al pobre caído tantas arrogancias, no lo pudo sufrir sin darle la respuesta en las costillas.

Y, llegándose a él, tomó la lanza y, después de haberla hecho pedazos [80], con uno dellos comenzó a dar a nuestro don Quijote tantos palos, que, a despecho y pesar de sus armas, le molió como cibera [81]. Dábanle voces sus amos que no le diese tanto y que le dejase; pero estaba ya el mozo picado y no quiso dejar el juego hasta envidar todo el resto de su cólera [82]; y, acudiendo por los demás trozos de la lanza, los acabó de deshacer sobre el miserable caído, que, con toda aquella tempestad de palos que sobre él llovía [*] [83], no cerraba la boca, amenazando al cielo y a la tierra, y a los malandrines [84], que tal le parecían. Cansóse el mozo, y los mercaderes siguieron su camino, llevando que contar en todo él del pobre apaleado.

El cual, después que se vio solo, tornó a probar si podía levantarse; pero si no lo pudo hacer cuando sano y bueno, ¿cómo lo haría molido y casi deshecho? Y aun se tenía por dichoso, pareciéndole que aquella era propia desgracia de caballeros andantes, y toda la atribuía a la falta de su caballo; y no era posible levantarse, según tenía brumado todo el cuerpo [85].

El ingenioso hidalgo Don Quijote Capítulo IV Der geniale Herr Don Quijote Kapitel IV The Ingenious Hidalgo Don Quixote Chapter IV L'ingénieux gentilhomme Don Quichotte Chapitre IV Il geniale gentiluomo Don Chisciotte Capitolo IV 独創的な紳士 ドン・キホーテ 第四章 O Engenhoso Cavalheiro Dom Quixote Capítulo IV Хитроумный джентльмен Дон Кихот Глава IV

Capítulo IV - De lo que le sucedió a nuestro caballero [*] cuando salió de la venta Chapter IV - What happened to our gentleman [*] when he left the sale

La del alba sería [1] cuando don Quijote salió de la venta tan contento, tan gallardo, tan alborozado por verse ya armado caballero, que el gozo le reventaba por las cinchas del caballo [2]. That of dawn would be [1] when Don Quixote came out of the sale so happy, so gallant, so elated to see himself already armed knight, that joy burst through his horse's straps [2].

Mas viniéndole a la memoria los consejos de su huésped cerca de las prevenciones tan necesarias que había de llevar consigo [3], especial la de los dineros y camisas [4], determinó volver a su casa y acomodarse de todo [5], y de un escudero, haciendo cuenta de recebir a un labrador vecino suyo [6] que era pobre y con hijos, pero muy a propósito para el oficio escuderil de la caballería [7]. But remembering the advice of his guest about the necessary precautions that he had to take with him [3], especially that of money and shirts [4], he decided to return to his home and accommodate everything [5], and of a squire, making a point of receiving a neighbor farmer of his [6] who was poor and with children, but very purposeful for the cavalry squad trade [7]. Con este pensamiento guió a Rocinante hacia su aldea, el cual, casi conociendo la querencia [8], con tanta gana comenzó a caminar, que parecía que no ponía los pies en el suelo. With this thought he guided Rocinante to his village, which, almost knowing the love [8], began to walk so eagerly that it seemed that he was not putting his feet on the ground. No había andado mucho cuando le pareció que a su diestra mano, de la espesura de un bosque que allí estaba [9], salían unas voces delicadas, como de persona que se quejaba; y apenas las hubo oído, cuando dijo: He had not walked much when it seemed to him that at his right hand, out of the thicket of a forest that was there [9], delicate voices came out, like a person who was complaining; and he had barely heard them, when he said:

—Gracias doy al cielo por la merced que me hace, pues tan presto me pone ocasiones delante donde yo pueda cumplir con lo que debo a mi profesión y donde pueda coger el fruto de mis buenos deseos. —Thanks to heaven for the mercy he makes me, because he quickly puts me on occasions where I can fulfill what I owe to my profession and where I can take the fruit of my good wishes.

Estas voces, sin duda, son de algún menesteroso o menesterosa que ha menester mi favor y ayuda. These voices, no doubt, are from some needy or needy person who has my favor and help. Y, volviendo las riendas, encaminó a Rocinante hacia donde le pareció que las voces salían [10], y, a pocos pasos que entró por el bosque, vio atada una yegua a una encina, y atado en otra a un muchacho, desnudo de medio cuerpo arriba, hasta de edad de quince años [11], que era el que las voces daba, y no sin causa, porque le estaba dando con una pretina [12] muchos azotes un labrador de buen talle [13], y cada azote le acompañaba con una reprehensión y consejo. And, turning the reins, he directed Rocinante towards where he thought the voices were coming from [10], and, a few steps after he entered the woods, he saw a mare tied to an oak tree, and a boy tied to another, naked from the woods. half body up, up to the age of fifteen [11], who was the one who was shouting, and not without cause, because he was being given many lashes with a waistband [12] by a well-built farmer [13], and each whipping accompanied him with a rebuke and advice.

Porque decía: Because it said: —La lengua queda y los ojos listos [14]. -The tongue remains and the eyes are ready [14].

Y el muchacho respondía:

—No lo haré otra vez, señor mío; por la pasión de Dios, que no lo haré otra vez, y yo prometo de tener de aquí adelante más cuidado con el hato [15]. “I won't do it again, my lord; by the passion of God, I will not do it again, and I promise to be more careful with the herd from now on [15].

Y viendo don Quijote lo que pasaba, con voz airada dijo: And when Don Quixote saw what was happening, he said in an angry voice:

—Descortés caballero, mal parece tomaros con quien defender no se puede [16]; subid sobre vuestro caballo y tomad vuestra lanza [17] —que también tenía una lanza arrimada a la encina adonde estaba arrendada [*] la yegua— [18], que yo os haré conocer ser de cobardes lo que estáis haciendo. - Rude gentleman, it seems bad to take you with whom to defend you cannot [16]; get on your horse and take your spear [17] —which also had a spear raised to the oak where the mare was leased [*] - [18], which I will make known to you as cowards what you are doing.

El labrador, que vio sobre sí aquella figura llena de armas blandiendo la lanza sobre su rostro [19], túvose por muerto, y con buenas palabras respondió: The farmer, who saw that figure above him, full of weapons, brandishing the spear over his face [19], thought he was dead, and with good words he answered:

—Señor caballero, este muchacho que estoy castigando es un mi criado, que me sirve de guardar una manada de ovejas que tengo en estos contornos, el cual es tan descuidado, que cada día me falta una; y porque castigo su descuido, o bellaquería, dice que lo hago de miserable [20], por no pagalle la soldada que le debo, y en Dios y en mi ánima que miente [21]. -Sir knight, this boy that I am punishing is a servant of mine, who serves me to guard a flock of sheep that I have in these parts, who is so careless that every day I miss one; and because I punish his carelessness, he says that I make him miserable [20], for not paying him the salary that I owe him, and in God and in my soul he lies [21].

—¿«Miente» delante [*] de mí, ruin villano [22]? "Lies" in front [*] of me, mean villain [22]?

—dijo don Quijote—. Por el sol que nos alumbra, que estoy por pasaros de parte a parte con esta lanza. For the sun that shines on us, I am about to pass you from side to side with this spear. Pagadle [*] luego sin más réplica; si no, por el Dios que nos rige, que os concluya y aniquile en este punto. Pay him [*] then without further reply; if not, by the God who governs us, to conclude and annihilate you at this point. Desatadlo luego. Untie it later. El labrador bajó la cabeza [23] y, sin responder palabra, desató a su criado, al cual preguntó don Quijote que cuánto le debía su amo. The farmer lowered his head [23] and, without answering a word, unleashed his servant, to whom Don Quixote asked how much his master owed him.

Él dijo que nueve meses, a siete reales cada mes. He said nine months, at seven reais each month. Hizo la cuenta don Quijote y halló que montaban setenta y tres [*] reales [24], y díjole al labrador que al momento los desembolsase, si no quería morir por ello. Don Quijote made the account and found that they were riding seventy-three [*] reais [24], and told the farmer to disburse them at the moment, if he did not want to die for it. Respondió el medroso villano que para el paso en que estaba y juramento que había hecho [25] —y aún no había jurado nada—, que no eran tantos, porque se le habían de descontar y recebir en cuenta [26] tres pares de zapatos que le había dado, y un real de dos sangrías que le habían hecho estando enfermo [27]. The fearful villain replied that for the step he was in and the oath he had sworn [25] - and he had not yet sworn anything - that they were not so many, because three pairs of shoes he had given him and a real for two bloodlettings he had received while he was ill [27] were to be deducted and received on account [26]. —Bien está todo eso —replicó don Quijote—, pero quédense los zapatos y las sangrías por los azotes que sin culpa le habéis dado, que, si él rompió el cuero de los zapatos que vos pagastes, vos le habéis rompido el de su cuerpo [28], y si le sacó el barbero sangre estando enfermo, vos en sanidad se la habéis sacado [29]; ansí que por esta parte no os debe nada. "All that is well," replied Don Quixote, "but keep the shoes and the indentations for the scourges you have given him without guilt, that if he broke the leather of the shoes you paid for, you have broken his body [28], and if the barber took blood from him while he was ill, you have taken it out in health [29]; I wanted to owe you nothing on this part

—El daño está [30], señor caballero, en que no tengo aquí dineros: véngase Andrés conmigo a mi casa, que yo se los pagaré un real sobre otro. "The damage is [30], Mr. Gentleman, that I don't have any money here: come with me to my house, that I will pay you one real over another."

—¿Irme yo con él?

—dijo el muchacho—. Mas ¡mal año [31]! More bad year [31]! No, señor [*], ni por pienso, porque en viéndose solo me desuelle [*] como a un San Bartolomé [32]. No, sir [*], I don't even think about it, because when I see myself, I only get dislodged [*] like a Saint Bartholomew [32]. —No hará tal —replicó don Quijote—: basta que yo se lo mande para que me tenga respeto [33]; y con que él me lo jure por la ley de caballería que ha recebido [34], le dejaré ir libre y aseguraré la paga. -He will do no such thing," replied Don Quixote; "it is enough that I command him to do so for him to have respect for me; [33] and if he swears it to me by the law of chivalry which he has received, [34] I will let him go free and secure his pay.

—Mire vuestra merced, señor, lo que dice —dijo el muchacho—, que este mi amo no es caballero, ni ha recebido orden de caballería alguna, que es Juan Haldudo el rico [35], el vecino del Quintanar [36]. -Look at what you say, sir," said the boy, "that this my master is not a knight, nor has he received any order of knighthood, that he is Juan Haldudo the rich [35], the neighbor of Quintanar [36].

—Importa poco eso —respondió don Quijote—, que Haldudos puede haber caballeros; cuanto más, que cada uno es hijo de sus obras [37]. -That matters little," replied Don Quixote, "for there may be knights in the Haldudos, and all the more, for each one is the son of his works [37].

—Así es verdad —dijo Andrés—, pero este mi amo ¿de qué obras es hijo, pues me niega mi soldada y mi sudor y trabajo? -So it is true," said Andrés, "but this master of mine is the son of what works, for he denies me my wages and my sweat and toil?

—No niego, hermano Andrés [38] —respondió el labrador—, y hacedme placer de veniros conmigo, que yo juro por todas las órdenes que de caballerías hay en el mundo de pagaros, como tengo dicho, un real sobre otro, y aun sahumados [39]. -I do not deny, brother Andrés [38]," replied the farmer, "and do me the pleasure of coming with me, for I swear by all the orders of chivalry in the world to pay you, as I have said, one real on top of another, and even sahumados [39].

—Del sahumerio os hago gracia [40] —dijo don Quijote—: dádselos en reales [41], que con eso me contento; y mirad que lo cumpláis como lo habéis jurado: si no, por el mismo juramento os juro de volver a buscaros y a castigaros [*], y que os tengo de hallar, aunque os escondáis más que una lagartija. "I give you grace from the incense [40]," said Don Quixote, "give them to them in reais [41], and with that I am happy; and see that you fulfill it as you have sworn: if not, by the same oath I swear to you again to seek and punish you [*], and that I have to find you, although you hide more than a lizard.

Y si queréis saber quién os manda esto, para quedar con más veras obligado a cumplirlo, sabed que yo soy el valeroso don Quijote de la Mancha, el desfacedor de agravios y sinrazones, y a Dios quedad, y no se os parta [*] de las mientes lo prometido y jurado [42], so pena de la pena pronunciada. And if you want to know who sends you this, to be more obliged to fulfill it, know that I am the courageous Don Quixote de la Mancha, the grievance and unreasonable desfacedor, and God remains, and do not depart [*] from you lie as promised and sworn [42], under penalty of pronounced penalty. Y, en diciendo esto, picó a su Rocinante y en breve espacio [43] se apartó dellos. And, in saying this, he stung his Rocinante and in a short space [43] turned away from them.

Siguióle el labrador con los ojos y, cuando vio que había traspuesto del bosque y que ya no parecía [44], volvióse a su criado Andrés y díjole: The farmer followed him with his eyes, and when he saw that he had gone beyond the forest and no longer appeared [44], he turned to his servant Andrés and said to him: —Venid acá, hijo mío, que os quiero pagar lo que os debo, como aquel desfacedor [*] de agravios me dejó mandado. "Come here, my son, that I want to pay you what I owe you, as that wrecker [*] of grievances left me commanded."

—Eso juro yo —dijo Andrés—, y ¡cómo que andará vuestra merced acertado en cumplir el mandamiento de aquel buen caballero, que mil años viva, que, según es de valeroso y de buen juez, vive Roque [45] que si no me paga, que vuelva y ejecute lo que dijo! -That I swear," said Andrés, "and how will you be right in fulfilling the commandment of that good knight, who lives a thousand years, who, according to his courage and good judge, Roque [45] lives, and if he does not pay me, let him come back and do what he said!

—También lo juro yo —dijo el labrador—, pero, por lo mucho que os quiero, quiero acrecentar la deuda, por acrecentar [*] la paga. "I swear it too," said the farmer, "but as much as I love you, I want to increase the debt, by increasing [*] the pay.

Y, asiéndole del brazo, le tornó a atar a la encina, donde le dio tantos azotes, que le dejó por muerto. And, grabbing his arm, he tied him back to the oak, where he beat him so many times, that he left him for dead.

—Llamad, señor Andrés, ahora —decía el labrador— al desfacedor de agravios: veréis cómo no desface aqueste; aunque creo que no está acabado de hacer, porque me viene gana de desollaros vivo, como vos temíades. "Call, Mr. Andres, now," said the farmer, "to the grievance despletor: you will see how it does not dislike this; although I think it is not done, because I want to skin you alive, as you feared.

Pero al fin le desató y le dio licencia que fuese a buscar su juez [*], para que ejecutase la pronunciada sentencia. But at last he untied him and gave him license to go and fetch his judge [*], so that he might execute the sentence pronounced.

Andrés se partió algo mohíno, jurando de ir a buscar al valeroso don Quijote de la Mancha y contalle punto por punto lo que había pasado, y que se lo había de pagar con las setenas [46]. Andres broke something mohíno, swearing to go look for the courageous Don Quixote de la Mancha and detail point by point what had happened, and that he had to pay it with the setenas [46]. Pero, con todo esto, él se partió llorando y su amo se quedó riendo. But, with all this, he broke down crying and his master laughed. Y desta manera deshizo el agravio el valeroso don Quijote [47]; el cual, contentísimo de lo sucedido, pareciéndole que había dado felicísimo y alto principio a sus caballerías, con gran satisfación de sí mismo iba caminando hacia su aldea, diciendo a media voz: And in this way the valiant Don Quixote [47] undid the wrong; who, very happy with what had happened, and feeling that he had made a happy and lofty beginning to his chivalry, with great satisfaction in himself, went on his way to his village, saying in a half-voice:

—Bien te puedes llamar dichosa sobre cuantas hoy viven en la tierra, ¡oh sobre las bellas bella [48] Dulcinea del Toboso!, pues te cupo en suerte tener sujeto y rendido a toda tu voluntad e talante a un tan valiente y tan nombrado caballero como lo es y será don Quijote de la Mancha; el cual, como todo el mundo sabe, ayer rescibió la orden de caballería y hoy ha desfecho [*] el mayor tuerto y agravio que formó la sinrazón y cometió la crueldad [49]: hoy quitó el látigo de la mano a aquel despiadado [*] enemigo que tan sin ocasión vapulaba [50] a aquel delicado infante [51]. —You can well call yourself happy about how many live on earth today, oh about the beautiful ones [48] Dulcinea del Toboso! a gentleman as he is and will be Don Quixote de la Mancha; which, as everyone knows, yesterday received the order of chivalry and today has committed [*] the greatest one-eyed and wrong that formed unreason and committed cruelty [49]: today he took the whip out of the hand of that ruthless [ *] enemy who so without occasion [50] beat that delicate infant [51].

En esto, llegó a un camino que en cuatro se dividía [52], y luego se le vino [*] a la imaginación las encrucijadas [*] donde los caballeros andantes se ponían a pensar cuál camino de aquellos tomarían; y, por imitarlos, estuvo un rato quedo, y al cabo de haberlo muy bien pensado soltó la rienda a Rocinante, dejando a la voluntad del rocín la suya [53], el cual siguió su primer intento, que fue el irse camino de su caballeriza.

Y, habiendo andado como dos millas [54], descubrió don Quijote un grande tropel de gente, que, como después se supo, eran unos mercaderes toledanos que iban a comprar seda a Murcia [55]. And, having gone about two miles [54], Don Quixote discovered a large crowd of people, who, as was later learned, were merchants from Toledo who were going to buy silk in Murcia [55]. Eran seis, y venían con sus quitasoles [56], con otros cuatro criados a caballo y tres mozos de mulas a pie. There were six of them, and they came with their sunshades [56], with four other servants on horseback and three young mules on foot. Apenas los divisó don Quijote, cuando se imaginó ser cosa de nueva aventura; y, por imitar en todo cuanto a él le parecía posible los pasos que había leído en sus libros [57], le pareció venir allí de molde [58] uno que pensaba hacer. Scarcely had Don Quixote caught sight of them when he imagined that they were the stuff of a new adventure; and, imitating as far as he thought possible the steps he had read about in his books, [57] it seemed to him that one of the steps he was planning to take came from the mold [58]. Y, así, con gentil continente y denuedo, se afirmó bien en los estribos, apretó la lanza, llegó la adarga al pecho y, puesto en la mitad del camino, estuvo esperando que aquellos caballeros andantes llegasen, que ya él por tales los tenía y juzgaba; y, cuando llegaron a trecho que se pudieron ver y oír [59], levantó don Quijote la voz y con ademán arrogante dijo: And, thus, with gentle continent and boldness, he firmly established himself in the stirrups, tightened his lance, brought his dagger to his breast and, standing in the middle of the road, waited for those knights-errant to arrive, whom he already considered and judged as such; and, when they reached such a distance that they could be seen and heard [59], Don Quixote raised his voice and with an arrogant gesture said: —Todo el mundo se tenga [60], si todo el mundo no confiesa que no hay en el mundo todo doncella más hermosa que la Emperatriz de la Mancha, la sin par Dulcinea del Toboso [61]. -Everyone will have [60], if everyone does not confess that there is no fairer maiden in the world than the Empress of La Mancha, the peerless Dulcinea del Toboso [61].

Paráronse los mercaderes al son destas razones, y a ver la estraña figura del que las decía; y por la figura y por las razones [*] luego echaron de ver la locura de su dueño, mas quisieron ver despacio en qué paraba aquella confesión que se les pedía, y uno dellos, que era un poco burlón y muy mucho discreto [62], le dijo: The merchants stopped at the sound of these words, and to see the strange figure of the one who spoke them; and by the figure and the words [*] they immediately saw the madness of their master, but they wanted to see slowly what the confession that was asked of them was about, and one of them, who was a little mocking and very discreet [62], told him:

—Señor caballero, nosotros no conocemos quién sea esa buena señora que decís; mostrádnosla, que, si ella fuere de tanta hermosura como significáis, de buena gana y sin apremio alguno confesaremos la verdad que por parte vuestra nos es pedida. -Sir knight, we do not know who this good lady is that you say; show her to us, and if she is as beautiful as you say she is, we will willingly and without any compulsion confess the truth that is asked of us on your behalf.

—Si os la mostrara —replicó don Quijote—, ¿qué hiciérades vosotros en confesar una verdad tan notoria [63]? -If I were to show it to you," replied Don Quixote, "what would you do to confess such a notorious truth [63]?

La importancia está en que sin verla lo habéis de creer, confesar, afirmar, jurar y defender [64]; donde no [65], conmigo sois en batalla, gente descomunal y soberbia [66]. The importance is that without seeing it you have to believe it, confess, affirm, swear and defend [64]; where not [65], with me you are in battle, huge people and superb [66]. Que ahora vengáis uno a uno, como pide la orden de caballería, ora todos juntos, como es costumbre y mala usanza de los de vuestra ralea, aquí os aguardo y espero, confiado en la razón que de mi parte tengo. —Señor caballero —replicó el mercader—, suplico a vuestra merced en nombre de todos estos príncipes que aquí estamos que, porque no encarguemos nuestras conciencias [67] confesando una cosa por nosotros jamás vista ni oída [68], y más siendo tan en perjuicio de las emperatrices y reinas del Alcarria y Estremadura, que vuestra merced sea servido de mostrarnos algún retrato de esa señora, aunque sea tamaño como un grano de trigo [69]; que por el hilo se sacará el ovillo [70] y quedaremos con esto satisfechos y seguros, y vuestra merced quedará contento y pagado [71]; y aun creo que estamos ya tan de su parte, que, aunque su retrato nos muestre que es tuerta de un ojo y que del otro le mana bermellón y piedra azufre [72], con todo eso, por complacer a vuestra merced, diremos en su favor todo lo que quisiere.

—No le mana, canalla infame —respondió don Quijote encendido en cólera—, no le mana, digo, eso que decís, sino ámbar y algalia entre algodones [73]; y no es tuerta ni corcovada [74], sino más derecha que un huso de Guadarrama [75]. "It does not flow, infamous scoundrel," replied Don Quixote, enraged in anger, "it does not flow, I say, what you say, but amber and algalia among cottons [73]; and it is not one-eyed or corcovada [74], but more right than a spindle of Guadarrama [75].

Pero vosotros pagaréis la grande blasfemia que habéis dicho contra tamaña beldad como es la de mi señora. But you will pay the great blasphemy that you have said against such beauty as is my lady's. Y, en diciendo esto, arremetió con la lanza baja contra el que lo había dicho, con tanta furia y enojo, que si la buena suerte no hiciera que en la mitad del camino tropezara y cayera Rocinante, lo pasara mal el atrevido mercader. And, in saying this, he lashed out with his spear lowered against the one who had said it, with such fury and anger, that if good fortune did not cause him to stumble and fall in the middle of the road, the daring merchant would have a hard time of it.

Cayó Rocinante, y fue rodando su amo una buena pieza por el campo [76]; y, queriéndose levantar, jamás pudo [77]: tal embarazo le causaban la lanza, adarga, espuelas y celada, con el peso de las antiguas armas. Rocinante fell, and his master was rolling a good piece through the countryside [76]; and, wanting to get up, he could never [77]: such pregnancy was caused by the spear, adarga, spurs and headpiece, with the weight of the old weapons. Y, entre tanto que pugnaba por levantarse y no podía, estaba diciendo: And, in between struggling to get up and not being able to, he was saying: —Non fuyáis, gente cobarde; gente cautiva, atended [78] que no por culpa mía, sino de mi caballo, estoy aquí tendido [79]. -Don't run away, you cowardly people; you captive people, take heed [78] that it is not my fault, but my horse's, that I am lying here [79].

Un mozo de mulas de los que allí venían, que no debía de ser muy bienintencionado, oyendo decir al pobre caído tantas arrogancias, no lo pudo sufrir sin darle la respuesta en las costillas. A mule driver, who must not have been very well-intentioned, hearing the poor fallen man say so many arrogant things, could not bear it without giving him an answer in the ribs.

Y, llegándose a él, tomó la lanza y, después de haberla hecho pedazos [80], con uno dellos comenzó a dar a nuestro don Quijote tantos palos, que, a despecho y pesar de sus armas, le molió como cibera [81]. And, coming to him, he took the spear and, after having broken it apart [80], with one of them he began to give our Don Quixote so many sticks, that, in spite and despite his weapons, he ground him like a cybera [81] . Dábanle voces sus amos que no le diese tanto y que le dejase; pero estaba ya el mozo picado y no quiso dejar el juego hasta envidar todo el resto de su cólera [82]; y, acudiendo por los demás trozos de la lanza, los acabó de deshacer sobre el miserable caído, que, con toda aquella tempestad de palos que sobre él llovía [*] [83], no cerraba la boca, amenazando al cielo y a la tierra, y a los malandrines [84], que tal le parecían. But the young man was already stung and did not want to give up the game until all the rest of his anger [82] was spent; and, going for the rest of the pieces of the spear, he finished undoing them on the fallen wretch, who, with all the tempest of sticks that rained down on him [*] [83], did not shut his mouth, threatening heaven and earth, and the scoundrels [84], who seemed to him to be just like that. Cansóse el mozo, y los mercaderes siguieron su camino, llevando que contar en todo él del pobre apaleado. The waiter tired, and the merchants went on their way, taking with them the poor beaten man to tell them all about it.

El cual, después que se vio solo, tornó a probar si podía levantarse; pero si no lo pudo hacer cuando sano y bueno, ¿cómo lo haría molido y casi deshecho? When he saw himself alone, he tried again to see if he could get up; but if he could not do it when he was healthy and well, how could he do it when he was ground up and almost broken? Y aun se tenía por dichoso, pareciéndole que aquella era propia desgracia de caballeros andantes, y toda la atribuía a la falta de su caballo; y no era posible levantarse, según tenía brumado todo el cuerpo [85]. And he even considered himself fortunate, thinking that this was a misfortune befitting knights-errant, and he attributed it all to the lack of his horse; and it was not possible for him to get up, since his whole body was foggy [85].