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El 19 de Marzo y el 2 de Mayo by Benito Pérez Galdós, XVI

XVI

Por las noches, después de cenar, rezábamos el rosario, que llevaba el amo de la casa con voz becerrona; y concluida la oración al patrono bendito, permanecían en la trastienda en plácida tertulia que sólo duraba hora y media, y a la cual solía concurrir algún antiguo amigo o vecino cercano. La noche de mi inauguración no se alteró tan santa costumbre. D. Mauro, su hermana, Juan de Dios, Inés y yo, decíamos el último ora pro nobis , cuando sonó la campanilla del entresuelo y mandáronme que abriese.

-Es el vecino Lobo -dijo mi ama.

Figúrense mis lectores cuál sería mi confusión cuando al abrir la puerta encaré con la espantable fisonomía del licenciado de los espejuelos verdes que había querido prenderme cinco meses antes en el Escorial. El temor de que me conociera diome gran turbación; pero tuve la suerte de que el ilustre leguleyo no parara mientes en mi persona. No sé si he dicho que en mí se estaba verificando la trasformación propia de la edad, y que un repentino desarrollo había engrosado mi cuerpo y redondeado mi cara, donde ya me apuntaba ligero bozo. Estafue la causa de que el licenciado Lobo no me reconociera, como yo temía.

-Señores -dijo Lobo sentándose en un cajón de medias-, hoy es día de universal enhorabuena. Ya tenemos a nuestro Rey en el trono. ¿No han salido ustedes? Pues está Madrid que parece un ascua de oro. ¡Qué luminarias, qué banderas, qué gentío por esas calles de Dios!

-Nosotros no salimos a ver luminarias -contestó Requejo-, que harto tenemos que hacer en casa. Ay, Sr. de Lobo ¡qué trabajo! Aquí no hay haraganes; y se gana el pan de cada día como Dios manda.

-Loado sea Dios -añadió el leguleyo-, y vivan los hombres ricos como D. Mauro Requejo, que a fuerza de inteligencia...

-La honradez, nada más que la honradez -dijo Requejo rascándose los codos.

-¡Viva el comercio! -exclamó Lobo-; lo que es la pluma, Sr. D. Mauro, no da ni para zapatos. Ahí estoy yo hace veinte y dos años en mi placita del Consejo y Cámara de Castilla, y Dios sabe que hasta hoy no he salido de pobre. Mucho romper de zapatos para andar en las actuaciones y nada más. Lo que hay es que ahora espero que me den una de las escribanías de Cámara, que harto la merece este cuerpo que se ha de comer la tierra.

-Como Vd. ha servido al favorito...

-No... diré a Vd. ; yo no me he andado en dibujos,y serví al gobierno anterior con buena fe y lealtad. Pero amigo, es preciso hacer algo por este perro garbanzo que tanto cuesta. En cuanto vi que el generalísimo estaba ya en manos de la Paz y Caridad, he hecho un memorial al de Asturias, y escrito ocho cartas a D. Juan Escóiquiz para ver si me cae la escribanía de Cámara. Yo les perseguí cuando la famosa causa; pero ellos no se acuerdan de eso, y por si se acuerdan ya he redactado una retractación en forma donde digo que me obligaron a hacer aquellas actuaciones poniéndome una pistola en el pecho.

-No he visto jormiguita como el Sr. de Lobo.

-¡Y qué entusiasmado está el pueblo español con su nuevo Rey! -continuó el curial-. Da ganas de llorar, señora doña Restituta. Ahora salí a llevar a mi Angustias con las niñas a la novena del señor San José, y después que rezamos el rosario en San Felipe, fuimos a dar una vuelta por las calles. ¡Ay qué risa! Parece que están quemando la casa de Godoy, la de su madre y su hermano D. Diego, lo cual está muy retebién hecho, porque entre los tres han robado tanto que no se ve una peseta por ningún lado. Después que nos entretuvimos un poco volvimos allá; ellas se han quedado en el 13 en casa de Corchuelo, y yo me he venido aquí a charlar un poquito. Pero me había olvidado... Inesita, ¿cómo va? ¿Y Vd., Sr. D. Juan de Dios?

Inés contestó brevemente al saludo.

-Está un poco holgazana -dijo Restituta mirando con desdén a la huérfana-. Hoy no ha cosido más que camisa y media, lo cual es un asco.

-Pues me parece bastante.

-¡Ay!, Sr. de Lobo, no diga Vd. que es bastante. Mi abuela según me contaba mi madre, echaba en un día la friolera de dos camisas. Pero esta chica está acostumbrada a la holgazanería; ya se ve... su madre no hacía más que arrastrar el guarda pies por las calles, y la niñita me andaba todo el día de ceca en meca, aquí te pongo aquí te dejo.

-Pues es preciso trabajar -dijo Requejo-, porque, chiquilla, el garbanzo y el tocino y el pan y las patatas no caen del cielo, y el que viene a esta casa a sacar el vientre de mal año no se puede estar mano sobre mano. Y si no, aprendan todos de mí que me he ganado lo que tengo ochavo por ochavo, y cuando era mozo, fardo por la mañana, fardo por la noche, fardo a todas horas, y siempre tan gordo y tan guapote.

-Ella es habilidosilla -afirmó Restituta-, y sabe coser; sólo que le falta voluntad. No es ya ninguna chiquilla, que tiene sus quince años cumplidos y ya puede comprender las cosas. A su edad yo gobernaba la casa de mis padres. Verdad es que como yo había pocas, y me llamaban el lucero de Santiagomillas.

-Pues yo creo que Inesita es una muchacha que no tiene pero -declaró benévolamente Lobo-. Y tancalladita, tan modesta, que no se puede menos de quererla.

-Ya le dije cuando entró aquí -continuó Restituta- que los tiempos están muy malos, que no se gana nada, que se vende poco y en lo de arriba no cae más que miseria. Ella comprenderá que nos hemos echado encima una carga muy pesada al recogerla, porque... ¡si viera Vd. Sr. de Lobo, qué miseria había en aquella casa del cura de Aranjuez, donde estaba mi sobrina! ¡Ay, partía el corazón!

-Pues es preciso que trabaje -dijo D. Mauro-. Mi sobrina es una muchacha muy buena, y ya he dicho a Vd. cuánto la quiero. Como que al fin y al cabo para ella ha de ser cuanto hay en esta casa.

-Ya le he dicho -prosiguió Restituta- que mañana tiene que lavar toda la ropa de la casa, porque ya que ella está aquí, ¿para qué se ha de gastar en lavandera? Por supuesto que no ha de dejar la costura; y si pasa mañana de las veinte varas la echaré en el pañuelo unas gotitas de agua de bergamota, de la de los frascos averiados. Lo bueno que tiene esta muchacha, Sr. de Lobo, es que nunca da malas contestaciones. Verdad que no le faltan luces y harto conoce lo que nos debe, pues ha encontrado en nosotros su santo Ángel de la guarda. ¡Ah, no puede usted figurarse la miseria que había en aquella casa del cura de Aranjuez!...

-Le conozco, sí -dijo Lobo enseñando con ferozsonrisa sus dientes verdes-. Es un pobre hombre que hacía versos latinos al príncipe de la Paz. Ya se lo dirán de misas. Está probado que ese D. Celestino con su capita de hombre de bien era el confidente del favorito, y el que le llevaba la correspondencia con Napoleón, para repartirse a España.

-¡Jesús, qué iniquidad! Bien decía yo que aquel hombre tenía cara de malo.

-Pero ya le daremos cordelejo -continuó Lobo-.

-Como la parroquia de Aranjuez la pretende un primo mío, ya se la tenemos armada a D. Celestino, y entre yo y un compañero pensamos escribir ocho resmas de papel sellado para probar que el señor curita es reo de lesa nación.

Mientras esto hablaban yo hacía esfuerzos por contener mi indignación. Inés, aterrada por la verbosidad de sus tíos, no se atrevía a decir una palabra. Lo mismo hacía Juan de Dios; pero por un fenómeno singular, las facciones heladas y quietas del mancebo, indicaban aquella noche que lo que oía no le era indiferente.

-Así lo haremos -contestó Lobo frotándose las manos-. ¿Pero qué hace ahí tan callado el señor don Juan de Dios? ¡Ay, Restituta, qué marido tan mudo va Vd. a tener! Y lo que es por palabra de más o por palabra de menos no armarán Vds. camorra. ¿Y para cuándo dejan Vds. la boda? Animarse señores, y anímese Vd. también, Sr. D. Mauro de mis entrañas,porque mire Vd. que la niñita lo merece. Nada: el mes que entra a la vicaría. Restituta con mi señor Juan, y Vd. con su querida sobrinita Inés, que si no me engaño, le ha rezado ya algún padre nuestro a San Antonio para que esto se realice.

Todas las miradas se dirigieron hacia Inés. Don Mauro estiró los brazos en cruz, luego cerrando los puños, levantolos hacia arriba como si quisiera coger el techo, descoyuntose las quijadas, cayeron luego ambas manos sobre la mesa con estruendosa pesadez, y habló así:

-Yo se lo he dicho ya, y por cierto que la niñita no tuvo a bien contestarme.

-¿Pues qué quiere decir el silencio en esos casos? ¿Cómo quiere Vd. que una niña bien criada diga: «Me quiero casar, sí señor, venga marido»? Al contrario, es ley que hasta el último momento hagan mil ascos al matrimonio, diciendo que les da vergüenza.

-Ya te dije, hermano -indicó doña Restituta-, que aunque ese es el destino de la muchacha, si se porta bien y trabaja, no conviene tratar todavía de tal asunto. Ya sabes lo que son las muchachas, y si les entra el entusiasmo y el aquel del casorio, no hay quien las aguante. Ella bien sé yo que se chupará los dedos; pero haces mal en manifestarle tan pronto tu generosidad, porque puede echarse a perder, pensando todos los días en el amorcito, en la palabrilla,en el regalito. ¡Ah, bien sabe ella lo que se hace, la picarona! Bien sabe que un hombre como tú no lo catan las muchachas de Madrid todos los días.

-¿Y por qué no he de decírselo desde luego? -contestó Requejo riendo, es decir, moviendo la tecla de la risa en su brutal organismo-. Mi sobrina me gusta; y aunque conocemos todos a una porción de señoras muy principales que me pretenden y se beben los cuatro vientos por mí, yo dije: «Vale más que todo se quede en casa». ¿Por qué no se le ha de decir de una vez que quiero casarme con ella? Bien sé que del alegrón se estará ocho noches sin dormir y se trastornará toda, y no dará una puntada; y si fuera por ella, mañana mismo... pero váyase lo uno por lo otro. Pues digo: ¡si ella viera el collar y los pendientes de oro que tengo apalabrados con el platero del arco de Manguiteros...!

-Dale... dale... -dijo Restituta-. ¿A qué viene hablar de esas cosas? ¿A qué sacar de quicio a la muchacha, trastornándole el seso? Nada: no hay collar ni pendientes. ¿Ni cómo quieres que la niña lave la ropa ni cosa las camisas, cuando le dicen que va a ser, como si dijéramos, princesa?

-Nada, nada... yo la quiero y la estimo -afirmó Requejo-. ¿Por qué la hemos de privar de ese gusto? Que lo sepa... y digo más, señora hermana; y es que, aunque a mí no me gusta la holgazanería, porque ya ven Vds., yo desde la edad de catorce años...quiero decir, que aunque no me gusta la holgazanería, lo que es por estos días y de aquí a que nos casemos, si Inés quiere trabajar que trabaje, y si no que no trabaje.

D. Mauro volvió a reír, y alargando el brazo hacia Inés le tocó la barba. Estremeciose la muchacha como al contacto de un animal asqueroso, y rechazó bruscamente la caricia de su impertinente tío.

-¿Qué es eso, niña? ¿Qué modales son esos? -dijo D. Mauro frunciendo el ceño-. Después que me caso contigo...

-¿Conmigo? -exclamó la huérfana sin poder disimular su horror.

-Contigo, sí.

-Déjala, Mauro; ya sabes que es un poco mal criada. Niña, no se contesta de ese modo.

-¿Pues no tiene también su orgullo la pazpuerca?

-Yo no me caso con Vd., yo no quiero casarme -dijo enérgicamente Inés recobrando su aplomo, una vez dicha la primera palabra.

-¿Que no? -preguntó Restituta con un chillido de rabia-. Pues, indinota, mocosa, ¿cuándo has podido tú soñar con tener semejante marido, un Mauro Requejo, un hombre como mi hermano? ¡Y eso después que te hemos sacado de la miseria!...

-A mí me han sacado Vds. del bienestar y de la felicidad para traerme a esta miseria, a esta mortificaciónen que vivo -dijo la huérfana llorando-. Pero mi tío vendrá por mí, y me marcharé para no volver aquí ni verles más. ¡Casarme yo con semejante hombre! Prefiero la muerte.

¡Oh!, al oírla me la hubiera comido. Inés estaba sublime. Yo lloraba.

Cuando los Requejos oyeron en boca de su víctima tan absoluta negativa, se encendió de un modo espantoso la ira de sus protervas almas. Restituta se quedó lívida, y levantose D. Mauro balbuciendo palabrotas soeces.

-¿Cómo es eso? ¡Venir a comer mi pan, venir aquí a lavarse la sarna, venir aquí después de haber andado por los caminos pidiendo limosna... y portarse de esa manera!... ¿Pero eres tú una Requejo, o de qué endiablada casta eres?... Cuidado con la señorita Panza en trote. Niñita, ¿sabes tú quién soy yo? ¿Sabes que tengo cinco dedos en la mano... sabes que me llamo Mauro Requejo... sabes que de mí no se ríe ninguna piojosa... sabes que a mí no me pican pulgas de tu laya?... Tengamos la fiesta en paz... y ten por sabido que has de hacer lo que yo mando, y nada más.

Diciendo esto, agarró con su mano de hierro el brazo de la muchacha y la sacudió con mucha fuerza. Quiso poner más alto aún el principio de autoridad, y lanzó a Inés contra la pared, avanzando sobre ella en actitud rabiosa. Cuando tal vi pareciomeque se me nublaban los ojos, y sentí saltar mi sangre toda del corazón a la cabeza. Yo estaba en pie junto a la mesa, y al alcance de mi mano había un cuchillo de punta afilada. El lector comprenderá aquella situación terrible, y no es posible que vitupere mi conducta, si es que tales hechos, hijos de la ciega cólera y la impremeditación, pueden llamarse conducta. ¿Quién al ver una huérfana inocente e indefensa, maltratada por el más necio y soez de los hombres, hubiera podido permanecer en calma? Durante aquella escena de un segundo, alargué la mano hasta tocar la empuñadura del cuchillo, y con rápida mirada observé el cuerpo deforme de D. Mauro Requejo; pero afortunadamente para mí y para todos, este, sin duda aterrado ante la debilidad de la víctima, se contuvo, y no se atrevió a tocarla. En un movimiento insignificante, en un paso atrás, en una mirada, en una idea que pasa y huye estriba la perdición de personas honradas, y un grano de arena hace tropezar nuestro pie, precipitándonos en el abismo del crimen. Por aquella vez Dios apartó del camino de mi vida el cadalso o el presidio.

El licenciado Lobo y el mancebo contribuyeron a calmar la enconada soberbia de su amigo. En el semblante del segundo noté una alteración vivísima, y su piel amarilla se encendió con inusitado enrojecimiento, que yo no sabía si atribuir a la indignación o a la vergüenza.

Doña Restituta, queriendo poner fin a una escena que no podía tener buenas consecuencias, cortó la cuestión, diciendo:

-No te acalores, hermano. Yo la haré entrar en razón. Ya sabes que es un poco mal criada. Vamos arriba, niña, y ajustaremos cuentas.

Esta fue la orden de retirada. Juan de Dios salió de la tienda para irse a su casa, y doña Restituta e Inés subieron seguidas por mí, pues también se me dio la orden de que me acostara. Entraron las dos mujeres en su cuarto y yo en el mío; mas no pudiendo dominar mi inquietud, y recelando que en el dormitorio vecino se repetiría entre tía y sobrina la violenta escena de la trastienda, luego que pasó un rato, salí muy quedamente de mi escondrijo, y desliceme por el pasillo, conteniendo la respiración para que no ser sentido. Puesto cerca de la puerta del dormitorio, sentí la voz de doña Restituta que decía: «No llores, duérmete. Mi hermano es una persona muy amable; sólo que de pronto... Si él te quiere mucho, niñita...». Esta afabilidad de la culebra me sorprendió; mas al punto comprendí que debía ser puro artificio.

También llegaban confusamente a mí las voces de D. Mauro y de Lobo, que habían quedado en la trastienda. Avancé un poco más hasta llegar a la escalera, y echándome en tierra apliqué el oído.

-Cuando yo le doy a Vd. mi palabra de que esasí -decía el leguleyo-, Inesita fue abandonada y recogida por doña Juana. Su madre, que es una de las principales señoras de la corte, desea encontrarla y protegerla. Yo poseo los papeles con que se puede identificar la personalidad de la muchacha. De modo que si Vd. se casa con ella... Amiguito, la señora condesa tiene los mejores olivares de Jaén, las mejores yeguadas de Córdoba, los mejores prados del Jarama, y más de treinta mil fanegadas de pan en tierra de Olmedo y de D. Benito, sin herederos directos que se lo disputen a esa barbilinda que hace poco estaba haciendo pucheros aquí mismo.

-Pero ya Vd. la ha visto -dijo D. Mauro midiendo con grandes zancadas el piso de la trastienda-. La muchacha es un puerco-espín. Le hago una caricia y me da una manotada; le digo que la quiero y me escupe la cara.

-Amigo D. Mauro -repuso el licenciado-, el sistema que Vds. siguen no es el más a propósito para hacerse querer de la niña. Vds. debían traerla en palmitas, y la están maltratando haciéndola trabajar hasta que reviente. ¿A quién se le ocurre que una princesita como esta friegue los platos y lave la ropa? Por este camino aborrecerá a mi señor don Mauro como si fuera el demonio.

-Pues me parece -dijo mi amo dándose un golpe en la majestuosa cerviz-, que el señor licenciado tiene muchísima razón. Eso mismo dije yo a mihermana; pero como Restituta es tan ambiciosa, que se dejaría desollar por un ochavo, ha dado en sacarle el cuero a la muchacha. ¿No somos ricos Sr. Lobo? Pues si somos ricos ¿a qué viene el descajillarse por un maravedí? Pero con mi hermana no hay quien pueda. ¿Le parece a Vd.? Aquí vivimos como en el hospicio: mi padre se llama hogaza y yo me muero de hambre, como dijo el otro. Pues digo que ha de ser lo que yo mando, y mi hermana que se case con Juan de Dios y se lleve lo suyo... Y nada más. Inesita no trabajará más, porque si se me muere...

-Además -dijo Lobo-; procure Vd. ser amable con ella. Cuide algo más de lo exterior, y no se le presente con esa facha de mozo de cordel, porque las niñas son niñas, Sr. D. Mauro, y no se entra en el templo del amor sino por la puerta del buen parecer.

-Eso está muy bien parlado. Si fuera por mí... Yo quiero vestirme bien, pero esa langostilla de Restituta no me deja, y dice que no me he de poner el traje bonito más que el día de San Corpus Christi . Nada, nada; aquí mando yo; me pondré guapote, porque yo... a Dios gracias, no soy de esos que necesitan afeites y menjurjes para parecer bien, y cuanto me cae encima está que ni pintado. Trataré a Inesita como ella se merece, y Dios por delante. Antes de un mes la llevo a la parroquia.

-Ese es el mejor sistema, Sr. D. Mauro. Con las amenazas, con el encierro, con las privaciones, con el trabajo excesivo no conseguirán Vds. sino que la muchacha les odie, y se enamorisque del primer pelafustán que pase por la calle.

Así hablaron el comerciante y el leguleyo. Despidiéronse después, y el segundo salió a la calle por la tienda. Retireme a toda prisa; pero aunque no hice ruido, doña Restituta, con su sutilísimo órgano auditivo debió sentir no sé si mi aliento o el ligero rumor de un ladrillo roto que se movió bajo mis pisadas. Esto produjo cierta alarma en su vigilante espíritu, y saliendo al encuentro de su hermano que subía, le dijo:

-Me parece que he sentido ruido. ¿Tendremos ladroncitos? Anoche hicieron un robo en la calle Imperial, metiéndose por los tejados.

Registraron toda la casa, mientras yo, metido entre mis sábanas, fingía dormir como un talego. Al fin convencidos de que no había ladrones se acostaron. Mucho más tarde advertí que doña Restituta registraba la casa segunda vez, hasta que todo quedó en silencio. Cerca ya de la madrugada oí ruido de monedas. Era doña Restituta contando su dinero. Después la sentí salir de su cuarto, bajar a la trastienda y de allí al sótano, donde estuvo más de una hora.


XVI

Por las noches, después de cenar, rezábamos el rosario, que llevaba el amo de la casa con voz becerrona; y concluida la oración al patrono bendito, permanecían en la trastienda en plácida tertulia que sólo duraba hora y media, y a la cual solía concurrir algún antiguo amigo o vecino cercano. At night, after dinner, we prayed the rosary, which the master of the house carried in a calf voice; and after the prayer to the blessed patron was concluded, they remained in the back room in a placid gathering that lasted only an hour and a half, and to which an old friend or close neighbor used to attend. La noche de mi inauguración no se alteró tan santa costumbre. The night of my inauguration, this holy custom was not altered. D. Mauro, su hermana, Juan de Dios, Inés y yo, decíamos el último  ora pro nobis , cuando sonó la campanilla del entresuelo y mandáronme que abriese. Don Mauro, his sister, Juan de Dios, Inés and I were saying the last ora pro nobis, when the bell on the mezzanine rang and they told me to open it.

-Es el vecino Lobo -dijo mi ama.

Figúrense mis lectores cuál sería mi confusión cuando al abrir la puerta encaré con la espantable fisonomía del licenciado de los espejuelos verdes que había querido prenderme cinco meses antes en el Escorial. My readers imagine what my confusion would be when, upon opening the door, I faced the hideous physiognomy of the lawyer with the green glasses who had wanted to arrest me five months before in the Escorial. El temor de que me conociera diome gran turbación; pero tuve la suerte de que el ilustre leguleyo no parara mientes en mi persona. The fear that he would meet me gave me great embarrassment; but I was lucky that the illustrious lawyer did not stop lying on me. La peur qu'il me rencontre me causait un grand embarras ; mais j'ai eu la chance que l'illustre avocat n'ait cessé de mentir sur moi. No sé si he dicho que en mí se estaba verificando la trasformación propia de la edad, y que un repentino desarrollo había engrosado mi cuerpo y redondeado mi cara, donde ya me apuntaba ligero bozo. I do not know if I have said that in me the transformation typical of age was taking place, and that a sudden development had thickened my body and rounded my face, where a slight bozo was already pointing at me. Je ne sais pas si j'ai dit qu'en moi s'opérait la transformation typique de l'âge, et qu'un développement soudain avait épaissi mon corps et arrondi mon visage, là où je pointais déjà un léger bozo. Estafue la causa de que el licenciado Lobo no me reconociera, como yo temía.

-Señores -dijo Lobo sentándose en un cajón de medias-, hoy es día de universal enhorabuena. Ya tenemos a nuestro Rey en el trono. We already have our King on the throne. ¿No han salido ustedes? Haven't you guys gone out? Pues está Madrid que parece un ascua de oro. Well, there is Madrid that looks like a golden ember. ¡Qué luminarias, qué banderas, qué gentío por esas calles de Dios!

-Nosotros no salimos a ver luminarias -contestó Requejo-, que harto tenemos que hacer en casa. "We don't go out to see lights," said Requejo, "we have to do a lot at home." Ay, Sr. de Lobo ¡qué trabajo! de Lobo what a job! Aquí no hay haraganes; y se gana el pan de cada día como Dios manda. There are no loafers here; and he earns his daily bread as God intended. Il n'y a pas de mocassins ici ; et il gagne son pain quotidien comme Dieu l'a voulu.

-Loado sea Dios -añadió el leguleyo-, y vivan los hombres ricos como D. Mauro Requejo, que a fuerza de inteligencia... "Praise be to God," added the lawyer, "and long live rich men like D. Mauro Requejo, who by dint of intelligence ...

-La honradez, nada más que la honradez -dijo Requejo rascándose los codos.

-¡Viva el comercio! -exclamó Lobo-; lo que es la pluma, Sr. exclaimed Wolf; what is the pen, mr. D. Mauro, no da ni para zapatos. D. Mauro, does not even give for shoes. Ahí estoy yo hace veinte y dos años en mi placita del Consejo y Cámara de Castilla, y Dios sabe que hasta hoy no he salido de pobre. I have been there for twenty-two years in my little square of the Council and Chamber of Castilla, and God knows that until today I have not left poor. Mucho romper de zapatos para andar en las actuaciones y nada más. A lot of breaking of shoes to walk in the performances and nothing more. Lo que hay es que ahora espero que me den una de las escribanías de Cámara, que harto la merece este cuerpo que se ha de comer la tierra. What is there is that now I hope they give me one of the Chamber's notaries, which is well deserved by this body that has to eat the earth. Ce qu'il y a, c'est que maintenant j'espère qu'ils me donneront un des notaires de la Chambre, qui est bien mérité par ce corps qui doit manger la terre.

-Como Vd. ha servido al favorito...

-No... diré a Vd. ; yo no me he andado en dibujos,y serví al gobierno anterior con buena fe y lealtad. Pero amigo, es preciso hacer algo por este perro garbanzo que tanto cuesta. But friend, something must be done for this chickpea dog that costs so much. En cuanto vi que el generalísimo estaba ya en manos de la Paz y Caridad, he hecho un memorial al de Asturias, y escrito ocho cartas a D. Juan Escóiquiz para ver si me cae la escribanía de Cámara. As soon as I saw that the generalissimo was already in the hands of Peace and Charity, I made a memorial to the one from Asturias, and wrote eight letters to Don Juan Escóiquiz to see if the Chamber's notary office would fall to me. Yo les perseguí cuando la famosa causa; pero ellos no se acuerdan de eso, y por si se acuerdan ya he redactado una retractación en forma donde digo que me obligaron a hacer aquellas actuaciones poniéndome una pistola en el pecho. I persecuted them when the famous cause; But they do not remember that, and in case they remember I have already written a retraction in the form where I say that they forced me to do those actions by putting a gun to my chest.

-No he visto  jormiguita como el Sr. -I have not seen jormiguita like Mr. de Lobo.

-¡Y qué entusiasmado está el pueblo español con su nuevo Rey! -continuó el curial-. continued the curial. Da ganas de llorar, señora doña Restituta. Makes you want to cry, Mrs. Dona Restituta. Ahora salí a llevar a mi Angustias con las niñas a la novena del señor San José, y después que rezamos el rosario en San Felipe, fuimos a dar una vuelta por las calles. Now I went out to take my Angustias with the girls to Señor San José's novena, and after we prayed the rosary in San Felipe, we went for a walk through the streets. ¡Ay qué risa! Oh what a laugh! Parece que están quemando la casa de Godoy, la de su madre y su hermano D. Diego, lo cual está muy retebién hecho, porque entre los tres han robado tanto que no se ve una peseta por ningún lado. It seems that they are burning Godoy's house, that of his mother and his brother D. Diego, which is very well done, because between the three of them they have stolen so much that you can't see a peseta anywhere. Después que nos entretuvimos un poco volvimos allá; ellas se han quedado en el 13 en casa de Corchuelo, y yo me he venido aquí a charlar un poquito. After we entertained ourselves a bit, we went back there; they stayed at the 13th at Corchuelo's house, and I came here to chat a little. Après nous être un peu amusés, nous y retournâmes ; ils sont restés le 13 chez Corchuelo, et je suis venu ici pour causer un peu. Pero me había olvidado... Inesita, ¿cómo va? ¿Y Vd., Sr. D. Juan de Dios?

Inés contestó brevemente al saludo.

-Está un poco holgazana -dijo Restituta mirando con desdén a la huérfana-. Hoy no ha cosido más que camisa y media, lo cual es un asco. Today she has sewn nothing but a shirt and a half, which is disgusting. Aujourd'hui, elle n'a pas cousu plus d'une chemise et demie, ce qui est dégoûtant.

-Pues me parece bastante. -Well, I think it's enough.

-¡Ay!, Sr. de Lobo, no diga Vd. que es bastante. which is quite a lot. Mi abuela según me contaba mi madre, echaba en un día la friolera de dos camisas. My grandmother, according to my mother, would throw in a whopping two shirts in one day. Pero esta chica está acostumbrada a la holgazanería; ya se ve... su madre no hacía más que arrastrar el guarda pies por las calles, y la niñita me andaba todo el día de ceca en meca, aquí te pongo aquí te dejo. But this girl is used to laziness; you see ... her mother kept dragging the foot guard through the streets, and the little girl walked me all day from mint to Mecca, here I put you here I leave you.

-Pues es preciso trabajar -dijo Requejo-, porque, chiquilla, el garbanzo y el tocino y el pan y las patatas no caen del cielo, y el que viene a esta casa a sacar el vientre de mal año no se puede estar mano sobre mano. `` Well, you have to work, '' said Requejo, `` because, little girl, chickpeas and bacon and bread and potatoes don't fall from the sky, and whoever comes to this house to take out the belly of a bad year cannot be on hand. hand. Y si no, aprendan todos de mí que me he ganado lo que tengo ochavo por ochavo, y cuando era mozo, fardo por la mañana, fardo por la noche, fardo a todas horas, y siempre tan gordo y tan guapote. And if not, let everyone learn from me that I have earned what I have eight for eight, and when I was a waiter, I pack in the morning, I pack at night, I pack at all hours, and always so fat and so handsome. Et sinon, que tout le monde apprenne de moi que j'ai gagné ce que j'ai huit pour huit, et quand j'étais serveur, j'emballe le matin, j'emballe le soir, j'emballe à toute heure, et toujours si gros et si Beau.

-Ella es habilidosilla -afirmó Restituta-, y sabe coser; sólo que le falta voluntad. "She is a skillful chair," said Restituta, "and she knows how to sew; only that he lacks the will. « C'est une chaise habile, dit Restituta, et elle sait coudre ; seulement qu'il manque de volonté. No es ya ninguna chiquilla, que tiene sus quince años cumplidos y ya puede comprender las cosas. She is no longer a child, who is fifteen years old and can already understand things. A su edad yo gobernaba la casa de mis padres. Verdad es que como yo había pocas, y me llamaban el lucero de Santiagomillas. It is true that there were few as I did, and they called me the star of Santiagomillas.

-Pues yo creo que Inesita es una muchacha que no tiene pero -declaró benévolamente Lobo-. "Well, I think Inesita is a girl who doesn't have a but," Wolf declared benevolently. Y tancalladita, tan modesta, que no se puede menos de quererla. And so quiet, so modest, that you can't help but love her.

-Ya le dije cuando entró aquí -continuó Restituta- que los tiempos están muy malos, que no se gana nada, que se vende poco y en lo de arriba no cae más que miseria. "I already told you when you came in here," Restituta continued, "that times are very bad, that you don't earn anything, that you sell little and nothing but misery falls on the top." Ella comprenderá que nos hemos echado encima una carga muy pesada al recogerla, porque... ¡si viera Vd. She will understand that we have thrown a very heavy load on ourselves when picking it up, because ... if you saw! Sr. de Lobo, qué miseria había en aquella casa del cura de Aranjuez, donde estaba mi sobrina! de Lobo, what misery there was in that house of the priest of Aranjuez, where my niece was! ¡Ay, partía el corazón! Oh, it broke the heart!

-Pues es preciso que trabaje -dijo D. Mauro-. "Well, I must work," said Don Mauro. Mi sobrina es una muchacha muy buena, y ya he dicho a Vd. cuánto la quiero. Como que al fin y al cabo para ella ha de ser cuanto hay en esta casa. After all, it must be all that is in this house for her.

-Ya le he dicho -prosiguió Restituta- que mañana tiene que lavar toda la ropa de la casa, porque ya que ella está aquí, ¿para qué se ha de gastar en lavandera? "I have already told you," continued Restituta, "that tomorrow she has to wash all the clothes in the house, because since she is here, why should she spend herself on laundry?" Por supuesto que no ha de dejar la costura; y si pasa mañana de las veinte varas la echaré en el pañuelo unas gotitas de agua de bergamota, de la de los frascos averiados. Of course you don't have to give up sewing; and if the twenty sticks tomorrow passes, I will put a few drops of bergamot water on the handkerchief, from the damaged bottles. Bien sûr, vous ne devez pas abandonner la couture ; Et si les vingt bâtons de demain passent, je mettrai quelques gouttes d'eau de bergamote sur le mouchoir, des bouteilles abîmées. Lo bueno que tiene esta muchacha, Sr. The good thing about this girl, Mr. de Lobo, es que nunca da malas contestaciones. Verdad que no le faltan luces y harto conoce lo que nos debe, pues ha encontrado en nosotros su santo Ángel de la guarda. It is true that he is not lacking in lights and he knows what he owes us, because he has found in us his holy Guardian Angel. ¡Ah, no puede usted figurarse la miseria que había en aquella casa del cura de Aranjuez!...

-Le conozco, sí -dijo Lobo enseñando con ferozsonrisa sus dientes verdes-. "I know him, yes," Wolf said, showing his green teeth with a fierce smile. Es un pobre hombre que hacía versos latinos al príncipe de la Paz. He is a poor man who wrote Latin verses to the Prince of Peace. Ya se lo dirán de misas. They will tell you about masses. Está probado que ese D. Celestino con su capita de hombre de bien era el confidente del favorito, y el que le llevaba la correspondencia con Napoleón, para repartirse a España. It is proven that this Don Celestino with his capita as a good man was the favorite's confidant, and the one who brought him the correspondence with Napoleon, to be distributed to Spain.

-¡Jesús, qué iniquidad! Bien decía yo que aquel hombre tenía cara de malo.

-Pero ya le daremos cordelejo -continuó Lobo-. "But we'll give him rope," Wolf continued. "Mais nous allons lui donner de la ficelle," continua Wolf.

-Como la parroquia de Aranjuez la pretende un primo mío, ya se la tenemos armada a D. Celestino, y entre yo y un compañero pensamos escribir ocho resmas de papel sellado para probar que el señor curita es reo de lesa nación. -As the parish of Aranjuez claims a cousin of mine, we already have it armed for Don Celestino, and between me and a colleague we plan to write eight reams of sealed paper to prove that the priest is a criminal against the nation.

Mientras esto hablaban yo hacía esfuerzos por contener mi indignación. While this was being discussed, I was trying to contain my indignation. Pendant qu'ils en parlaient, je fis un effort pour contenir mon indignation. Inés, aterrada por la verbosidad de sus tíos, no se atrevía a decir una palabra. Agnes, terrified by the verbosity of her uncles, did not dare to say a word. Lo mismo hacía Juan de Dios; pero por un fenómeno singular, las facciones heladas y quietas del mancebo, indicaban aquella noche que lo que oía no le era indiferente. The same did Juan de Dios; But by a singular phenomenon, the frozen and still features of the young man that night indicated that what he was hearing was not indifferent to him.

-Así lo haremos -contestó Lobo frotándose las manos-. "We will," Wolf replied, rubbing his hands. ¿Pero qué hace ahí tan callado el señor don Juan de Dios? But what is Mr. Don Juan de Dios doing there so quietly? ¡Ay, Restituta, qué marido tan mudo va Vd. Oh, Restituta, what a mute husband you are. a tener! Y lo que es por palabra de más o por palabra de menos no armarán Vds. And what is by word of more or by word of less you will not arm. camorra. quarrel. querelle. ¿Y para cuándo dejan Vds. And when do you leave? la boda? Animarse señores, y anímese Vd. Cheer up gentlemen, and cheer up yourself. también, Sr. D. Mauro de mis entrañas,porque mire Vd. D. Mauro of my guts, because look at you. que la niñita lo merece. that the little girl deserves it. Nada: el mes que entra a la vicaría. Nothing: the month he enters the vicarage. Restituta con mi señor Juan, y Vd. con su querida sobrinita Inés, que si no me engaño, le ha rezado ya algún padre nuestro a San Antonio para que esto se realice. with his beloved niece Inés, who if I am not mistaken, one of our fathers has already prayed to Saint Anthony for this to happen.

Todas las miradas se dirigieron hacia Inés. Don Mauro estiró los brazos en cruz, luego cerrando los puños, levantolos hacia arriba como si quisiera coger el techo, descoyuntose las quijadas, cayeron luego ambas manos sobre la mesa con estruendosa pesadez, y habló así: Don Mauro stretched out his arms in a cross, then clenched his fists, raised them upwards as if he wanted to grasp the ceiling, his jaws dislocated, then both hands fell on the table with thunderous heaviness, and spoke thus:

-Yo se lo he dicho ya, y por cierto que la niñita no tuvo a bien contestarme. -I've already told you, and by the way, the little girl didn't see fit to answer me.

-¿Pues qué quiere decir el silencio en esos casos? -Well, what does silence mean in those cases? ¿Cómo quiere Vd. How do you want que una niña bien criada diga: «Me quiero casar, sí señor, venga marido»? that a well-raised girl says: "I want to get married, yes sir, come husband"? Al contrario, es ley que hasta el último momento hagan mil ascos al matrimonio, diciendo que les da vergüenza. On the contrary, it is the law that until the last moment they make a thousand disgusts to marriage, saying that they are ashamed. Au contraire, c'est la loi que jusqu'au dernier moment ils font mille dégoûts au mariage, disant qu'ils ont honte.

-Ya te dije, hermano -indicó doña Restituta-, que aunque ese es el destino de la muchacha, si se porta bien y trabaja, no conviene tratar todavía de tal asunto. "I already told you, brother," said Dona Restituta, "that although that is the girl's destiny, if she behaves well and works, it is not advisable to discuss such a matter yet." Ya sabes lo que son las muchachas, y si les entra el entusiasmo y el aquel del casorio, no hay quien las aguante. You know what girls are, and if the enthusiasm and that of the marriage enter them, there is no one who can put up with them. Ella bien sé yo que se chupará los dedos; pero haces mal en manifestarle tan pronto tu generosidad, porque puede echarse a perder, pensando todos los días en el amorcito, en la palabrilla,en el regalito. She well know that she will suck her fingers; But you are wrong to express your generosity so soon, because it can spoil, thinking every day of the sweetheart, the word, the gift. ¡Ah, bien sabe ella lo que se hace, la picarona! Ah, she knows well what she's doing, the naughty one! Bien sabe que un hombre como tú no lo catan las muchachas de Madrid todos los días. He knows well that a man like you is not tasted by the girls of Madrid every day.

-¿Y por qué no he de decírselo desde luego? "And why shouldn't I tell him of course?" « Et pourquoi ne devrais-je pas lui dire bien sûr ? -contestó Requejo riendo, es decir, moviendo la tecla de la risa en su brutal organismo-. -replied Requejo laughing, that is, moving the key of laughter in his brutal organism-. -répondit Requejo en riant, c'est-à-dire en déplaçant la clé du rire dans son organisme brutal-. Mi sobrina me gusta; y aunque conocemos todos a una porción de señoras muy principales que me pretenden y se beben los cuatro vientos por mí, yo dije: «Vale más que todo se quede en casa». I like my niece; and although we all know a portion of very important ladies who love me and drink the four winds for me, I said: "It is better if everything stays at home." ¿Por qué no se le ha de decir de una vez que quiero casarme con ella? Why shouldn't she be told at once that I want to marry her? Bien sé que del alegrón se estará ocho noches sin dormir y se trastornará toda, y no dará una puntada; y si fuera por ella, mañana mismo... pero váyase lo uno por lo otro. I well know that the joy will be eight nights without sleep and it will all be upset, and will not give a stitch; And if it were up to her, tomorrow ... but leave for each other. Je sais bien que la joie sera huit nuits sans sommeil et tout sera bouleversé, et ne donnera pas un point ; Et s'il ne tenait qu'à elle, demain... mais c'est parti pour l'autre. Pues digo: ¡si ella viera el collar y los pendientes de oro que tengo apalabrados con el platero del arco de Manguiteros...! Well, I say: if she saw the gold necklace and earrings that I have agreed with the silversmith of the Manguiteros arch ...! Eh bien, je dis : si elle voyait le collier en or et les boucles d'oreilles que j'ai convenu avec l'orfèvre de l'arc Manguiteros… !

-Dale... dale... -dijo Restituta-. ¿A qué viene hablar de esas cosas? What's the point of talking about those things? ¿A qué sacar de quicio a la muchacha, trastornándole el seso? Why drive the girl crazy, upsetting her brain? Nada: no hay collar ni pendientes. ¿Ni cómo quieres que la niña lave la ropa ni cosa las camisas, cuando le dicen que va a ser, como si dijéramos, princesa? Or how do you want the girl to wash the clothes or sew the shirts, when they tell her that it will be, as it were, princess?

-Nada, nada... yo la quiero y la estimo -afirmó Requejo-. ¿Por qué la hemos de privar de ese gusto? Why should we deprive it of that taste? Que lo sepa... y digo más, señora hermana; y es que, aunque a mí no me gusta la holgazanería, porque ya ven Vds., yo desde la edad de catorce años...quiero decir, que aunque no me gusta la holgazanería, lo que es por estos días y de aquí a que nos casemos, si Inés quiere trabajar que trabaje, y si no que no trabaje. Let him know ... and I say more, lady sister; And it is that, although I do not like laziness, because you see, I since the age of fourteen ... I mean, that although I do not like laziness, what it is these days and from here to that we get married, if Inés wants to work, let her work, and if not, let her not work.

D. Mauro volvió a reír, y alargando el brazo hacia Inés le tocó la barba. D. Mauro laughed again, and stretching out his arm towards Ines, he touched his beard. Estremeciose la muchacha como al contacto de un animal asqueroso, y rechazó bruscamente la caricia de su impertinente tío. The girl shuddered as at the touch of a disgusting animal, and brusquely rejected the caress of her impertinent uncle.

-¿Qué es eso, niña? ¿Qué modales son esos? What manners are those? -dijo D. Mauro frunciendo el ceño-. Después que me caso contigo... After I marry you ...

-¿Conmigo? -exclamó la huérfana sin poder disimular su horror. exclaimed the orphan, unable to hide her horror.

-Contigo, sí.

-Déjala, Mauro; ya sabes que es un poco mal criada. Niña, no se contesta de ese modo.

-¿Pues no tiene también su orgullo la pazpuerca? -Well, does not Pazpuerca also have his pride?

-Yo no me caso con Vd., yo no quiero casarme -dijo enérgicamente Inés recobrando su aplomo, una vez dicha la primera palabra. "I am not marrying you, I do not want to marry," Ines said energetically, regaining her poise, once the first word was said.

-¿Que no? -preguntó Restituta con un chillido de rabia-. Pues, indinota, mocosa, ¿cuándo has podido tú soñar con tener semejante marido, un Mauro Requejo, un hombre como mi hermano? Well, indinota, brat, when have you been able to dream of having such a husband, a Mauro Requejo, a man like my brother? Eh bien, indinota, gamin, quand as-tu pu rêver d'avoir un tel mari, un Mauro Requejo, un homme comme mon frère ? ¡Y eso después que te hemos sacado de la miseria!... And that's after we've taken you out of your misery! ...

-A mí me han sacado Vds. -You have taken me out. del bienestar y de la felicidad para traerme a esta miseria, a esta mortificaciónen que vivo -dijo la huérfana llorando-. of well-being and happiness to bring me to this misery, to this mortification in which I live -said the orphan crying-. Pero mi tío vendrá por mí, y me marcharé para no volver aquí ni verles más. ¡Casarme yo con semejante hombre! I marry such a man! Prefiero la muerte.

¡Oh!, al oírla me la hubiera comido. Oh, hearing it I would have eaten it. Inés estaba sublime. Yo lloraba. I cried.

Cuando los Requejos oyeron en boca de su víctima tan absoluta negativa, se encendió de un modo espantoso la ira de sus protervas almas. When the Requejos heard such an absolute negative from the mouth of their victim, the anger of their protervative souls was kindled in a dreadful way. Restituta se quedó lívida, y levantose D. Mauro balbuciendo palabrotas soeces. Restituta was livid, and Don Mauro got up, stammering foul profanity.

-¿Cómo es eso? ¡Venir a comer mi pan, venir aquí a lavarse la sarna, venir aquí después de haber andado por los caminos pidiendo limosna... y portarse de esa manera!... Come and eat my bread, come here to wash off the scabies, come here after having walked the roads begging ... and behave that way! ... Viens manger mon pain, viens ici laver la gale, viens ici après avoir parcouru les routes en mendiant... et comporte-toi comme ça !... ¿Pero eres tú una Requejo, o de qué endiablada casta eres?... But are you a Requejo, or of what devilish caste are you? ... Cuidado con la señorita  Panza en trote. Watch out for Miss Panza trotting. Niñita, ¿sabes tú quién soy yo? ¿Sabes que tengo cinco dedos en la mano... sabes que me llamo Mauro Requejo... sabes que de mí no se ríe ninguna piojosa... sabes que a mí no me pican pulgas de tu laya?... Do you know that I have five fingers on my hand ... do you know my name is Mauro Requejo ... do you know that no louse laughs at me ... do you know that fleas of your kind do not bite me? ... Tengamos la fiesta en paz... y ten por sabido que has de hacer lo que yo mando, y nada más. Let's have the party in peace ... and take it for granted that you have to do what I command, and nothing more.

Diciendo esto, agarró con su mano de hierro el brazo de la muchacha y la sacudió con mucha fuerza. Quiso poner más alto aún el principio de autoridad, y lanzó a Inés contra la pared, avanzando sobre ella en actitud rabiosa. He wanted to raise the principle of authority even higher, and threw Ines against the wall, advancing on it in a furious attitude. Cuando tal vi pareciomeque se me nublaban los ojos, y sentí saltar mi sangre toda del corazón a la cabeza. When I saw such, it seemed to me that my eyes were clouded, and I felt my whole blood jump from my heart to my head. Yo estaba en pie junto a la mesa, y al alcance de mi mano había un cuchillo de punta afilada. I was standing by the table, with a sharp-pointed knife within reach of my hand. El lector comprenderá aquella situación terrible, y no es posible que vitupere mi conducta, si es que tales hechos, hijos de la ciega cólera y la impremeditación, pueden llamarse conducta. The reader will understand that terrible situation, and it is not possible for him to reproach my conduct, if such acts, children of blind anger and unpredictability, can be called conduct. Le lecteur comprendra cette terrible situation, et il ne lui est pas possible de reprocher ma conduite, si de tels actes, enfants de colère aveugle et d'imprévisibilité, peuvent être appelés conduite. ¿Quién al ver una huérfana inocente e indefensa, maltratada por el más necio y soez de los hombres, hubiera podido permanecer en calma? Who, seeing an innocent and defenseless orphan, mistreated by the most foolish and vile of men, could have remained calm? Qui, voyant un orphelin innocent et sans défense, maltraité par le plus insensé et le plus vil des hommes, aurait pu rester calme ? Durante aquella escena de un segundo, alargué la mano hasta tocar la empuñadura del cuchillo, y con rápida mirada observé el cuerpo deforme de D. Mauro Requejo; pero afortunadamente para mí y para todos, este, sin duda aterrado ante la debilidad de la víctima, se contuvo, y no se atrevió a tocarla. During that one-second scene, I reached out my hand to touch the hilt of the knife, and with a quick glance I observed the deformed body of D. Mauro Requejo; but fortunately for me and for everyone, this one, no doubt terrified at the weakness of the victim, restrained himself, and did not dare to touch her. En un movimiento insignificante, en un paso atrás, en una mirada, en una idea que pasa y huye estriba la perdición de personas honradas, y un grano de arena hace tropezar nuestro pie, precipitándonos en el abismo del crimen. In an insignificant movement, in a step backward, in a glance, in an idea that passes and runs away lies the downfall of honest people, and a grain of sand trips our foot, plunging us into the abyss of crime. Por aquella vez Dios apartó del camino de mi vida el cadalso o el presidio.

El licenciado Lobo y el mancebo contribuyeron a calmar la enconada soberbia de su amigo. The lawyer Lobo and the young man helped to calm their friend's fiery arrogance. En el semblante del segundo noté una alteración vivísima, y su piel amarilla se encendió con inusitado enrojecimiento, que yo no sabía si atribuir a la indignación o a la vergüenza.

Doña Restituta, queriendo poner fin a una escena que no podía tener buenas consecuencias, cortó la cuestión, diciendo:

-No te acalores, hermano. Yo la haré entrar en razón. I'll make her see reason. Ya sabes que es un poco mal criada. Vamos arriba, niña, y ajustaremos cuentas. Let's go upstairs, girl, and we'll settle the score.

Esta fue la orden de retirada. Juan de Dios salió de la tienda para irse a su casa, y doña Restituta e Inés subieron seguidas por mí, pues también se me dio la orden de que me acostara. Juan de Dios left the store to go home, and Dona Restituta and Ines came up, followed by me, because I was also ordered to go to bed. Entraron las dos mujeres en su cuarto y yo en el mío; mas no pudiendo dominar mi inquietud, y recelando que en el dormitorio vecino se repetiría entre tía y sobrina la violenta escena de la trastienda, luego que pasó un rato, salí muy quedamente de mi escondrijo, y desliceme por el pasillo, conteniendo la respiración para que no ser sentido. The two women entered his room and I in mine; but not being able to control my restlessness, and being suspicious that in the neighboring bedroom the violent scene in the back room would be repeated between aunt and niece, after a while, I left my hiding place very quietly, and slipped down the corridor, holding my breath to than not be felt. Les deux femmes entrèrent dans sa chambre et moi dans la mienne ; mais ne pouvant contrôler mon agitation, et me doutant que dans la chambre voisine la scène violente dans l'arrière-salle se répéterait entre tante et nièce, au bout d'un moment, je sortis très doucement de ma cachette, et me glissai dans le couloir, retenir mon souffle pour ne pas être ressenti. Puesto cerca de la puerta del dormitorio, sentí la voz de doña Restituta que decía: «No llores, duérmete. Mi hermano es una persona muy amable; sólo que de pronto... Si él te quiere mucho, niñita...». My brother is a very kind person; only suddenly ... If he loves you very much, little girl ... ». Esta afabilidad de la culebra me sorprendió; mas al punto comprendí que debía ser puro artificio. This affability of the snake surprised me; but to the point I understood that it must be pure artifice. Cette affabilité du serpent me surprit ; mais au point que j'ai compris qu'il devait s'agir d'un pur artifice.

También llegaban confusamente a mí las voces de D. Mauro y de Lobo, que habían quedado en la trastienda. Avancé un poco más hasta llegar a la escalera, y echándome en tierra apliqué el oído. I advanced a little more until I reached the stairs, and lying on the ground I applied my ear. J'avançai un peu plus jusqu'à atteindre l'escalier, et allongé sur le sol j'appliquai mon oreille.

-Cuando yo le doy a Vd. -When I give you. mi palabra de que esasí -decía el leguleyo-, Inesita fue abandonada y recogida por doña Juana. my word that yes, "said the lawyer," Inesita was abandoned and picked up by Dona Juana. Su madre, que es una de las principales señoras de la corte, desea encontrarla y protegerla. Her mother, who is one of the leading ladies of the court, wishes to find and protect her. Yo poseo los papeles con que se puede identificar la personalidad de la muchacha. De modo que si Vd. se casa con ella... Amiguito, la señora condesa tiene los mejores olivares de Jaén, las mejores yeguadas de Córdoba, los mejores prados del Jarama, y más de treinta mil fanegadas de pan en tierra de Olmedo y de D. Benito, sin herederos directos que se lo disputen a esa barbilinda que hace poco estaba haciendo pucheros aquí mismo. He marries her ... Friend, the Countess has the best olive groves in Jaén, the best stud farms in Córdoba, the best meadows in Jarama, and more than thirty thousand bushels of bread in the land of Olmedo and D. Benito, without direct heirs to dispute it to that little chin who was just pouting right here. Il l'épouse... Ami, la comtesse possède les meilleures oliveraies de Jaén, les meilleurs haras de Cordoue, les meilleures prairies de Jarama et plus de trente mille boisseaux de pain au pays d'Olmedo et de D. Benito, sans héritiers directs pour le disputer avec ce petit menton qui faisait juste la moue ici.

-Pero ya Vd. la ha visto -dijo D. Mauro midiendo con grandes zancadas el piso de la trastienda-. La muchacha es un puerco-espín. The girl is a porcupine. Le hago una caricia y me da una manotada; le digo que la quiero y me escupe la cara.

-Amigo D. Mauro -repuso el licenciado-, el sistema que Vds. siguen no es el más a propósito para hacerse querer de la niña. They follow is not the most on purpose to make love of the girl. Vds. debían traerla en palmitas, y la están maltratando haciéndola trabajar hasta que reviente. They had to bring her in little palm trees, and they are mistreating her by making her work until she bursts. Ils ont dû l'amener dans des petits palmiers, et ils la maltraitent en la faisant travailler jusqu'à ce qu'elle éclate. ¿A quién se le ocurre que una princesita como esta friegue los platos y lave la ropa? Who can think of a little princess like this doing the dishes and doing the laundry? Qui peut penser à une petite princesse comme celle-ci faisant la vaisselle et faisant la lessive ? Por este camino aborrecerá a mi señor don Mauro como si fuera el demonio. In this way he will hate my lord Don Mauro as if he were the devil.

-Pues me parece -dijo mi amo dándose un golpe en la majestuosa cerviz-, que el señor licenciado tiene muchísima razón. "Well, it seems to me," said my master, slapping his majestic neck, "that the master is very right." Eso mismo dije yo a mihermana; pero como Restituta es tan ambiciosa, que se dejaría desollar por un ochavo, ha dado en sacarle el cuero a la muchacha. I said the same to my sister; But since Restituta is so ambitious, that she would let herself be flayed by an ochavo, she has taken the girl's hide. ¿No somos ricos Sr. Lobo? Pues si somos ricos ¿a qué viene el descajillarse por un maravedí? Well, if we are rich, what is the point of discarding for a maravedí? Pero con mi hermana no hay quien pueda. But with my sister there is no one who can. ¿Le parece a Vd.? Aquí vivimos como en el hospicio: mi padre se llama hogaza y yo me muero de hambre, como dijo el otro. Here we live like in the hospice: my father is called loaf and I am starving, as the other said. Pues digo que ha de ser lo que yo mando, y mi hermana que se case con Juan de Dios y se lleve lo suyo... Y nada más. Well, I say that it must be what I command, and my sister to marry Juan de Dios and take his own ... And nothing else. Inesita no trabajará más, porque si se me muere... Inesita won't work anymore, because if she dies ...

-Además -dijo Lobo-; procure Vd. "Besides," said Wolf; try you. ser amable con ella. Cuide algo más de lo exterior, y no se le presente con esa facha de mozo de cordel, porque las niñas son niñas, Sr. Take care of something more of the exterior, and do not present yourself with that appearance of a string boy, because girls are girls, Mr. D. Mauro, y no se entra en el templo del amor sino por la puerta del buen parecer. D. Mauro, and one does not enter the temple of love but through the door of good looks.

-Eso está muy bien parlado. -That's very good. Si fuera por mí... Yo quiero vestirme bien, pero esa langostilla de Restituta no me deja, y dice que no me he de poner el traje bonito más que el día de  San Corpus Christi . If it were up to me ... I want to dress well, but that lobster from Restituta won't let me, and he says that I shouldn't wear the nice suit except on San Corpus Christi day. Nada, nada; aquí mando yo; me pondré guapote, porque yo... a Dios gracias, no soy de esos que necesitan afeites y menjurjes para parecer bien, y cuanto me cae encima está que ni pintado. Nothing nothing; I rule here; I'll get pretty, because I ... thank God, I'm not one of those who need shaving and concoctions to look good, and everything that falls on me is not even painted. Trataré a Inesita como ella se merece, y Dios por delante. I will treat Inesita as she deserves, and God ahead. Antes de un mes la llevo a la parroquia. Within a month I take her to the parish.

-Ese es el mejor sistema, Sr. D. Mauro. Con las amenazas, con el encierro, con las privaciones, con el trabajo excesivo no conseguirán Vds. With the threats, with the confinement, with the deprivations, with the excessive work you will not get. sino que la muchacha les odie, y se enamorisque del primer pelafustán que pase por la calle. but that the girl hates them, and falls in love with the first pelafustan that passes by the street.

Así hablaron el comerciante y el leguleyo. Despidiéronse después, y el segundo salió a la calle por la tienda. Retireme a toda prisa; pero aunque no hice ruido, doña Restituta, con su sutilísimo órgano auditivo debió sentir no sé si mi aliento o el ligero rumor de un ladrillo roto que se movió bajo mis pisadas. Leave in a hurry; but although I did not make a noise, Dona Restituta, with her very subtle auditory organ, she must have felt, I don't know if my breath or the slight noise of a broken brick that moved under my footsteps. Esto produjo cierta alarma en su vigilante espíritu, y saliendo al encuentro de su hermano que subía, le dijo:

-Me parece que he sentido ruido. -I think I felt noise. ¿Tendremos ladroncitos? Anoche hicieron un robo en la calle Imperial, metiéndose por los tejados.

Registraron toda la casa, mientras yo, metido entre mis sábanas, fingía dormir como un talego. They searched the whole house, while I, tucked between my sheets, pretended to sleep like a duffel bag. Al fin convencidos de que no había ladrones se acostaron. Mucho más tarde advertí que doña Restituta registraba la casa segunda vez, hasta que todo quedó en silencio. Cerca ya de la madrugada oí ruido de monedas. Near dawn I heard the noise of coins. Era doña Restituta contando su dinero. Después la sentí salir de su cuarto, bajar a la trastienda y de allí al sótano, donde estuvo más de una hora.