×

We use cookies to help make LingQ better. By visiting the site, you agree to our cookie policy.


image

Español con Juan, Los almendrones de Cuba (2)

Los almendrones de Cuba (2)

Pero lo que sí está claro es que el gobierno de Cuba usa esas imágenes de los coches de época que circulan por las calles de La Habana Vieja para atraer turistas a la isla. Me parece normal. Cada país vende una imagen determinada para atraer a los turistas, ¿no? Sin ir más lejos, Inglaterra, donde yo vivo, ¿qué vende? Vende la imagen de la Reina y de los príncipes, ¿no? La imagen de la Familia Real.

De hecho, mucha gente piensa que una de las razones por las que se mantiene la monarquía en Inglaterra es el turismo. Cuando los turistas van a Inglaterra, por ejemplo, quieren ver el Palacio de Buckingham, el cambio de la guardia y todo eso…

Y el gobierno inglés da a los turistas lo que los turistas quieren, lo que los turistas buscan, aunque, claro, la realidad (subjuntivo), aunque la realidad SEA mucho más compleja, ¿no? En fin, eso da para otro tema. La imagen que dan las ciudades, los países, para atraer turistas y lo que de verdad es el país.

La imagen que se vende en el mundo de inglaterra, con su reina, las cabinas de teléfono rojas, los autobuses de dos plantas… Eso es lo que el turista busca y eso es lo que el gobierno vende. Aunque la realidad (subjuntivo), aunque la realidad SEA diferente, más compleja.

Y eso es también lo que pasa en Cuba. La gente, los turistas, vamos buscando ese paisaje de coches antiguos, de coches de época y eso es lo que nos dan… Nos dan lo que buscamos.

Lo que pasa es que detrás de cada uno de esos coches antiguos se esconde quizás algún drama. No todo es tan bonito como parece.

No todo el mundo sabe por qué en La Habana hay tantos coches norteamericanos de los años cincuenta.

Al parecer, por lo que he leído, antes de la Revolución Cubana de Fidel Castro, que tuvo lugar el año 1959, Cuba era el país de América Latina con más automóviles. Y, aún más sorprendente, el sexto país del mundo en el número de autos por habitante, detrás solo de Estados Unidos, Canadá, Gran Bretaña, Venezuela y Alemania Occidental.

Por lo que he leído, en 1959, el año de la revolución, por las calles, por las carreteras y por las avenidas de Cuba circulaban cerca de 200.000 autos, la mayoría de los cuales eran norteamericanos.

Con la revolución comunista llegó el bloqueo de EEUU y la prohibición de importar coches nuevos.

Los cubanos tenían que apañarse con los coches que se habían quedado en la isla, los coches de las grandes marcas de los años 40 y 50.

No conozco en detalle cómo eran las reglas del país durante aquellos años, pero parece que, además, para la mayoría de los cubanos estaba prohibido comprar automóviles nuevos. Solo se podían comprar automóviles rusos, como los legendarios Lada y Moskvich, pero incluso para comprar uno de estos había que tener un permiso especial para comprarlos. No todo el mundo podía comprarlos. Había que explicar y justificar para qué se quería usar el coche.

Total, que para la inmensa mayoría de los cubanos, comprar un coche, un auto, era algo imposible.

La mayoría de los cubanos tenían que apañárselas con los autos norteamericanos que había en la isla antes de la Revolución.

Con el paso del tiempo, obviamente, estos coches se fueron haciendo viejos, se fueron estropeando y, como no había piezas de recambio (estaba prohibido importar las piezas de recambio para estos coches), pues los cubanos tuvieron que ingeniárselas para encontrar alternativas. Por ejemplo, si una pieza de un auto se rompía y no se encontraba una nueva, pues se le ponía una pieza vieja de otro coche, aunque fuera de otra marca o de otro modelo diferente. También surgieron talleres que fabricaban las piezas que no se podían encontrar.

A veces, incluso, se ponían piezas sacadas de un tractor, de una moto vieja, o, ¿por qué no? de una lavadora.

En fin, el ingenio para hacer que estas antiguallas rodantes sigan funcionando es algo que no falta a los cubanos.

Y ahí están, todavía rodando por las calles, las avenidas y las carreteras de Cuba, estos coches antiguos, relucientes, dando una nota de color y creando un paisaje único en el mundo que se ha convertido en algo típico y emblemático que atrae a muchos turistas a la isla.

La mayoría de estos almendrones, como se les llama popularmente en Cuba, se usan, como digo, como taxis o para hacer tours turísticos.

A mí los almendrones me recuerdan un poco a esos actores viejos que se hacen un montón de operaciones de cirugía estética para intentar frenar el envejecimiento y el paso del tiempo y al final resultan irreconocibles.

En los últimos años la ley ha cambiado y ya no está prohibido comprar un coche nuevo. Sin embargo, la importación de los automóviles está controlada por el Estado y los precios son tan altos, tan exageradamente altos, que en la práctica casi ningún cubano se puede permitir comprar un coche nuevo. Ni tampoco de segunda mano. Al parecer los precios de los autos usados son también muy altos.

De hecho, en Cuba se dice que comprar un carro nuevo ha pasado de ser algo prohibido a ser algo “prohibitivo”. Algo prohibitivo quiere decir que es muy caro; algo que es tan caro que uno no se lo puede permitir.

En fin, que comprar un coche en Cuba parece que sigue siendo un sueño inalcanzable para la mayoría de los cubanos.

Lo que quizás tampoco sepa el turista es que Cuba tiene un montón de problemas con el transporte. Es muy difícil moverse de un lugar a otro porque hay una gran escasez de autobuses o, como los llaman en la isla: ómnibus o guaguas.

Debido a las sanciones económicas y el bloqueo comercial de EEUU, en Cuba hay escasez de combustible y a menudo faltan piezas para reparar los ómnibus que se estropean.

Tampoco ayudan a resolver el problema del transporte las restricciones impuestas por la crisis sanitaria del Covid y ahora, para colmo, con la guerra en Ucrania tampoco llegan las piezas de repuesto que los cubanos necesitan para reparar sus autos y los ómnibus, pues la mayoría llegan a Cuba desde Rusia. Y como hay un embargo internacional que impide el comercio con Rusia, pues, entonces no llegan a la isla las piezas que necesitan los cubanos para reparar sus autos, los ómnibus y las guaguas.

Al parecer, por lo que he leído, hay escasez incluso de ambulancias.

Estos problemas de transporte, sin embargo, afectan fundamentalmente a los cubanos que tienen que moverse habitualmente para ir a trabajar, por ejemplo, o que se ponen enfermos y no hay una ambulancia para llevarlos al hospital urgentemente.

El turista, sin embargo, puede alquilar un coche para moverse por la isla. Al parecer, el gobierno de Cuba está promoviendo que haya coches de alquiler nuevos en la isla para los turistas. Creo que por 50 o 60 euros al día, es posible alquilar un auto nuevo para moverse con facilidad sin tener que depender del transporte público que, como digo, es bastante caótico.

Como es fácil imaginar, los cubanos tienen sentimientos encontrados respecto a esto.

Por un lado, es normal que el gobierno intente atraer el turismo internacional a la isla dando ciertas facilidades y haciendo que la estancia en Cuba sea lo más cómoda posible. Si viajar por la isla o moverse dentro de la capital resulta incómodo y lleva un montón de tiempo, mucha gente quizás desista de ir.

Por otro lado, si el ciudadano de Cuba, el cubano normal y corriente, tiene tantos problemas para comprar un coche o si no encuentran piezas de repuesto para reparar los coches viejos que se estropean… Si el transporte público es un caos y si hay escasez incluso de ambulancias… que vengan los turistas de fuera y que se muevan por la isla con coches nuevos alquilados que ellos no podrán permitirse jamás, pues, entonces, creo que debe de ser bastante frustrante, ¿no?

En fin, yo, por eso, tengo también sentimientos encontrados a la hora de hacer turismo en lugares donde sé que la gente lo está pasando mal.

Por un lado, me parece genial poder viajar, conocer otras culturas, otros modos de vida… Y seguramente, el turista que va a Cuba, por ejemplo, seguramente está ayudando al desarrollo económico de la isla porque los cubanos necesitan la entrada de capital. Eso está bien.

Lo que pasa es que a veces el contraste entre el nivel económico, el poder adquisitivo, del turista y el lugareño, en este caso los cubanos de a pie, el contraste digo, es tan grande que, en fin, me hace sentir un poco incómodo, ¿no?

Tú estás allí haciendo turismo, viajando en un coche alquilado por El Malecón, tomando mojitos, bañándote en la playa o en la piscina del hotel y ellos, allí, intentando sobrevivir como pueden…

En fin, no sé, es algo que me produce un poco de incomodidad.

No he estado nunca en Cuba, como digo, pero… Hace unos años fui a Buenos Aries, en Argentina, y tuve una experiencia un poco similar. Encontré gente que lo estaba pasando realmente mal, trabajando un montón y ganando muy poco dinero y, bueno, yo tenía la impresión un poco de estar haciendo algo mal.

No sé, yo creo que… no sé, bueno, supongo que es algo que experimenta mucha gente, no solo yo, cuando se viaja a países donde la gente lo está pasando mal económicamente e intenta sobrevivir día a día.

Es una sensación desagradable, como si estuviera comiéndome algo muy sabroso, un bocadillo de jamón serrano, una paella o una tortilla de patatas delante de alguien con mucha hambre, alguien que no se lo puede permitir y que está allí, mirándome, esperando quizás a coger lo que a mí me sobre o recoger algunas de las migajas que a mí se me caen de la boca.

Me siento un poco culpable. No me gusta que otros vivan de mis sobras o de mis migajas.

En fin, bueno, chicos, que nada, yo con esto no quiero decir que no haya que ir a Cuba. Sí, por supuesto que hay que ir.

Viajar es bueno, por supuesto, pero quizás hay que hacerlo más como viajero y menos como turista. Es decir, hay que ir un poco más allá de las fotos y las postales que nos venden con imágenes muy bonitas de playas con agua transparente, comida sabrosa, coches antiguos típicos, mojitos, música por las calles… Cuba es eso, sí, pero la realidad es mucho más compleja que eso. Viajar está muy bien, pero hay que hacerlo de forma que nos ayude a ver la realidad del país y sus gentes. No nos podemos conformar con las imágenes y los típicos tópicos, ¿no?

Esto lo digo de Cuba, pero habría que decirlo de todos los países, ¿no? No solo de Cuba. Creo que es importante viajar a un lugar con los ojos bien abiertos, con una actitud crítica e ir más allá de lo que dicen las guías oficiales…

¿Tengo razón o no tengo razón? ¿Vosotros qué pensáis?

¿Habéis estado en Cuba? ¿Cómo es? ¿Qué experiencia habéis tenido?

Dejad un comentario escrito con vuestra opinión, por favor. De hecho, tengo muchas ganas de ir a Cuba y me gustaría conocer vuestra experiencia o algún consejo sobre qué hacer o qué no hacer.

Chicos, basta por hoy, al final, como siempre, me he enrollado como una persiana de nuevo y este episodio al final es mucho más largo de lo que yo había previsto.

Lo dejamos aquí por hoy. Nos vemos… No, no nos vemos, nos escuchamos, nos escuchamos la próxima semana, en el próximo episodio, como siempre, aquí en Español con Juan.

¡Hasta muy pronto!

Los almendrones de Cuba (2) Die Mandelbäume von Kuba (2) Cuban almonds (2) I mandorli di Cuba (2) Drzewa migdałowe na Kubie (2) Kubas mandelträd (2)

Pero lo que sí está claro es que el gobierno de Cuba usa esas imágenes de los coches de época que circulan por las calles de La Habana Vieja para atraer turistas a la isla. But what is clear is that the Cuban government uses those images of vintage cars that circulate through the streets of Old Havana to attract tourists to the island. Me parece normal. It seems normal to me. Cada país vende una imagen determinada para atraer a los turistas, ¿no? Each country sells a certain image to attract tourists, right? Sin ir más lejos, Inglaterra, donde yo vivo, ¿qué vende? Without going any further, England, where I live, what sells? Vende la imagen de la Reina y de los príncipes, ¿no? Es verkauft das Image der Königin und der Prinzen, richtig? It sells the image of the Queen and the princes, right? La imagen de la Familia Real. Das Bild der königlichen Familie. The image of the Royal Family.

De hecho, mucha gente piensa que una de las razones por las que se mantiene la monarquía en Inglaterra es el turismo. Tatsächlich denken viele Leute, dass einer der Gründe, warum die Monarchie in England aufrechterhalten wird, der Tourismus ist. In fact, many people think that one of the reasons why the monarchy is maintained in England is tourism. Cuando los turistas van a Inglaterra, por ejemplo, quieren ver el Palacio de Buckingham, el cambio de la guardia y todo eso… Wenn Touristen zum Beispiel nach England reisen, wollen sie den Buckingham Palace sehen, die Wachablösung und all das…

Y el gobierno inglés da a los turistas lo que los turistas quieren, lo que los turistas buscan, aunque, claro, la realidad (subjuntivo), aunque la realidad SEA mucho más compleja, ¿no? Und die englische Regierung gibt den Touristen, was die Touristen wollen, was die Touristen suchen, obwohl natürlich die Realität (Konjunktiv), obwohl die Realität viel komplexer IST, nicht wahr? And the English government gives the tourists what the tourists want, what the tourists are looking for, although, of course, the reality (subjunctive), although the reality IS much more complex, isn't it? En fin, eso da para otro tema. Wie auch immer, das ist für ein anderes Thema. Anyway, that's for another topic. La imagen que dan las ciudades, los países, para atraer turistas y lo que de verdad es el país. Das Image, das Städte und Länder vermitteln, um Touristen anzuziehen und was das Land wirklich ist. The image given by cities, countries, to attract tourists and what the country really is.

La imagen que se vende en el mundo de inglaterra, con su reina, las cabinas de teléfono rojas, los autobuses de dos plantas… Eso es lo que el turista busca y eso es lo que el gobierno vende. The image that is sold in the world of England, with its queen, the red telephone booths, the double-decker buses... That is what the tourist is looking for and that is what the government sells. Aunque la realidad (subjuntivo), aunque la realidad SEA diferente, más compleja. Although reality (subjunctive), although reality IS different, more complex.

Y eso es también lo que pasa en Cuba. And that is also what happens in Cuba. La gente, los turistas, vamos buscando ese paisaje de coches antiguos, de coches de época y eso es lo que nos dan…  Nos dan lo que buscamos. The people, the tourists, we go looking for that landscape of old cars, vintage cars and that is what they give us… They give us what we are looking for.

Lo que pasa es que detrás de cada uno de esos coches antiguos se esconde quizás algún drama. Was passiert ist, dass sich hinter jedem dieser alten Autos vielleicht ein Drama verbirgt. What happens is that behind each one of those old cars there is perhaps some drama hidden. No todo es tan bonito como parece. Nicht alles ist so schön, wie es scheint. Not everything is as pretty as it seems.

No todo el mundo sabe por qué en La Habana hay tantos coches norteamericanos de los años cincuenta. Nicht jeder weiß, warum in Havanna so viele amerikanische Autos aus den 1950er Jahren stehen. Not everyone knows why there are so many American cars from the 1950s in Havana.

Al parecer, por lo que he leído, antes de la Revolución Cubana de Fidel Castro, que tuvo lugar el año 1959, Cuba era el país de América Latina con más automóviles. Apparently, from what I have read, before Fidel Castro's Cuban Revolution, which took place in 1959, Cuba was the Latin American country with the most cars. Y, aún más sorprendente,  el sexto país del mundo en el número de autos por habitante, detrás solo de Estados Unidos, Canadá, Gran Bretaña, Venezuela y Alemania Occidental. Und, was noch überraschender ist, das sechstgrößte Land der Welt in Bezug auf die Anzahl der Autos pro Einwohner, nur hinter den Vereinigten Staaten, Kanada, Großbritannien, Venezuela und Westdeutschland. And, even more surprising, the sixth country in the world in the number of cars per inhabitant, behind only the United States, Canada, Great Britain, Venezuela and West Germany.

Por lo que he leído, en 1959, el año de la revolución,  por las calles, por las carreteras y por las avenidas de Cuba circulaban cerca de 200.000 autos, la mayoría de los cuales eran norteamericanos. Soweit ich gelesen habe, fuhren im Jahr der Revolution 1959 etwa 200.000 Autos auf den Straßen, Autobahnen und Alleen Kubas, die meisten davon aus Nordamerika. From what I have read, in 1959, the year of the revolution, around 200,000 cars circulated on the streets, highways and avenues of Cuba, most of which were North American.

Con la revolución comunista llegó el bloqueo de EEUU y la prohibición de importar coches nuevos. With the communist revolution came the US blockade and the ban on importing new cars.

Los cubanos tenían que apañarse con los coches que se habían quedado en la isla, los coches de las grandes marcas de los años 40 y 50. Die Kubaner mussten sich mit den auf der Insel verbliebenen Autos begnügen, den Autos der großen Marken der 40er und 50er Jahre. The Cubans had to make do with the cars that had remained on the island, the cars of the great brands of the 40s and 50s.

No conozco en detalle cómo eran las reglas del país durante aquellos años, pero parece que, además, para la mayoría de los cubanos estaba prohibido comprar automóviles nuevos. I don't know in detail what the rules of the country were like during those years, but it seems that, in addition, for most Cubans it was forbidden to buy new cars. Solo se podían comprar automóviles rusos, como los legendarios Lada y Moskvich, pero incluso para comprar uno de estos había que tener un permiso especial para comprarlos. You could only buy Russian cars, like the legendary Lada and Moskvich, but even to buy one of these you had to have special permission to buy them. No todo el mundo podía comprarlos. Nicht jeder konnte sie kaufen. Not everyone could buy them. Había que explicar y justificar para qué se quería usar el coche. You had to explain and justify what you wanted to use the car for.

Total, que para la inmensa mayoría de los cubanos, comprar un coche, un auto, era algo imposible. Kurz gesagt, für die überwiegende Mehrheit der Kubaner war der Kauf eines Autos, eines Autos, etwas Unmögliches. In short, for the vast majority of Cubans, buying a car, a car, was something impossible.

La mayoría de los cubanos tenían que apañárselas con los autos norteamericanos que había en la isla antes de la Revolución. Most Cubans had to make do with the American cars that were on the island before the Revolution.

Con el paso del tiempo, obviamente, estos coches se fueron haciendo viejos, se fueron estropeando y, como no había piezas de recambio (estaba prohibido importar las piezas de recambio para estos coches), pues los cubanos tuvieron que ingeniárselas para encontrar alternativas. Over time, obviously, these cars became old, they began to break down and, since there were no spare parts (it was forbidden to import spare parts for these cars), the Cubans had to find alternatives. Por ejemplo, si una pieza de un auto se rompía y no se encontraba una nueva, pues se le ponía una pieza vieja de otro coche, aunque fuera de otra marca o de otro modelo diferente. For example, if a part of a car broke down and a new one could not be found, then an old part from another car was put in it, even if it was of another brand or a different model. También surgieron talleres que fabricaban las piezas que no se podían encontrar. Workshops also sprang up that made the parts that could not be found.

A veces, incluso, se ponían piezas sacadas de un tractor, de una moto vieja, o, ¿por qué no? Sometimes they even used parts taken from a tractor, an old motorcycle, or why not? de una lavadora. of a washing machine.

En fin, el ingenio para hacer que estas antiguallas rodantes sigan funcionando es algo que no falta a los cubanos. Kurz gesagt, der Einfallsreichtum, diese rollenden Antiquitäten weiterhin funktionsfähig zu machen, ist etwas, an dem es den Kubanern nicht mangelt. In short, the ingenuity to make these rolling antiques continue to function is something that Cubans do not lack.

Y ahí están, todavía rodando por las calles, las avenidas y las carreteras de Cuba, estos coches antiguos, relucientes, dando una nota de color y creando un paisaje único en el mundo que se ha convertido en algo típico y emblemático que atrae a muchos turistas a la isla. And there they are, still rolling through the streets, avenues and highways of Cuba, these old cars, shiny, giving a note of color and creating a unique landscape in the world that has become something typical and emblematic that attracts many tourists to the island.

La mayoría de estos almendrones, como se les llama popularmente en Cuba, se usan, como digo, como taxis o para hacer tours turísticos. Most of these almendrones, as they are popularly called in Cuba, are used, as I say, as taxis or for tourist tours.

A mí los almendrones me recuerdan un poco a esos actores viejos que se hacen un montón de operaciones de cirugía estética para intentar frenar el envejecimiento y el paso del tiempo y al final resultan irreconocibles. Almendrones remind me a bit of those old actors who undergo a lot of cosmetic surgery to try to slow down aging and the passage of time, and in the end they turn out to be unrecognizable.

En los últimos años la ley ha cambiado y ya no está prohibido comprar un coche nuevo. In recent years the law has changed and it is no longer prohibited to buy a new car. Sin embargo, la importación de los automóviles está controlada por el Estado y los precios son tan altos, tan exageradamente altos, que en la práctica casi ningún cubano se puede permitir comprar un coche nuevo. However, the importation of automobiles is controlled by the State and the prices are so high, so exaggeratedly high, that in practice almost no Cuban can afford to buy a new car. Ni tampoco de segunda mano. Not second hand either. Al parecer los precios de los autos usados son también muy altos. Apparently the prices of used cars are also very high.

De hecho, en Cuba se dice que comprar un carro nuevo ha pasado de ser algo prohibido a ser algo “prohibitivo”. In fact, in Cuba it is said that buying a new car has gone from being something prohibited to being something "prohibitive". Algo prohibitivo quiere decir que es muy caro; algo que es tan caro que uno no se lo puede permitir. Something prohibitive means that it is very expensive; something that is so expensive that one cannot afford it.

En fin, que comprar un coche en Cuba parece que sigue siendo un sueño inalcanzable para la mayoría de los cubanos. In short, it seems that buying a car in Cuba is still an unattainable dream for most Cubans.

Lo que quizás tampoco sepa el turista es que Cuba tiene un montón de problemas con el transporte. Es muy difícil moverse de un lugar a otro porque hay una gran escasez de autobuses o, como los llaman en la isla: ómnibus o guaguas.

Debido a las sanciones económicas y el bloqueo comercial de EEUU, en Cuba hay escasez de combustible y a menudo faltan piezas para reparar los ómnibus que se estropean.

Tampoco ayudan a resolver el problema del transporte las restricciones impuestas por la crisis sanitaria del Covid y ahora, para colmo, con la guerra en Ucrania tampoco llegan las piezas de repuesto que los cubanos necesitan para reparar sus autos y los ómnibus, pues la mayoría llegan a Cuba desde Rusia. Y como hay un embargo internacional que impide el comercio con Rusia, pues, entonces no llegan a la isla las piezas que necesitan los cubanos para reparar sus autos, los ómnibus y las guaguas.

Al parecer, por lo que he leído, hay escasez incluso de ambulancias.

Estos problemas de transporte, sin embargo, afectan fundamentalmente a los cubanos que tienen que moverse habitualmente para ir a trabajar, por ejemplo, o que se ponen enfermos y no hay una ambulancia para llevarlos al hospital urgentemente.

El turista, sin embargo, puede alquilar un coche para moverse por la isla. Al parecer, el gobierno de Cuba está promoviendo que haya coches de alquiler nuevos en la isla para los turistas. Creo que por 50 o 60 euros al día, es posible alquilar un auto nuevo para moverse con facilidad sin tener que depender del transporte público que, como digo, es bastante caótico.

Como es fácil imaginar, los cubanos tienen sentimientos encontrados respecto a esto. As is easy to imagine, Cubans have mixed feelings about this.

Por un lado, es normal que el gobierno intente atraer el turismo internacional a la isla dando ciertas facilidades y haciendo que la estancia en Cuba sea lo más cómoda posible. Si viajar por la isla o moverse dentro de la capital resulta incómodo y lleva un montón de tiempo, mucha gente quizás desista de ir.

Por otro lado, si el ciudadano de Cuba, el cubano normal y corriente, tiene tantos problemas para comprar un coche o si no encuentran piezas de repuesto para reparar los coches viejos que se estropean… Si el transporte público es un caos y si hay escasez incluso de ambulancias… que vengan los turistas de fuera y que se muevan por la isla con coches nuevos alquilados que ellos no podrán permitirse jamás, pues, entonces, creo que debe de ser bastante frustrante, ¿no?

En fin, yo, por eso, tengo también sentimientos encontrados a la hora de hacer turismo en lugares donde sé que la gente lo está pasando mal.

Por un lado, me parece genial poder viajar, conocer otras culturas, otros modos de vida… Y seguramente, el turista que va a Cuba, por ejemplo, seguramente está ayudando al desarrollo económico de la isla porque los cubanos necesitan la entrada de capital. Eso está bien.

Lo que pasa es que a veces el contraste entre el nivel económico, el poder adquisitivo, del turista y el lugareño, en este caso los cubanos de a pie, el contraste digo, es tan grande que, en fin, me hace sentir un poco incómodo, ¿no?

Tú estás allí haciendo turismo, viajando en un coche alquilado por El Malecón, tomando mojitos, bañándote en la playa o en la piscina del hotel y ellos, allí, intentando sobrevivir como pueden…

En fin, no sé, es algo que me produce un poco de incomodidad.

No he estado nunca en Cuba, como digo, pero… Hace unos años fui a Buenos Aries, en Argentina, y tuve una experiencia un poco similar. Encontré gente que lo estaba pasando realmente mal, trabajando un montón y ganando muy poco dinero y, bueno, yo tenía la impresión un poco de estar haciendo algo mal. I found people who were having a really bad time, working a lot and earning very little money and, well, I had the impression that I was doing something wrong.

No sé, yo creo que… no sé, bueno, supongo que es algo que experimenta mucha gente, no solo yo, cuando se viaja a países donde la gente lo está pasando mal económicamente e intenta sobrevivir día a día.

Es una sensación desagradable, como si estuviera comiéndome algo muy sabroso, un bocadillo de jamón serrano, una paella o una tortilla de patatas delante de alguien con mucha hambre, alguien que no se lo puede permitir y que está allí, mirándome, esperando quizás a coger lo que a mí me sobre o recoger algunas de las migajas que a mí se me caen de la boca.

Me siento un poco culpable. No me gusta que otros vivan de mis sobras o de mis migajas. I don't like others to live on my leftovers or my crumbs.

En fin, bueno, chicos, que nada, yo con esto no quiero decir que no haya que ir a Cuba. Anyway, well, guys, nothing, I don't mean to say that you shouldn't go to Cuba. Sí, por supuesto que hay que ir.

Viajar es bueno, por supuesto, pero quizás hay que hacerlo más como viajero y menos como turista. Traveling is good, of course, but perhaps you should do it more as a traveler and less as a tourist. Es decir, hay que ir un poco más allá de las fotos y las postales que nos venden con imágenes muy bonitas de playas con agua transparente, comida sabrosa, coches antiguos típicos, mojitos, música por las calles… Cuba es eso, sí, pero la realidad es mucho más compleja que eso. Viajar está muy bien, pero hay que hacerlo de forma que nos ayude a ver la realidad del país y sus gentes. No nos podemos conformar con las imágenes y los típicos tópicos, ¿no? We can't settle for images and typical clichés, can we?

Esto lo digo de Cuba, pero habría que decirlo de todos los países, ¿no? No solo de Cuba. Creo que es importante viajar a un lugar con los ojos bien abiertos, con una actitud crítica e ir más allá de lo que dicen las guías oficiales…

¿Tengo razón o no tengo razón? ¿Vosotros qué pensáis?

¿Habéis estado en Cuba? ¿Cómo es? ¿Qué experiencia habéis tenido?

Dejad un comentario escrito con vuestra opinión, por favor. De hecho, tengo muchas ganas de ir a Cuba y me gustaría conocer vuestra experiencia o algún consejo sobre qué hacer o qué no hacer.

Chicos, basta por hoy, al final, como siempre, me he enrollado como una persiana de nuevo y este episodio al final es mucho más largo de lo que yo había previsto.

Lo dejamos aquí por hoy. Nos vemos… No, no nos vemos, nos escuchamos, nos escuchamos la próxima semana, en el próximo episodio, como siempre,  aquí en Español con Juan.

¡Hasta muy pronto!