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Trafalgar by Benito Pérez Galdós, -X-

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Al amanecer del día 20, el viento soplaba con mucha fuerza, y por esta causa los navíos estaban muy distantes unos de otros. Mas habiéndose calmado el viento poco después de mediodía, el buque almirante hizo señales de que se formasen las cinco columnas: vanguardia, centro, retaguardia y los dos cuerpos que componían la reserva.

Yo me deleitaba viendo cómo acudían dócilmente a la formación aquellas moles, y aunque, a causa de la diversidad de sus condiciones marineras, las maniobras no eran muy rápidas y las líneas formadas poco perfectas, siempre causaba admiración contemplar aquel ejercicio. El viento soplaba del SO., según dijo Marcial, que lo había profetizado desde por la mañana, y la escuadra, recibiéndole por estribor, marchó en dirección del Estrecho. Por la noche se vieron algunas luces, y al amanecer del 21 vimos veintisiete navíos por barlovento, entre los cuales Marcial designó siete de tres puentes. A eso de las ocho, los treinta y tres barcos de la flota enemiga estaban a la vista formados en dos columnas de Nelson. Nuestra escuadra formaba una larguísima línea, y según las apariencias, las dos columnas de, dispuestas en forma de cuña, avanzaban como si quisieran cortar nuestra línea por el centro y retaguardia.

Tal era la situación de ambos contendientes, cuando el Bucentauro hizo señal de virar en redondo. Ustedes quizá no entiendan esto; pero les diré que consistía en variar diametralmente de rumbo, es decir, que si antes el viento impulsaba nuestros navíos por estribor, después de aquel movimiento nos daba por babor, de modo que marchábamos en dirección casi opuesta a la que antes teníamos. Las proas se dirigían al Norte, y este movimiento, cuyo objeto era tener a Cádiz bajo el viento, para arribar a él en caso de desgracia, fue muy criticado a bordo del Trinidad , y especialmente por Marcial, que decía:

«Ya se esparrancló la línea de batalla, que antes era mala y ahora es peor».

Efectivamente, la vanguardia se convirtió en retaguardia, y la escuadra de reserva, que era la mejor, según oí decir, quedó a la cola. Como el viento era flojo, los barcos de diversa andadura y la tripulación poco diestra, la nueva línea no pudo formarse ni con rapidez ni con precisión: unos navíos andaban muy a prisa y se precipitaban sobre el delantero; otros marchaban poco, rezagándose, o se desviaban, dejando un gran claro que rompía la línea, antes de que el enemigo se tomase el trabajo de hacerlo.

Se mandó restablecer el orden; pero por obediente que sea un buque, no es tan fácil de manejar como un caballo. Con este motivo, y observando las maniobras de los barcos más cercanos, Medio-hombre decía:

«La línea es más larga que el camino de Santiago. Si el Señorito la corta, adiós mi bandera: perderíamos hasta el modo de andar, manque los pelos se nos hicieran cañones. Señores, nos van a dar julepe por el centro. ¿Cómo pueden venir a ayudarnos el San Juan y el Bahama , que están a la cola, ni el Neptuno ni el Rayo , que están a la cabeza? (Rumores de aprobación.) Además, estamos a sotavento, y los casacones pueden elegir el punto que quieran para atacarnos. Bastante haremos nosotros con defendernos como podamos. Lo que digo es que Dios nos saque bien, y nos libre de franceses por siempre jamás amén Jesús».

El sol avanzaba hacia el zenit, y el enemigo estaba ya encima.

«¿Les parece a ustedes que ésta es hora de empezar un combate? ¡Las doce del día!» exclamaba con ira el marinero aunque no se atrevía a hacer demasiado pública su demostración, ni estas conferencias pasaban de un pequeño círculo, dentro del cual yo, llevado de mi sempiterna insaciable curiosidad, me había injerido.

No sé por qué me pareció advertir en todos los semblantes cierta expresión de disgusto. Los oficiales en el alcázar de popa y los marineros y contramaestres en el de proa, observaban los navíos sotaventados y fuera de línea, entre los cuales había cuatro pertenecientes al centro.

Se me había olvidado mencionar una operación preliminar del combate, en la cual tomé parte. Hecho por la mañana el zafarrancho, preparado ya todo lo concerniente al servicio de piezas y lo relativo a maniobras, oí que dijeron:

«La arena, extender la arena».

Marcial me tiró de la oreja, y llevándome a una escotilla, me hizo colocar en línea con algunos marinerillos de leva, grumetes y gente de poco más o menos. Desde la escotilla hasta el fondo de la bodega se habían colocado, escalonados en los entrepuentes, algunos marineros, y de este modo iban sacando los sacos de arena. Uno se lo daba al que tenía al lado, éste al siguiente, y de este modo se sacaba rápidamente y sin trabajo cuanto se quisiera. Pasando de mano en mano, subieron de la bodega multitud de sacos, y mi sorpresa fue grande cuando vi que los vaciaban sobre la cubierta, sobre el alcázar y castillos, extendiendo la arena hasta cubrir toda la superficie de los tablones. Lo mismo hicieron en los entrepuentes. Por satisfacer mi curiosidad, pregunté al grumete que tenía al lado.

«Es para la sangre—me contestó con indiferencia.

—¡Para la sangre!» repetí yo sin poder reprimir un estremecimiento de terror.

Miré la arena; miré a los marineros, que con gran algazara se ocupaban en aquella faena, y por un instante me sentí cobarde. Sin embargo, la imaginación, que entonces predominaba en mí, alejó de mi espíritu todo temor, y no pensé más que en triunfos y agradables sorpresas.

El servicio de los cañones estaba listo, y advertí también que las municiones pasaban de los pañoles al entrepuente por medio de una cadena humana semejante a la que había sacado la arena del fondo del buque. Los ingleses avanzaban para atacarnos en dos grupos. Uno se dirigía hacia nosotros, y traía en su cabeza, o en el vértice de la cuña, un gran navío con insignia de almirante. Después supe que era el Victory y que lo mandaba Nelson. El otro traía a su frente el Royal Sovereign , mandado por Collingwood.

Todos estos hombres, así como las particularidades estratégicas del combate, han sido estudiados por mí más tarde.

Mis recuerdos, que son clarísimos en todo lo pintoresco y material, apenas me sirven en lo relativo a operaciones que entonces no comprendía. Lo que oí con frecuencia de boca de Marcial, unido a lo que después he sabido, pudo darme a conocer la formación de nuestra escuadra; y para que ustedes lo comprendan bien, les pongo aquí una lista de nuestros navíos, indicando los desviados, que dejaban un claro, la nacionalidad y la forma en que fuimos atacados. Poco más o menos, era así:

Eran las doce menos cuarto. El terrible instante se aproximaba. La ansiedad era general, y no digo esto juzgando por lo que pasaba en mi espíritu, pues atento a los movimientos del navío en que se decía estaba Nelson, no pude por un buen rato darme cuenta de lo que pasaba a mi alrededor.

De repente nuestro comandante dio una orden terrible. La repitieron los contramaestres. Los marineros corrieron hacia los cabos, chillaron los motones, trapearon las gavias.

«¡En facha, en facha!—exclamó Marcial, lanzando con energía un juramento—. Ese condenado se nos quiere meter por la popa».

Al punto comprendí que se había mandado detener la marcha del Trinidad para estrecharle contra el Bucentauro , que venía detrás, porque el Victory parecía venir dispuesto a cortar la línea por entre los dos navíos.

Al ver la maniobra de nuestro buque, pude observar que gran parte de la tripulación no tenía toda aquella desenvoltura propia de los marineros, familiarizados como Marcial con la guerra y con la tempestad. Entre los soldados vi algunos que sentían el malestar del mareo, y se agarraban a los obenques para no caer. Verdad es que había gente muy decidida, especialmente en la clase de voluntarios; pero por lo común todos eran de leva, obedecían las órdenes como de mala gana, y estoy seguro de que no tenían ni el más leve sentimiento de patriotismo. No les hizo dignos del combate más que el combate mismo, como advertí después. A pesar del distinto temple moral de aquellos hombres, creo que en los solemnes momentos que precedieron al primer cañonazo, la idea de Dios estaba en todas las cabezas.

Por lo que a mí toca, en toda la vida ha experimentado mi alma sensaciones iguales a las de aquel momento. A pesar de mis pocos años, me hallaba en disposición de comprender la gravedad del suceso, y por primera vez, después que existía, altas concepciones, elevadas imágenes y generosos pensamientos ocuparon mi mente. La persuasión de la victoria estaba tan arraigada en mi ánimo, que me inspiraban cierta lástima los ingleses, y les admiraba al verles buscar con tanto afán una muerte segura.

Por primera vez entonces percibí con completa claridad la idea de la patria, y mi corazón respondió a ella con espontáneos sentimientos, nuevos hasta aquel momento en mi alma. Hasta entonces la patria se me representaba en las personas que gobernaban la nación, tales como el Rey y su célebre Ministro, a quienes no consideraba con igual respeto. Como yo no sabía más historia que la que aprendí en la Caleta, para mí era de ley que debía uno entusiasmarse al oír que los españoles habían matado muchos moros primero, y gran pacotilla de ingleses y franceses después. Me representaba, pues, a mi país como muy valiente; pero el valor que yo concebía era tan parecido a la barbarie como un huevo a otro huevo. Con tales pensamientos, el patriotismo no era para mí más que el orgullo de pertenecer a aquella casta de matadores de moros.

Pero en el momento que precedió al combate, comprendí todo lo que aquella divina palabra significaba, y la idea de nacionalidad se abrió paso en mi espíritu, iluminándolo y descubriendo infinitas maravillas, como el sol que disipa la noche, y saca de la obscuridad un hermoso paisaje. Me representé a mi país como una inmensa tierra poblada de gentes, todos fraternalmente unidos; me representé la sociedad dividida en familias, en las cuales había esposas que mantener, hijos que educar, hacienda que conservar, honra que defender; me hice cargo de un pacto establecido entre tantos seres para ayudarse y sostenerse contra un ataque de fuera, y comprendí que por todos habían sido hechos aquellos barcos para defender la patria, es decir, el terreno en que ponían sus plantas, el surco regado con su sudor, la casa donde vivían sus ancianos padres, el huerto donde jugaban sus hijos, la colonia descubierta y conquistada por sus ascendientes, el puerto donde amarraban su embarcación fatigada del largo viaje; el almacén donde depositaban sus riquezas; la iglesia, sarcófago de sus mayores, habitáculo de sus santos y arca de sus creencias; la plaza, recinto de sus alegres pasatiempos; el hogar doméstico, cuyos antiguos muebles, transmitidos de generación en generación, parecen el símbolo de la perpetuidad de las naciones; la cocina, en cuyas paredes ahumadas parece que no se extingue nunca el eco de los cuentos con que las abuelas amansan la travesura e inquietud de los nietos; la calle, donde se ven desfilar caras amigas; el campo, el mar, el cielo; todo cuanto desde el nacer se asocia a nuestra existencia, desde el pesebre de un animal querido hasta el trono de reyes patriarcales; todos los objetos en que vive prolongándose nuestra alma, como si el propio cuerpo no le bastara.

Yo creía también que las cuestiones que España tenía con Francia o con Inglaterra eran siempre porque alguna de estas naciones quería quitarnos algo, en lo cual no iba del todo descaminado. Parecíame, por tanto, tan legítima la defensa como brutal la agresión; y como había oído decir que la justicia triunfaba siempre, no dudaba de la victoria. Mirando nuestras banderas rojas y amarillas, los colores combinados que mejor representan al fuego, sentí que mi pecho se ensanchaba; no pude contener algunas lágrimas de entusiasmo; me acordé de Cádiz, de Vejer; me acordé de todos los españoles, a quienes consideraba asomados a una gran azotea, contemplándonos con ansiedad; y todas estas ideas y sensaciones llevaron finalmente mi espíritu hasta Dios, a quien dirigí una oración que no era Padre-nuestro ni Ave-María, sino algo nuevo que a mí se me ocurrió entonces. Un repentino estruendo me sacó de mi arrobamiento, haciéndome estremecer con violentísima sacudida. Había sonado el primer cañonazo.

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Al amanecer del día 20, el viento soplaba con mucha fuerza, y por esta causa los navíos estaban muy distantes unos de otros. At dawn on the 20th, the wind was blowing very hard, and for this reason the ships were far apart from each other. Mas habiéndose calmado el viento poco después de mediodía, el buque almirante hizo señales de que se formasen las cinco columnas: vanguardia, centro, retaguardia y los dos cuerpos que componían la reserva. But the wind having calmed shortly after noon, the admiral ship made signs that the five columns were formed: vanguard, center, rear, and the two bodies that made up the reserve.

Yo me deleitaba viendo cómo acudían dócilmente a la formación aquellas moles, y aunque, a causa de la diversidad de sus condiciones marineras, las maniobras no eran muy rápidas y las líneas formadas poco perfectas, siempre causaba admiración contemplar aquel ejercicio. I was delighted to see how those masses came docilely to the formation, and although, due to the diversity of their seamanship conditions, the maneuvers were not very fast and the lines formed not very perfect, it always caused admiration to contemplate that exercise. J'étais ravi de voir comment ces masses arrivaient docilement à la formation, et bien que, en raison de la diversité de leurs conditions de matelotage, les manœuvres n'étaient pas très rapides et les lignes formées pas très parfaites, cela faisait toujours l'admiration de contempler cet exercice. El viento soplaba del SO., según dijo Marcial, que lo había profetizado desde por la mañana, y la escuadra, recibiéndole por estribor, marchó en dirección del Estrecho. The wind was blowing from the SW, said Marcial, who had prophesied it since morning, and the squadron, receiving him by starboard, marched in the direction of the Strait. Le vent soufflait du SO, d'après Marcial, qui l'avait prophétisé depuis le matin, et l'escadre, le recevant par tribord, se dirigea vers le détroit. Por la noche se vieron algunas luces, y al amanecer del 21 vimos veintisiete navíos por barlovento, entre los cuales Marcial designó siete de tres puentes. At night some lights were seen, and at dawn on the 21st we saw twenty-seven ships upwind, among which Marcial designated seven of three bridges. La nuit, quelques lumières ont été vues, et à l'aube du 21, nous avons vu vingt-sept navires du côté au vent, parmi lesquels Marcial a désigné sept des trois ponts. A eso de las ocho, los treinta y tres barcos de la flota enemiga estaban a la vista formados en dos columnas de Nelson. At about eight o'clock, the thirty-three ships of the enemy fleet were in sight formed in two Nelson columns. Nuestra escuadra formaba una larguísima línea, y según las apariencias, las dos columnas de, dispuestas en forma de cuña, avanzaban como si quisieran cortar nuestra línea por el centro y retaguardia. Our squadron formed a very long line, and according to appearances, the two columns, arranged in the shape of a wedge, advanced as if they wanted to cut our line through the center and rear.

Tal era la situación de ambos contendientes, cuando el  Bucentauro hizo señal de virar en redondo. Such was the situation of both contenders, when the Bucentauro made a signal to turn around. Ustedes quizá no entiendan esto; pero les diré que consistía en variar diametralmente de rumbo, es decir, que si antes el viento impulsaba nuestros navíos por estribor, después de aquel movimiento nos daba por babor, de modo que marchábamos en dirección casi opuesta a la que antes teníamos. You may not understand this; but I will tell you that it consisted in diametrically changing course, that is, if before the wind was driving our ships to starboard, after that movement, we were on the port side, so we were going in a direction almost opposite to what we had before. Vous ne pouvez pas comprendre cela ; Mais je vous dirai qu'il consistait à varier diamétralement le cap, c'est-à-dire que si avant le vent propulsait nos navires à tribord, après ce mouvement il nous donnerait à bâbord, de sorte que nous marchions dans la direction presque opposée. à celui que nous avions auparavant. Las proas se dirigían al Norte, y este movimiento, cuyo objeto era tener a Cádiz bajo el viento, para arribar a él en caso de desgracia, fue muy criticado a bordo del  Trinidad , y especialmente por Marcial, que decía: The prows went to the North, and this movement, whose purpose was to have Cádiz under the wind, to arrive at it in case of misfortune, was criticized on board the Trinidad, and especially by Marcial, who said: Les étraves se dirigeaient vers le nord, et ce mouvement, dont le but était de maintenir Cadix sous le vent, pour l'atteindre en cas de malheur, a été très critiqué à bord du Trinidad, et notamment par Marcial, qui a déclaré :

«Ya se  esparrancló la línea de batalla, que antes era mala y ahora es peor». "The battle line has already been spread, which was bad before and now is worse." "La ligne de bataille a déjà été dispersée, ce qui était mauvais avant et est maintenant pire."

Efectivamente, la vanguardia se convirtió en retaguardia, y la escuadra de reserva, que era la mejor, según oí decir, quedó a la cola. Indeed, the vanguard became the rearguard, and the reserve squadron, which was the best, as I heard it said, remained behind. Como el viento era flojo, los barcos de diversa andadura y la tripulación poco diestra, la nueva línea no pudo formarse ni con rapidez ni con precisión: unos navíos andaban muy a prisa y se precipitaban sobre el delantero; otros marchaban poco, rezagándose, o se desviaban, dejando un gran claro que rompía la línea, antes de que el enemigo se tomase el trabajo de hacerlo. As the wind was weak, the boats of different walking and the crew little skillful, the new line could not be formed neither with speed nor with precision: some ships walked very in a hurry and they hurried on the forward; others marched little, lingering, or deviated, leaving a large clearing that broke the line, before the enemy took the trouble to do so. Comme le vent était faible, les bateaux d'allures différentes, et l'équipage peu habile, la nouvelle ligne ne pouvait être formée ni rapidement ni avec précision : certains bateaux allaient très vite et se précipitaient vers l'avant ; d'autres marchaient peu, à la traîne ou s'écartaient, laissant une grande clairière qui brisait la ligne, avant que l'ennemi n'en prenne la peine.

Se mandó restablecer el orden; pero por obediente que sea un buque, no es tan fácil de manejar como un caballo. Order was ordered to be restored; but however obedient a ship may be, it is not as easy to handle as a horse. Con este motivo, y observando las maniobras de los barcos más cercanos, Medio-hombre decía: With this motive, and observing the maneuvers of the nearest ships, Half-man said:

«La línea es más larga que el camino de Santiago. Si el  Señorito la corta, adiós mi bandera: perderíamos hasta el modo de andar,  manque los pelos se nos hicieran cañones. If the Señorito cuts it, bye-bye my flag: we would lose even the way we walk, even if our hair were to become cannons. Señores, nos van a dar julepe por el centro. Gentlemen, we are going to get a julep from the center. Messieurs, ils vont nous donner un julep au centre. ¿Cómo pueden venir a ayudarnos el  San Juan y el  Bahama , que están a la cola, ni el  Neptuno ni el  Rayo , que están a la cabeza? How can the San Juan and the Bahama, which are at the back, and the Neptune and the Ray, which are at the front, come to help us? Comment le San Juan et le Bahama, qui sont en bas, ni le Neptune ni le Rayon, qui sont en tête, peuvent-ils venir nous aider ? (Rumores de aprobación.) Además, estamos a sotavento, y los casacones pueden elegir el punto que quieran para atacarnos. Besides, we are downwind, and the casacons can choose any point they want to attack us. De plus, nous sommes sous le vent, et les entremetteurs peuvent choisir le point sur lequel ils veulent nous attaquer. Bastante haremos nosotros con defendernos como podamos. It will be enough for us to defend ourselves as best we can. Lo que digo es que Dios nos saque bien, y nos libre de franceses por siempre jamás amén Jesús». What I say is that God bring us out well, and deliver us from the French forever and ever amen Jesus".

El sol avanzaba hacia el zenit, y el enemigo estaba ya encima. The sun was advancing towards the zenith, and the enemy was already overhead.

«¿Les parece a ustedes que ésta es hora de empezar un combate? ¡Las doce del día!» exclamaba con ira el marinero aunque no se atrevía a hacer demasiado pública su demostración, ni estas conferencias pasaban de un pequeño círculo, dentro del cual yo, llevado de mi sempiterna insaciable curiosidad, me había injerido. Twelve o'clock!" exclaimed the sailor angrily, although he did not dare to make his demonstration too public, nor did these conferences go beyond a small circle, into which I, driven by my everlasting insatiable curiosity, had inserted myself.

No sé por qué me pareció advertir en todos los semblantes cierta expresión de disgusto. I don't know why I thought I noticed a certain expression of displeasure on all the faces. Los oficiales en el alcázar de popa y los marineros y contramaestres en el de proa, observaban los navíos sotaventados y fuera de línea, entre los cuales había cuatro pertenecientes al centro. The officers in the stern quarterdeck and the sailors and boatswains in the bow quarterdeck observed the ships underway and out of line, among which there were four belonging to the center.

Se me había olvidado mencionar una operación preliminar del combate, en la cual tomé parte. Hecho por la mañana el zafarrancho, preparado ya todo lo concerniente al servicio de piezas y lo relativo a maniobras, oí que dijeron: In the morning, after the preparations were made and everything concerning the service of parts and maneuvers was ready, I heard what they said:

«La arena, extender la arena». "The sand, spread the sand". "Le sable, répands le sable."

Marcial me tiró de la oreja, y llevándome a una escotilla, me hizo colocar en línea con algunos marinerillos de leva, grumetes y gente de poco más o menos. Marcial pulled me by the ear, and taking me to a hatchway, he had me lined up with some of the sailors, cabin boys, and other people of little more or less. Desde la escotilla hasta el fondo de la bodega se habían colocado, escalonados en los entrepuentes, algunos marineros, y de este modo iban sacando los sacos de arena. From the hatch to the bottom of the hold some sailors had been placed, staggered on the between decks, and in this way they were taking out the sandbags. Uno se lo daba al que tenía al lado, éste al siguiente, y de este modo se sacaba rápidamente y sin trabajo cuanto se quisiera. One gave it to the one next to him, the latter gave it to the next, and in this way one could quickly and easily get as much as one wanted. Pasando de mano en mano, subieron de la bodega multitud de sacos, y mi sorpresa fue grande cuando vi que los vaciaban sobre la cubierta, sobre el alcázar y castillos, extendiendo la arena hasta cubrir toda la superficie de los tablones. Passing from hand to hand, a multitude of sacks came up from the hold, and my surprise was great when I saw them being emptied on the deck, on the fortress and castles, spreading the sand until it covered the entire surface of the planks. Lo mismo hicieron en los entrepuentes. The same thing was done at the inter-bridge. Por satisfacer mi curiosidad, pregunté al grumete que tenía al lado. To satisfy my curiosity, I asked the cabin boy next to me.

«Es para la sangre—me contestó con indiferencia. "It's for the blood-he answered me indifferently.

—¡Para la sangre!» repetí yo sin poder reprimir un estremecimiento de terror. -Stop the blood!" I repeated, unable to suppress a shudder of terror.

Miré la arena; miré a los marineros, que con gran algazara se ocupaban en aquella faena, y por un instante me sentí cobarde. I looked at the sand; I looked at the sailors, who were busily engaged in that task, and for an instant I felt cowardly. Sin embargo, la imaginación, que entonces predominaba en mí, alejó de mi espíritu todo temor, y no pensé más que en triunfos y agradables sorpresas. However, the imagination, which then predominated in me, drove away from my spirit all fear, and I thought only of triumphs and pleasant surprises.

El servicio de los cañones estaba listo, y advertí también que las municiones pasaban de los pañoles al entrepuente por medio de una cadena humana semejante a la que había sacado la arena del fondo del buque. The service of the guns was ready, and I also noticed that the ammunition was passing from the lockers to the between-deck by means of a human chain similar to the one that had taken the sand out of the bottom of the ship. Los ingleses avanzaban para atacarnos en dos grupos. Uno se dirigía hacia nosotros, y traía en su cabeza, o en el vértice de la cuña, un gran navío con insignia de almirante. One was heading towards us, and had on his head, or at the apex of the wedge, a large ship with an admiral's insignia. L'un se dirigeait vers nous, et avait sur sa tête, ou au sommet du coin, un grand navire avec l'insigne d'un amiral. Después supe que era el Victory y que lo mandaba Nelson. I later learned that it was the Victory and that it was sent by Nelson. El otro traía a su frente el  Royal Sovereign , mandado por Collingwood. The other brought to her front the Royal Sovereign , commanded by Collingwood.

Todos estos hombres, así como las particularidades estratégicas del combate, han sido estudiados por mí más tarde. All these men, as well as the strategic particularities of combat, have been studied by me later.

Mis recuerdos, que son clarísimos en todo lo pintoresco y material, apenas me sirven en lo relativo a operaciones que entonces no comprendía. My memories, which are very clear in everything picturesque and material, are of little use to me with regard to operations that I did not understand at the time. Lo que oí con frecuencia de boca de Marcial, unido a lo que después he sabido, pudo darme a conocer la formación de nuestra escuadra; y para que ustedes lo comprendan bien, les pongo aquí una lista de nuestros navíos, indicando los desviados, que dejaban un claro, la nacionalidad y la forma en que fuimos atacados. What I often heard from Martial's mouth, together with what I later learned, was able to show me the formation of our squadron; and so that you may understand it well, I give you here a list of our ships, indicating the deviated ones, which left a clear, the nationality and the manner in which we were attacked. Poco más o menos, era así:

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Eran las doce menos cuarto. It was a quarter to twelve. El terrible instante se aproximaba. The terrible moment was approaching. La ansiedad era general, y no digo esto juzgando por lo que pasaba en mi espíritu, pues atento a los movimientos del navío en que se decía estaba Nelson, no pude por un buen rato darme cuenta de lo que pasaba a mi alrededor. Anxiety was general, and I do not say this judging by what was going on in my spirit, for attentive to the movements of the vessel on which Nelson was said to be, I could not for a good while realize what was going on around me.

De repente nuestro comandante dio una orden terrible. Suddenly our commander gave a terrible order. La repitieron los contramaestres. It was repeated by the petty officers. Los marineros corrieron hacia los cabos, chillaron los motones, trapearon las gavias. Les matelots couraient vers les promontoires, les monticules criaient, essuyaient les huniers.

«¡En facha, en facha!—exclamó Marcial, lanzando con energía un juramento—. "En facha, en facha!" exclaimed Martial, energetically swearing an oath. "Regarde, regarde!" s'exclama Marcial en jurant avec énergie. Ese condenado se nos quiere meter por la popa». That damned man is trying to get in through our stern". Ce condamné veut nous mettre à l'épreuve ».

Al punto comprendí que se había mandado detener la marcha del  Trinidad para estrecharle contra el  Bucentauro , que venía detrás, porque el  Victory parecía venir dispuesto a cortar la línea por entre los dos navíos. At once I understood that the Trinidad had been ordered to halt her march in order to close in against the Bucentauro, which was coming behind, because the Victory seemed ready to cut the line between the two ships. Aussitôt je compris que la marche du Trinidad avait reçu l'ordre de s'arrêter pour la serrer contre le Bucentauro, qui arrivait en arrière, parce que le Victory semblait prêt à couper la ligne entre les deux navires.

Al ver la maniobra de nuestro buque, pude observar que gran parte de la tripulación no tenía toda aquella desenvoltura propia de los marineros, familiarizados como Marcial con la guerra y con la tempestad. As I watched the maneuvering of our ship, I could see that a large part of the crew did not have all the poise of sailors, familiar as Martial was with war and the storm. Entre los soldados vi algunos que sentían el malestar del mareo, y se agarraban a los obenques para no caer. Among the soldiers I saw some who felt the discomfort of seasickness, and clung to the shrouds to keep from falling. Parmi les soldats j'en ai vu qui ressentaient le malaise du vertige, et ils s'accrochaient aux haubans pour ne pas tomber. Verdad es que había gente muy decidida, especialmente en la clase de voluntarios; pero por lo común todos eran de leva, obedecían las órdenes como de mala gana, y estoy seguro de que no tenían ni el más leve sentimiento de patriotismo. True, there were some very determined people, especially in the volunteer class; but as a rule they were all levies, obeyed orders as if reluctantly, and I am sure they had not the slightest feeling of patriotism. No les hizo dignos del combate más que el combate mismo, como advertí después. It did not make them worthy of combat any more than the combat itself, as I warned later. Cela ne les rendait pas plus dignes du combat que le combat lui-même, comme je l'ai noté plus tard. A pesar del distinto temple moral de aquellos hombres, creo que en los solemnes momentos que precedieron al primer cañonazo, la idea de Dios estaba en todas las cabezas. In spite of the different moral mettle of those men, I believe that in the solemn moments preceding the first cannon shot, the idea of God was in all heads. Malgré le tempérament moral différent de ces hommes, je crois que dans les moments solennels qui ont précédé le premier coup de canon, l'idée de Dieu était dans toutes les têtes.

Por lo que a mí toca, en toda la vida ha experimentado mi alma sensaciones iguales a las de aquel momento. As far as I am concerned, my soul has never experienced sensations like those of that moment in my whole life. Quant à moi, dans toute ma vie mon âme a éprouvé des sensations égales à celles de ce moment. A pesar de mis pocos años, me hallaba en disposición de comprender la gravedad del suceso, y por primera vez, después que existía, altas concepciones, elevadas imágenes y generosos pensamientos ocuparon mi mente. In spite of my young age, I was in a position to understand the gravity of the event, and for the first time since I existed, lofty conceptions, lofty images and generous thoughts occupied my mind. La persuasión de la victoria estaba tan arraigada en mi ánimo, que me inspiraban cierta lástima los ingleses, y les admiraba al verles buscar con tanto afán una muerte segura. The persuasion of victory was so deeply rooted in my mind that I felt a certain pity for the English, and admired them when I saw them so eagerly seeking certain death.

Por primera vez entonces percibí con completa claridad la idea de la patria, y mi corazón respondió a ella con espontáneos sentimientos, nuevos hasta aquel momento en mi alma. For the first time then I perceived with complete clarity the idea of the homeland, and my heart responded to it with spontaneous feelings, new until that moment in my soul. Hasta entonces la patria se me representaba en las personas que gobernaban la nación, tales como el Rey y su célebre Ministro, a quienes no consideraba con igual respeto. Until then the fatherland was represented to me in the people who governed the nation, such as the King and his celebrated Minister, whom I did not regard with equal respect. Como yo no sabía más historia que la que aprendí en la Caleta, para mí era de ley que debía uno entusiasmarse al oír que los españoles habían matado muchos moros primero, y gran pacotilla de ingleses y franceses después. Since I knew no history other than what I learned in the Caleta, it was a matter of law for me that one should be excited to hear that the Spanish had killed many Moors first, and a great deal of English and French later. Comme je ne connaissais pas plus d'histoire que celle que j'ai apprise à La Caleta, c'était pour moi une loi qu'il fallait se réjouir d'apprendre que les Espagnols avaient tué beaucoup de Maures d'abord, puis une grande bande d'Anglais et de Français. Me representaba, pues, a mi país como muy valiente; pero el valor que yo concebía era tan parecido a la barbarie como un huevo a otro huevo. I represented myself, then, to my country as very brave; but the courage I conceived of was as like barbarism as one egg to another egg. Con tales pensamientos, el patriotismo no era para mí más que el orgullo de pertenecer a aquella casta de matadores de moros. With such thoughts, patriotism was for me nothing more than the pride of belonging to that caste of Moorish slaughterers.

Pero en el momento que precedió al combate, comprendí todo lo que aquella divina palabra significaba, y la idea de nacionalidad se abrió paso en mi espíritu, iluminándolo y descubriendo infinitas maravillas, como el sol que disipa la noche, y saca de la obscuridad un hermoso paisaje. But in the moment that preceded the combat, I understood all that that divine word meant, and the idea of nationality made its way into my spirit, illuminating it and discovering infinite marvels, like the sun that dissipates the night, and brings out of the darkness a beautiful landscape. Pero en el momento que precedió al combate, comprendí todo lo que aquella divina palabra significaba, y la idea de nacionalidad se abrió paso en mi espíritu, iluminándolo y descubriendo infinitas maravillas, como el sol que disipa la noche, y saca de la obscuridad un beau paysage. Me representé a mi país como una inmensa tierra poblada de gentes, todos fraternalmente unidos; me representé la sociedad dividida en familias, en las cuales había esposas que mantener, hijos que educar, hacienda que conservar, honra que defender; me hice cargo de un pacto establecido entre tantos seres para ayudarse y sostenerse contra un ataque de fuera, y comprendí que por todos habían sido hechos aquellos barcos para defender la patria, es decir, el terreno en que ponían sus plantas, el surco regado con su sudor, la casa donde vivían sus ancianos padres, el huerto donde jugaban sus hijos, la colonia descubierta y conquistada por sus ascendientes, el puerto donde amarraban su embarcación fatigada del largo viaje; el almacén donde depositaban sus riquezas; la iglesia, sarcófago de sus mayores, habitáculo de sus santos y arca de sus creencias; la plaza, recinto de sus alegres pasatiempos; el hogar doméstico, cuyos antiguos muebles, transmitidos de generación en generación, parecen el símbolo de la perpetuidad de las naciones; la cocina, en cuyas paredes ahumadas parece que no se extingue nunca el eco de los cuentos con que las abuelas amansan la travesura e inquietud de los nietos; la calle, donde se ven desfilar caras amigas; el campo, el mar, el cielo; todo cuanto desde el nacer se asocia a nuestra existencia, desde el pesebre de un animal querido hasta el trono de reyes patriarcales; todos los objetos en que vive prolongándose nuestra alma, como si el propio cuerpo no le bastara. I represented my country as an immense land populated by people, all fraternally united; I represented the society divided into families, in which there were wives to support, children to educate, property to preserve, honor to defend; I took charge of a pact established among so many beings to help and support each other against an attack from outside, and I understood that those ships had been made by all to defend the homeland, that is, the land where they put their plants, the furrow watered with their sweat, the house where their old parents lived, the orchard where their children played, the colony discovered and conquered by their ancestors, the port where they moored their ship tired from the long voyage; the warehouse where they deposited their riches; the church, sarcophagus of their elders, dwelling place of their saints and ark of their beliefs; the square, precinct of their joyful pastimes; the domestic home, whose antique furniture, handed down from generation to generation, seems the symbol of the perpetuity of nations; the kitchen, in whose smoky walls it seems that the echo of the stories with which the grandmothers tame the mischief and restlessness of the grandchildren is never extinguished; the street, where we see friendly faces parade; the countryside, the sea, the sky; everything that from birth is associated with our existence, from the manger of a beloved animal to the throne of patriarchal kings; all the objects in which our soul lives prolonging itself, as if our own body were not enough for it. J'ai représenté mon pays comme une immense terre peuplée de gens, tous fraternellement unis ; Je représentais la société divisée en familles, où il y avait des femmes à nourrir, des enfants à éduquer, des biens à garder, un honneur à défendre ; J'ai pris en charge un pacte établi entre tant d'êtres pour s'aider et se soutenir contre une attaque du dehors, et j'ai compris que par tous ces navires avaient été faits pour défendre la patrie, c'est-à-dire la terre sur laquelle ils posaient leurs plantes le sillon arrosé de leur sueur, la maison où vivaient leurs parents âgés, le verger où jouaient leurs enfants, la colonie découverte et conquise par leurs ancêtres, le port où ils amarraient leur bateau fatigué du long voyage ; l'entrepôt où ils déposaient leurs richesses ; l'église, sarcophage de leurs aînés, demeure de leurs saints et arche de leurs croyances ; la place, lieu de ses joyeux passe-temps ; la maison domestique, dont les meubles anciens, transmis de génération en génération, semblent le symbole de la perpétuité des nations ; la cuisine, dont les murs enfumés semblent ne jamais s'éteindre l'écho des histoires avec lesquelles les grands-mères apprivoisent la malice et l'agitation des petits-enfants ; la rue, où l'on voit défiler des visages amicaux ; le champ, la mer, le ciel ; tout, depuis la naissance, est associé à notre existence, de la crèche d'un animal bien-aimé au trône des rois patriarcaux ; tous les objets dans lesquels vit notre âme, comme si notre propre corps ne lui suffisait pas.

Yo creía también que las cuestiones que España tenía con Francia o con Inglaterra eran siempre porque alguna de estas naciones quería quitarnos algo, en lo cual no iba del todo descaminado. I also believed that the issues Spain had with France or England were always because one of these nations wanted to take something from us, and I was not entirely wrong. Je croyais aussi que les problèmes que l'Espagne avait avec la France ou avec l'Angleterre étaient toujours parce que l'une de ces nations voulait nous prendre quelque chose, ce qui n'avait pas tout à fait tort. Parecíame, por tanto, tan legítima la defensa como brutal la agresión; y como había oído decir que la justicia triunfaba siempre, no dudaba de la victoria. It seemed to me, therefore, that the defense was as legitimate as the aggression was brutal; and as I had heard it said that justice always triumphed, I did not doubt the victory. Mirando nuestras banderas rojas y amarillas, los colores combinados que mejor representan al fuego, sentí que mi pecho se ensanchaba; no pude contener algunas lágrimas de entusiasmo; me acordé de Cádiz, de Vejer; me acordé de todos los españoles, a quienes consideraba asomados a una gran azotea, contemplándonos con ansiedad; y todas estas ideas y sensaciones llevaron finalmente mi espíritu hasta Dios, a quien dirigí una oración que no era Padre-nuestro ni Ave-María, sino algo nuevo que a mí se me ocurrió entonces. Looking at our red and yellow flags, the combined colors that best represent fire, I felt my chest widen; I could not contain some tears of enthusiasm; I remembered Cadiz, Vejer; I remembered all the Spaniards, whom I considered looking out over a great rooftop, contemplating us with anxiety; and all these ideas and sensations finally led my spirit to God, to whom I addressed a prayer that was neither Our Father nor Hail-Mary, but something new that occurred to me then. Un repentino estruendo me sacó de mi arrobamiento, haciéndome estremecer con violentísima sacudida. A sudden roar brought me out of my rapture, making me shudder with a violent jolt. Un rugissement soudain me sortit de mon ravissement, me faisant frissonner d'une violente secousse. Había sonado el primer cañonazo. The first cannon shot had sounded.