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Caras Del Amore, Encontrando a Verónica (1)

Encontrando a Verónica (1)

Cómo definirías el amor

Un conjunto de muchas cosas pero sobre todo que tiene que ver con la empatía, el respeto, el entendimiento. Comunicación, no ser egoísta y no tener tampoco barreras. Ser una común unidad.

Hay pocas emociones que se valoran tanto como el amor.

Sin embargo a veces nos olvidamos de todo el dolor que el amor puede causar y pensamos sólo en el aspecto romántico pero si reflexionamos el amor es mucho más complejo y no es siempre romántico. Por ejemplo el amor entre hijos y padres o amigos. De todas formas lo cierto es que cuando el amor genera experiencias positivas sana el alma y nos hace feliz.

Bienvenidos a Caras del Amor, historias íntimas de convivencia descubrimientos personales y experiencias que transforman vidas. Mi nombre es Maria De Los Santos.

En el capítulo de hoy exploramos: Encontrando a Verónica.

Yo creo que mi familia en general ha influido mucho en lo que yo de alguna manera creo en lo que soy.

Esta es Verónica. Pocas cosas en su vida han sido tan importantes como su familia. Nací en una familia que si bien no teníamos muchos recursos lo que teníamos lo compartíamos todo y si veíamos que alguien más necesitaba ayuda yo veía a mi tíos, a mi abuelita, a mi mamá. Siempre estaban ayudando.

De ellos Verónica aprendió a querer, a dar y a ser feliz con lo que había.

Yo viví cuando era pequeñita en un departamento chiquitito. Estábamos éramos 15 personas, entonces era como el modelo que vivíamos en Chile.

Yo vivía con mis primos, mis tíos, mi mamá, mi abuelita y los veía tan alegre tan no sé cómo explicarlo pero la recompensa aunque no era nada material, la alegría de compartir con la gente que de pronto necesita un cierto tipo de ayuda aunque sea un abrazo a veces y eso yo lo vea en mi familia en general, sobre todo también mi mamá mi mamá es una persona con un corazón gigante, gigante.

Por eso Verónica pensó que podía compartir con su madre un secreto íntimo.

Y a mi mamá se lo conté cuando estuve pasando por una crisis de identidad que gente como nosotras la tenemos porque en realidad no eres en ese entonces tú sientes que no eres normal. Y claro a mí me había gustado una chica que no me hacía caso pero yo tampoco me iba a atrever a ir más allá. No sé qué no sé cuánto. Y estaba súper triste que se yo y un día me pregunta qué me pasa y me dije ‘sabes que le voy a contar', ya me desahogo y ya está. Al principio mi mamá no se lo tomó muy bien.

Fui la primera vez que un ser querido la despreció.

Entonces eso fue lo que a mí en vez de abrirme me cerré. Pero con todo el mundo, incluso con mis mejores amigos.

Al principio Verónica no entendía como una persona con la benevolencia de su madre podría reaccionar de esa manera.

Yo me crie en una familia con mis tíos, mi abuela, madre soltera y no significó nada malo. No son homosexuales pero tampoco era dentro del entrecomillas de lo normal.

Entonces qué es lo normal. Por qué somos anormales nosotros sólo por el hecho de que nos guste algo distinto. No significa que yo voy a actuar de una manera mala, no significa que soy una persona diabólica o qué sé yo; o que le quiere hacer mal a la gente por sólo hacer algo contrario. No lo que yo hago parte de la base más importante para mí que es el amor.

A la larga su madre cambió de parecer pero Verónica ya no confiaba en nadie más.

Yo pensaba que iba a destruir a mi familia. Si yo les decía ‘mira tengo una pareja mujer', los iba a destruir porque yo en ese entonces era la regalona de la familia, o sea laberinto aquí laberinto allá, todo el mundo de alguna manera era como la que igual trataba de unir a todo el mundo. Y me querían un montón y estaban súper orgulloso de mí porque también fue una de las primeras personas que fue a la universidad de mi familia. Entonces para mí era así les cuento mi tendencia sexual, mi justo amoroso, esto los voy a desilusionar a todos porque pensaba que me iba a pasar lo mismo que me pasó con mi mamá cuando se lo conté.

Que si bien me quieren, me aman, me adoran cuando les cuente esto los voy a destruir.

Pero como su familia estaba ajena su situación no la dejaban en paz.

‘Cuando te vamos a conocer un pololo' y ‘cuando te vamos a conocer un pololo'. Pololo es novio.

¿Y cuál era tu respuesta cuando te hacían esas preguntas?

No, no tengo, ya está. De ahí yo contestaba un poquito tajante, es que no me gusta nadie.

No tenían malas intenciones pero igual a Verónica las preguntas le molestaban porque veía algo más profundo.

Pero claro es una reacción lógica sobre todo viviendo en un país en el que vivimos que como Chile, es súper conservador, súper católico y eso es lo triste de la gente que tú les puedes mentir y contarle una historia y ellos prefieren crear esa historia como pasa ahora en Chile que hay mucha gente que piensa que te gusta alguien de tu mismo sexo es una enfermedad y se puede curar. Anda a la iglesia y te lo curan.

‘Tal vez más de alguien se sorprenda porque en estos tiempos las lesbianas no se atrevan a reconocer su condición pero salimos a la calle y aunque son una minoría nos encontramos con opiniones que parecen del siglo pasado.

¿Qué es lo normal? ¿Porque somos anormales nosotros sólo por el hecho de que nos guste algo distinto?

Yo creo que el hombre o la mujer están enfermos, tienen una enfermedad, el alma al espíritu. Ellos creen estar bien pero no están bien.

Ser diferente no significa ser peor. Pero lamentablemente en este caso en particular ser diferente significa ser peor no diferente en realidad.

Desilusionada con la vida Verónica se consoló con sus sueños. Vivía en Chile físicamente pero su mente paseaba por el mundo imaginándose cómo sería su vida si viviese en un lugar donde pudiese ser ella misma.

Hasta que un día, por esas casualidades de la vida, iba caminando por la calle cuando se encuentra con un compañero de la universidad.

Le pregunto ‘o tanto tiempo' súper feliz porque éramos súper amigos cuando estudiábamos pero no nos veíamos hace mucho tiempo y me dice ‘no vengo de vuelta de España porque vengo de vacaciones ya que estoy trabajando ahí'. Pero él me dijo ‘ya nos necesitan allí entonces esto va a ser un cambio total y están buscando a más gente'. ¿Te interesaría ir allí? Por qué no lo voy a intentar! Y me dijo ‘envía tu currículum a esta persona y ve que te dice'. Y me dijeron que sí, postulé, un año después tenía la visa.

Y en vez de saltar de alegría, comienza a dudar.

En el último momento dije ‘no me voy a quedar aquí' porque es como cuando te lo recontra piensas bien y nuestra cultura, eso de la familia, que voy a hacer son sí familia, podré vivir sin mi familia. Pero para mí era mucho más allá que la familia porque también tenía que ver conmigo. Porque si bien era entre comillas ‘yo' yo era a medias, no iba a estar nunca completa si no desenvolvía mi parte amorosa. Estaba totalmente relacionado con mis gustos hacia las mujeres.

Entonces se despidió de su familia y partió a España.

En Madrid Verónica descubre un mundo totalmente diferente.

A mí lo que me ha sorprendido por ejemplo, ahí se hace una de las fiestas más grandes gays del mundo en Madrid y un día yo estaba trabajando que tampoco se lo había dicho a nadie y empiezo a escuchar que todos mis compañeros que estaban en mi misma sala estaban haciendo planes para ir a la fiesta y a mí no me cuadraba y yo me decía ‘pero si ellos no son gays' o sea yo sé que tienen familia. Es que ninguno de ellos es gay porque van a ir a la fiesta. Y me preguntan a mí ¿Verónica vas a ir? y yo me sentí así como un poco distraída, si dije. Nosotros también vamos a ir, si quieren nos juntamos, nos tomamos una cerveza y unas cañas que dicen ahí vamos a juntarnos en este barrio y yo ‘¿ahhhhh y ustedes por curiosidad siempre van?' y me decían ‘claro que sí Vero, lo tenemos que apoyar, apoyar la causa además todos tenemos que tener los mismos derechos blablabla y si la gente no apoya estas movilizaciones quien lo va a hacer'. Y yo me dije ‘Mira, mira tú que interesante.

Se siente tan libre tan rápido que comienza a prepararse en caso de que conozca a la mujer de sus sueños.

Y lo más gracioso era que desde que llegué me había comprado una cama de dos plazas y yo dije ‘sí porque qué voy a tener pololo, voy a tener pareja así que ya la segura cama de dos plazas, un colchón pero bueno no sé qué no sé cuánto'. Pero los meses pasaban. Y su cama doble seguía vacía.

Ya llegó un momento en mi vida que dije ‘bah ya no quiero esta cama que me ocupa la mitad de la habitación' porque en Madrid igual tienes que convivir porque si no sales súper caro entonces claro la habitaciones tampoco son muy grandes entonces para aprovechar el espacio dije ‘voy a cambiar la cama, cama de una plaza superbién no sé qué no sé cuánto'. Y como siempre la vida tiene mil formas de dar vuelta a las cosas y cuando menos lo esperaba. Conoce a una nueva compañera de trabajo.

Fue justo después de que cambie la cama grande por la cama chica. Trabajamos en la misma empresa pero en un proyecto distinto y en día cuando recién llegó hablando de la vida me contó que ella jugaba fútbol y yo le dije ‘ah bueno yo también cuando vivía en Chile jugaba' ‘¿Necesitan a alguien en tu equipo?'. Me dijo ‘mira no por el momento pero sí yo sé que llegan a necesitar a alguien te voy a avisar.' Después pasó un tiempo y un día me escribe y me dice ‘Vero, recuerdas que un día me dijiste que si quedaba un puesto en el equipo estarías dispuesta a jugar' y yo ‘si, si' y me dice ‘ya ahora'. Ese día jugaron y perdieron 27 a cero.

Me encantó cuando terminamos el partido porque [decían] ‘bien chicos lo hicimos súper bien' no sé qué. El próximo martes tenemos de nuevo aquí las vemos podemos contar con ustedes' y como yo vi que no había ningún tipo de frustración ni echándonos la culpa a las nuevas porque habíamos perdido yo dije ‘claro que sí, este es el espíritu que me gusta'. Y ahora el tercer tiempo a tomarnos unas cañitas y a comer algo. Y me lo pasé súper bien.

Entre tragos y bocadillos Verónica se entera que una compañera que juega en el equipo de la empresa es abiertamente lesbiana. Automáticamente para las orejas y toma nota. Una semana más tarde Verónica vuelve a la cancha para otro amistoso y allí la conoce.

Me llamo Dolores. Vengo de España y me encanta la música.

Cuando terminó el partido se fueron a tomar unas cervezas y luego comenzaron a hablar de música.

Le gustan los grupos chilenos y yo [decía] ‘ah mira a mí también'. Y bueno ahí empezamos a charlar.

De pronto ya me di cuenta de que todos los días estábamos escribiendo mails. Ya teníamos un chat interno del trabajo y [nos escribíamos] ‘¿ah hola cómo estás?'. Compartíamos temas musicales. ‘Oye mira la otra semana viene Denver…'ah si voy a ir ¿y tú? ‘Si, yo también voy a ir'. Y al principio ahí como que se empezó a formar como esta cercanía de, empezaba el día y era como ‘quiero decirle hola a Dolores' y hablar con ella. Con el transcurso del tiempo la amistad crece y a la larga Verónica comienza a ver a Dolores con otros ojos.

Yo dije ‘oh parece que esta es la persona que he estado esperando toda mi vida'. Y era como súper suavecita al hablar, súper simpática y yo dije ya, estoy enamorada.

Pero todavía Verónica tenía mil trabas. Se sentía tan insegura que va a hablar con un amigo que tiene un bar gay en Madrid y le dice

No sé qué hacer. Me gusta pero me da vergüenza y me dice ‘pero no le has dicho nada' y yo ‘no' me dijo ‘pero dile de una vez por todas, cuánto tiempo llevan hablando' ‘Ya como tres meses' y me dijo ‘ya en mucho tiempo y ella te habla, ¿qué sientes tú?' y yo ‘igual, a lo mejor es que no se, te juro que no se' y me dijo ‘pues mira' ‘po tipo' porque en ese tiempo tenía el pelo corto y como chilena siempre digo po me decía ‘ mira po tipo, tu llegas no sé cómo, declárate cuando puedas. Lo peor que puede pasar es que no se van a hablar nunca más va a pasar un tiempecito y van a tener que volver a hablar porque están jugando en el mismo equipo y no creo que se lo tome mal.' Yo dije, ya bueno lo voy a hacer. Y me costó, me costó hasta que ya un día le dije que me gustaba y fuese así como [respiración profunda], cri cri.

Así y todo para Dolores lo que pasó fue…

Maravilloso. Quedamos en un parque donde ella solía vivir que además ya no conocía. Estuvimos allí la primera vez que quedamos después de hablar de lo que sentíamos estuvimos ahí un ratito por la tarde me acuerdo que era un poco de frío y luego pues nada nos fuimos cada una a nuestra casa y yo la verdad no quería que se fuera. O sea me acuerdo que tenía el olor de su mano en la mía y es que no me quería lavar las manos.

Porque todo fue tan bien como súper paulatino y eso también me gustó aunque existiera este el tema de cuando tú estás con el amor a full, apasionado qué sé yo, también mantener el espacio porque era mi primera vez en donde estaba formando una relación. No sabía cómo hacerlo. Me sentía así, cero experiencia. Pero fue para mí fantástico, se me salía el corazón por la boca.

¿Y qué hiciste fuiste a comprar una cama doble?

Eh si, la tuvimos que comprar después. Así que sí, así fue de vuelta a la cábala. Pero fue tan chistoso que totalmente no me lo creía.

Totalmente enamorada Verónica recupera las fuerzas para volver a mirarse al espejo, sin vergüenza o temor.

Abiertamente hoy a mí me gustan las mujeres fue hasta que conocí a Dolores. Nadie sabía que a mí me gustaba, que yo era lesbiana y me gustaba las chicas.

Tenía mi tranca que venía desde que vivía en Chile y ya yo no estaba segura, ya me había dado por vencida y era como para que lo voy a contar. Pero también no lo encontraba justo hasta que llegó Dolores dije ‘ya‘.

Pero la historia no termina aquí. A Verónica todavía le falta decírselo a su familia pero tenía miedo.

Ya la gente mayor, entre comillas no es que me diera lo mismo pero si le gustaba bien, si no le gustaba bien también. En ese sentido me iba a dar un poquito lo mismo. Pero si lo que me preocupa porque yo tengo una muy buena relación con mi sobrino, que entrecomillas no son mis sobrinos directos pero son los más pequeños de la familia y me llevo muy bien con ellos. Y ahí tenía mucho mucho miedo de la reacción que iban a tener ellos.

Lo pensó bastante y finalmente decide ir de visita a Chile con Dolores para enfrentar a su familia y compartir el secreto que les había ocultado durante décadas. Lo que ocurre la toma por sorpresa.

Llegue con Dolores y me decían ‘ah quienes tu amiga' ‘no si no es mi amiga, ella es mi pareja' y se me quedaban mirando y se ríen. Y yo decía ‘pues no es mi polola'. Y me dicen ‘ah pues hola Dolo'. Y cuando llegué a casa me preguntaban ‘donde está la Dolo, donde está la Dolo' y yo ‘oye no quieres jugar conmigo, un abrazo un beso. Ah sí, dónde está la Dolo. La adoraban, me encantó.

Mientras Verónica se regocija de alegría por el amor y afecto de su familia Dolores reflexiona sobre su suerte de haber encontrado a Verónica.

Ella es muy risueña, es súper alegre, bueno es inteligente, es muy positiva, es muy divertida también es muy buena persona y además es bastante sensata. Eso a mí me encanta. Y esa mezcla final con la persona y sus distintos matices son los que te llegan también.

Creo que me ha mejorado porque, a ver hombre, si estás con la persona que tú quieres, pues obviamente ves el mundo mucho mejor y si tú ves a un mundo mejor pues creo que ayuda también a que tu hagas las cosas mejor y todo va mejor porque entiende que hay gente que nunca pasa por un proceso de enamoramiento, desafortunadamente. Pero si todo el mundo tuviera la oportunidad de experimentar esto se daría cuenta de que las cosas pueden ir mejor de lo que a veces parece. Que sí hay percances hay percances. Eso no lo quita nadie. Acompañando pues tú puedes enfrentarte a cosas con más ánimo con más fuerza que si estuvieras sola. Pero sí que es verdad que falta amor en el mundo. Hay gente a la que no tiene pareja y que espera tener pareja y creo que eso puede ser una especie de algo que está dentro que te va carcomiendo un poquito y que esas personas no tengan la opción o no tengan la suerte de encontrar a alguien afín. Eso es triste.

Y a veces me da un poco de miedo, sí porque es como estoy en un momento en que no me lo creo. Y tengo un poquito de miedo de que como cuando van las cosas muy bien es como algo que esto no va a durar para siempre pero obvio que nada dura para siempre, que circular pero lo estoy disfrutando mucho. Porque al principio no fue para nada fácil. Para nada. Recién es como que me estoy sintiendo bien.

El amor se busca pero también te encuentra. Para encontrar el amor Verónica se dio cuenta que primero tenía que ir a buscarse ella misma. O si no el amor nunca la encontraría. Al darse permiso para amar su vida es más amplia. En este momento está viviendo en Melbourne después que a Dolores le ofrecieron un contrato de trabajo. Es más, hace poco consiguieron la residencia australiana justo después que Verónica encontró un trabajo que adora. Ahora cuando mira por la ventana de su departamento en Melbourne sonríe de alegría. Finalmente encontró su media naranja para compartir la vida un hogar y su cama doble.

Esta historia fue producida con el apoyo de radio SBS. Fue escrita y editada por Marcia De Los Santos. La mezcla de sonido es de Cara Beltrame. Para escuchar más historias en español visita nuestra página de internet sbs.com.au/spanish. Si te perdiste los capítulos anteriores de Caras del Amor puedes escucharlos a través de la aplicación SBS Radio app o a través de Itunes o mediante tu aplicación favorita para escuchar podcasts. Soy Marcia Se Los Santos, gracias por escuchar.


Encontrando a Verónica (1)

Cómo definirías el amor

Un conjunto de muchas cosas pero sobre todo que tiene que ver con la empatía, el respeto, el entendimiento. A set of many things but above all that has to do with empathy, respect, understanding. Comunicación, no ser egoísta y no tener tampoco barreras. Communication, not being selfish and not having barriers either. Ser una común unidad. Be a common unit.

Hay pocas emociones que se valoran tanto como el amor. There are few emotions that are valued as much as love.

Sin embargo a veces nos olvidamos de todo el dolor que el amor puede causar y pensamos sólo en el aspecto romántico pero si reflexionamos el amor es mucho más complejo y no es siempre romántico. However, sometimes we forget all the pain that love can cause and we think only about the romantic aspect, but if we reflect, love is much more complex and it is not always romantic. Por ejemplo el amor entre hijos y padres o amigos. De todas formas lo cierto es que cuando el amor genera experiencias positivas sana el alma y nos hace feliz.

Bienvenidos a Caras del Amor, historias íntimas de convivencia descubrimientos personales y experiencias que transforman vidas. Mi nombre es Maria De Los Santos.

En el capítulo de hoy exploramos: Encontrando a Verónica.

Yo creo que mi familia en general ha influido mucho en lo que yo de alguna manera creo en lo que soy.

Esta es Verónica. Pocas cosas en su vida han sido tan importantes como su familia. Nací en una familia que si bien no teníamos muchos recursos lo que teníamos lo compartíamos todo y si veíamos que alguien más necesitaba ayuda yo veía a mi tíos, a mi abuelita, a mi mamá. Siempre estaban ayudando.

De ellos Verónica aprendió a querer, a dar y a ser feliz con lo que había.

Yo viví cuando era pequeñita en un departamento chiquitito. Estábamos éramos 15 personas, entonces era como el modelo que vivíamos en Chile.

Yo vivía con mis primos, mis tíos, mi mamá, mi abuelita y los veía tan alegre tan no sé cómo explicarlo pero la recompensa aunque no era nada material, la alegría de compartir con la gente que de pronto necesita un cierto tipo de ayuda aunque sea un abrazo a veces y eso yo lo vea en mi familia en general, sobre todo también mi mamá mi mamá es una persona con un corazón gigante, gigante.

Por eso Verónica pensó que podía compartir con su madre un secreto íntimo.

Y a mi mamá se lo conté cuando estuve pasando por una crisis de identidad que gente como nosotras la tenemos porque en realidad no eres en ese entonces tú sientes que no eres normal. Y claro a mí me había gustado una chica que no me hacía caso pero yo tampoco me iba a atrever a ir más allá. No sé qué no sé cuánto. Y estaba súper triste que se yo y un día me pregunta qué me pasa y me dije ‘sabes que le voy a contar', ya me desahogo y ya está. Al principio mi mamá no se lo tomó muy bien.

Fui la primera vez que un ser querido la despreció.

Entonces eso fue lo que a mí en vez de abrirme me cerré. Pero con todo el mundo, incluso con mis mejores amigos.

Al principio Verónica no entendía como una persona con la benevolencia de su madre podría reaccionar de esa manera.

Yo me crie en una familia con mis tíos, mi abuela, madre soltera y no significó nada malo. No son homosexuales pero tampoco era dentro del entrecomillas de lo normal.

Entonces qué es lo normal. Por qué somos anormales nosotros sólo por el hecho de que nos guste algo distinto. No significa que yo voy a actuar de una manera mala, no significa que soy una persona diabólica o qué sé yo; o que le quiere hacer mal a la gente por sólo hacer algo contrario. No lo que yo hago parte de la base más importante para mí que es el amor.

A la larga su madre cambió de parecer pero Verónica ya no confiaba en nadie más.

Yo pensaba que iba a destruir a mi familia. Si yo les decía ‘mira tengo una pareja mujer', los iba a destruir porque yo en ese entonces era la regalona de la familia, o sea laberinto aquí laberinto allá, todo el mundo de alguna manera era como la que igual trataba de unir a todo el mundo. Y me querían un montón y estaban súper orgulloso de mí porque también fue una de las primeras personas que fue a la universidad de mi familia. Entonces para mí era así les cuento mi tendencia sexual, mi justo amoroso, esto los voy a desilusionar a todos porque pensaba que me iba a pasar lo mismo que me pasó con mi mamá cuando se lo conté.

Que si bien me quieren, me aman, me adoran cuando les cuente esto los voy a destruir.

Pero como su familia estaba ajena su situación no la dejaban en paz.

‘Cuando te vamos a conocer un pololo' y ‘cuando te vamos a conocer un pololo'. Pololo es novio.

¿Y cuál era tu respuesta cuando te hacían esas preguntas?

No, no tengo, ya está. De ahí yo contestaba un poquito tajante, es que no me gusta nadie.

No tenían malas intenciones pero igual a Verónica las preguntas le molestaban porque veía algo más profundo.

Pero claro es una reacción lógica sobre todo viviendo en un país en el que vivimos que como Chile, es súper conservador, súper católico y eso es lo triste de la gente que tú les puedes mentir y contarle una historia y ellos prefieren crear esa historia como pasa ahora en Chile que hay mucha gente que piensa que te gusta alguien de tu mismo sexo es una enfermedad y se puede curar. Anda a la iglesia y te lo curan.

‘Tal vez más de alguien se sorprenda porque en estos tiempos las lesbianas no se atrevan a reconocer su condición pero salimos a la calle y aunque son una minoría nos encontramos con opiniones que parecen del siglo pasado.

¿Qué es lo normal? ¿Porque somos anormales nosotros sólo por el hecho de que nos guste algo distinto?

Yo creo que el hombre o la mujer están enfermos, tienen una enfermedad, el alma al espíritu. Ellos creen estar bien pero no están bien.

Ser diferente no significa ser peor. Pero lamentablemente en este caso en particular ser diferente significa ser peor no diferente en realidad.

Desilusionada con la vida Verónica se consoló con sus sueños. Vivía en Chile físicamente pero su mente paseaba por el mundo imaginándose cómo sería su vida si viviese en un lugar donde pudiese ser ella misma.

Hasta que un día, por esas casualidades de la vida, iba caminando por la calle cuando se encuentra con un compañero de la universidad.

Le pregunto ‘o tanto tiempo' súper feliz porque éramos súper amigos cuando estudiábamos pero no nos veíamos hace mucho tiempo y me dice ‘no vengo de vuelta de España porque vengo de vacaciones ya que estoy trabajando ahí'. Pero él me dijo ‘ya nos necesitan allí entonces esto va a ser un cambio total y están buscando a más gente'. ¿Te interesaría ir allí? Por qué no lo voy a intentar! Y me dijo ‘envía tu currículum a esta persona y ve que te dice'. Y me dijeron que sí, postulé, un año después tenía la visa.

Y en vez de saltar de alegría, comienza a dudar.

En el último momento dije ‘no me voy a quedar aquí' porque es como cuando te lo recontra piensas bien y nuestra cultura, eso de la familia, que voy a hacer son sí familia, podré vivir sin mi familia. Pero para mí era mucho más allá que la familia porque también tenía que ver conmigo. Porque si bien era entre comillas ‘yo' yo era a medias, no iba a estar nunca completa si no desenvolvía mi parte amorosa. Estaba totalmente relacionado con mis gustos hacia las mujeres.

Entonces se despidió de su familia y partió a España.

En Madrid Verónica descubre un mundo totalmente diferente.

A mí lo que me ha sorprendido por ejemplo, ahí se hace una de las fiestas más grandes gays del mundo en Madrid y un día yo estaba trabajando que tampoco se lo había dicho a nadie y empiezo a escuchar que todos mis compañeros que estaban en mi misma sala estaban haciendo planes para ir a la fiesta y a mí no me cuadraba y yo me decía ‘pero si ellos no son gays' o sea yo sé que tienen familia. Es que ninguno de ellos es gay porque van a ir a la fiesta. Y me preguntan a mí ¿Verónica vas a ir? y yo me sentí así como un poco distraída, si dije. Nosotros también vamos a ir, si quieren nos juntamos, nos tomamos una cerveza y unas cañas que dicen ahí vamos a juntarnos en este barrio y yo ‘¿ahhhhh y ustedes por curiosidad siempre van?' y me decían ‘claro que sí Vero, lo tenemos que apoyar, apoyar la causa además todos tenemos que tener los mismos derechos blablabla y si la gente no apoya estas movilizaciones quien lo va a hacer'. Y yo me dije ‘Mira, mira tú que interesante.

Se siente tan libre tan rápido que comienza a prepararse en caso de que conozca a la mujer de sus sueños.

Y lo más gracioso era que desde que llegué me había comprado una cama de dos plazas y yo dije ‘sí porque qué voy a tener pololo,  voy a tener pareja así que ya la segura cama de dos plazas, un colchón pero bueno no sé qué no sé cuánto'. Pero los meses pasaban. Y su cama doble seguía vacía.

Ya llegó un momento en mi vida que dije ‘bah ya no quiero esta cama que me ocupa la mitad de la habitación' porque en Madrid igual tienes que convivir porque si no sales súper caro entonces claro la habitaciones tampoco son muy grandes entonces para aprovechar el espacio dije ‘voy a cambiar la cama, cama de una plaza superbién no sé qué no sé cuánto'. Y como siempre la vida tiene mil formas de dar vuelta a las cosas y cuando menos lo esperaba. Conoce a una nueva compañera de trabajo.

Fue justo después de que cambie la cama grande por la cama chica. Trabajamos en la misma empresa pero en un proyecto distinto y en día cuando recién llegó hablando de la vida me contó que ella jugaba fútbol y yo le dije ‘ah bueno yo también cuando vivía en Chile jugaba' ‘¿Necesitan a alguien en tu equipo?'. Me dijo ‘mira no por el momento pero sí yo sé que llegan a necesitar a alguien te voy a avisar.' Después pasó un tiempo y un día me escribe y me dice ‘Vero, recuerdas que un día me dijiste que si quedaba un puesto en el equipo estarías dispuesta a jugar' y yo ‘si, si' y me dice ‘ya ahora'. Ese día jugaron y perdieron 27 a cero.

Me encantó cuando terminamos el partido porque [decían] ‘bien chicos lo hicimos súper bien' no sé qué. El próximo martes tenemos de nuevo aquí las vemos podemos contar con ustedes' y como yo vi que no había ningún tipo de frustración ni echándonos la culpa a las nuevas porque habíamos perdido yo dije ‘claro que sí, este es el espíritu que me gusta'. Y ahora el tercer tiempo a tomarnos unas cañitas y a comer algo. Y me lo pasé súper bien.

Entre tragos y bocadillos Verónica se entera que una compañera que juega en el equipo de la empresa es abiertamente lesbiana. Automáticamente para las orejas y toma nota. Una semana más tarde Verónica vuelve a la cancha para otro amistoso y allí la conoce.

Me llamo Dolores. Vengo de España y me encanta la música.

Cuando terminó el partido se fueron a tomar unas cervezas y luego comenzaron a hablar de música.

Le gustan los grupos chilenos y yo [decía] ‘ah mira a mí también'. Y bueno ahí empezamos a charlar.

De pronto ya me di cuenta de que todos los días estábamos escribiendo mails. Ya teníamos un chat interno del trabajo y  [nos escribíamos] ‘¿ah hola cómo estás?'. Compartíamos temas musicales. ‘Oye mira la otra semana viene Denver…'ah si voy a ir ¿y tú? ‘Si, yo también voy a ir'. Y al principio ahí como que se empezó a formar como esta cercanía de, empezaba el día y era como ‘quiero decirle hola a Dolores' y hablar con ella. Con el transcurso del tiempo la amistad crece y a la larga Verónica comienza a ver a Dolores con otros ojos.

Yo dije ‘oh parece que esta es la persona que he estado esperando toda mi vida'. Y era como súper suavecita al hablar, súper simpática y yo dije ya, estoy enamorada.

Pero todavía Verónica tenía mil trabas. Se sentía tan insegura que va a hablar con un amigo que tiene un bar gay en Madrid y le dice

No sé qué hacer. Me gusta pero me da vergüenza y me dice ‘pero no le has dicho nada' y yo ‘no' me dijo ‘pero dile de una vez por todas, cuánto tiempo llevan hablando' ‘Ya  como tres meses' y me dijo ‘ya en mucho tiempo y ella te habla, ¿qué sientes tú?' y yo ‘igual, a lo mejor es que no se, te juro que no se' y me dijo ‘pues mira'  ‘po tipo' porque en ese tiempo tenía el pelo corto y como chilena siempre digo po me decía ‘ mira po tipo, tu llegas no sé cómo, declárate cuando puedas. Lo peor que puede pasar es que no se van a hablar nunca más va a pasar un tiempecito y van a tener que volver a hablar porque están jugando en el mismo equipo y no creo que se lo tome mal.' Yo dije, ya bueno lo voy a hacer. Y me costó, me costó hasta que ya un día le dije que me gustaba y fuese así como [respiración profunda], cri cri.

Así y todo para Dolores lo que pasó fue…

Maravilloso. Quedamos en un parque donde ella solía vivir que además ya no conocía. Estuvimos allí la primera vez que quedamos después de hablar de lo que sentíamos estuvimos ahí un ratito por la tarde me acuerdo que era un poco de frío y luego pues nada nos fuimos cada una a nuestra casa y yo la verdad no quería que se fuera. O sea me acuerdo que tenía el olor de su mano en la mía y es que no me quería lavar las manos.

Porque todo fue tan bien como súper paulatino y eso también me gustó aunque existiera este el tema de cuando tú estás con el amor a full, apasionado qué sé yo, también mantener el espacio porque era mi primera vez en donde estaba formando una relación. No sabía cómo hacerlo. Me sentía así, cero experiencia. Pero fue para mí fantástico, se me salía el corazón por la boca.

¿Y qué hiciste fuiste a comprar una cama doble?

Eh si, la tuvimos que comprar después. Así que sí, así fue de vuelta a la cábala. Pero fue tan chistoso que totalmente no me lo creía.

Totalmente enamorada Verónica recupera las fuerzas para volver a mirarse al espejo, sin vergüenza o temor.

Abiertamente hoy a mí me gustan las mujeres fue hasta que conocí a Dolores. Nadie sabía que a mí me gustaba, que yo era lesbiana y me gustaba las chicas.

Tenía mi tranca que venía desde que vivía en Chile y ya yo no estaba segura, ya me había dado por vencida y era como para que lo voy a contar. Pero también no lo encontraba justo hasta que llegó Dolores dije ‘ya‘.

Pero la historia no termina aquí. A Verónica todavía le falta decírselo a su familia pero tenía miedo.

Ya la gente mayor, entre comillas no es que me diera lo mismo pero si le gustaba bien, si no le gustaba bien también. En ese sentido me iba a dar un poquito lo mismo. Pero si lo que me preocupa porque yo tengo una muy buena relación con mi sobrino, que entrecomillas no son mis sobrinos directos pero son los más pequeños de la familia y me llevo muy bien con ellos. Y ahí tenía mucho mucho miedo de la reacción que iban a tener ellos.

Lo pensó bastante y finalmente decide ir de visita a Chile con Dolores para enfrentar a su familia y compartir el secreto que les había ocultado durante décadas. Lo que ocurre la toma por sorpresa.

Llegue con Dolores y me decían ‘ah quienes tu amiga' ‘no si no es mi amiga, ella es mi pareja' y se me quedaban mirando y se ríen. Y yo decía ‘pues no es mi polola'. Y me dicen ‘ah pues hola Dolo'. Y cuando llegué a casa me preguntaban ‘donde está la Dolo, donde está la Dolo' y yo ‘oye no quieres jugar conmigo, un abrazo un beso. Ah sí, dónde está la Dolo. La adoraban, me encantó.

Mientras Verónica se regocija de alegría por el amor y afecto de su familia Dolores reflexiona sobre su suerte de haber encontrado a Verónica.

Ella es muy risueña, es súper alegre, bueno es inteligente, es muy positiva, es muy divertida también es muy buena persona y además es bastante sensata. Eso a mí me encanta. Y esa mezcla final con la persona y sus distintos matices son los que te llegan también.

Creo que me ha mejorado porque, a ver hombre, si estás con la persona que tú quieres, pues obviamente ves el mundo mucho mejor y si tú ves a un mundo mejor pues creo que ayuda también a que tu hagas las cosas mejor y todo va mejor porque entiende que hay gente que nunca pasa por un proceso de enamoramiento, desafortunadamente. Pero si todo el mundo tuviera la oportunidad de experimentar esto se daría cuenta de que las cosas pueden ir mejor de lo que a veces parece. Que sí hay percances hay percances. Eso no lo quita nadie. Acompañando pues tú puedes enfrentarte a cosas con más ánimo con más fuerza que si estuvieras sola. Pero sí que es verdad que falta amor en el mundo. Hay gente a la que no tiene pareja y que espera tener pareja y creo que eso puede ser una especie de algo que está dentro que te va carcomiendo un poquito y que esas personas no tengan la opción o no tengan la suerte de encontrar a alguien afín. Eso es triste.

Y a veces me da un poco de miedo, sí porque es como estoy en un momento en que no me lo creo. Y tengo un poquito de miedo de que como cuando van las cosas muy bien es como algo que esto no va a durar para siempre pero obvio que nada dura para siempre, que circular pero lo estoy disfrutando mucho. Porque al principio no fue para nada fácil. Para nada. Recién es como que me estoy sintiendo bien.

El amor se busca pero también te encuentra. Para encontrar el amor Verónica se dio cuenta que primero tenía que ir a buscarse ella misma. O si no el amor nunca la encontraría. Al darse permiso para amar su vida es más amplia. En este momento está viviendo en Melbourne después que a Dolores le ofrecieron un contrato de trabajo. Es más, hace poco consiguieron la residencia australiana justo después que Verónica encontró un trabajo que adora. Ahora cuando mira por la ventana de su departamento en Melbourne sonríe de alegría. Finalmente encontró su media naranja para compartir la vida un hogar y su cama doble.

Esta historia fue producida con el apoyo de radio SBS. Fue escrita y editada por Marcia De Los Santos. La mezcla de sonido es de Cara Beltrame. Para escuchar más historias en español visita nuestra página de internet sbs.com.au/spanish. Si te perdiste los capítulos anteriores de Caras del Amor puedes escucharlos a través de la aplicación SBS Radio app o a través de Itunes o mediante tu aplicación favorita para escuchar podcasts. Soy Marcia Se Los Santos, gracias por escuchar.